Que el gobernador priista Héctor Antonio Astudillo Flores se faje los pantalones y someta al orden a los transportistas al incrementar abusivamente la tarifa de 6 a 7 pesos, y no solo cese, sino meta a la cárcel su subordinado Jesús Zamora Cervantes, hasta el mediodía seguían cobrando la “nueva tarifa” y respondía “yo voy a seguir cobrando, Astudillo no es mi patrón” .