Que el delegado de SEDESOL federal, Armando Soto Díaz, aclare que entiende por pobreza, porque aseguró que somos en Guerrero un millón de pobres y cómo le hizo para que más de 300 mil guerrerenses, tengan una alimentación, sana, variada y suficiente, esperemos que su declaración no sea otro sueño guajiro.