Mientras los ciudadanos que son de aquí y otros que vienen de muy lejos de la geografía guerrerense al trasladares se gastan su dinero, pasan hambre, peripecias, como esperar por muchas horas a su diputado de alguno de los partidos de la LXI legislatura local, muchas veces no son recibidos, pero ellos si los atienden a cuerpo de rey con el servicio de almuerzo, comida, cena y café por los meseros del restaurante “Amaranto”, para luego salir corriendo al pleno, estas escenas se repiten cada vez que hay sesiones legislativas como la registrada ayer jueves de la presente semana. (Fotos: Domingo Francisco Reyes).