𝗔𝗹𝗴𝗼 𝗺á𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗽𝗮𝗹𝗮𝗯𝗿𝗮𝘀


 
 𝙈𝙪𝙩𝙖𝙘𝙞ó𝙣 𝙟𝙪𝙨𝙩𝙖 𝙥𝙖𝙧𝙖 𝙪𝙣 𝙢𝙖ñ𝙖𝙣𝙖 𝙛𝙧𝙖𝙩𝙚𝙧𝙣𝙤

 
“𝘏𝘢𝘺 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘰𝘨𝘳𝘢𝘳 𝘭𝘢 𝘱𝘳𝘰𝘵𝘦𝘤𝘤𝘪ó𝘯 𝘣𝘦𝘯é𝘧𝘪𝘤𝘢 𝘶𝘯𝘪𝘷𝘦𝘳𝘴𝘢𝘭 𝘦𝘯 𝘴𝘢𝘭𝘶𝘥; 𝘺, 𝘦𝘯 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘢𝘲𝘶𝘦𝘭𝘭𝘰, 𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘰𝘴 𝘩𝘢𝘨𝘢 𝘮á𝘴 𝘩𝘶𝘮𝘢𝘯𝘰𝘴 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦 𝘴í, 𝘮á𝘹𝘪𝘮𝘦 𝘦𝘯 𝘶𝘯 𝘮𝘰𝘮𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘥𝘦 𝘪𝘮𝘱𝘢𝘤𝘵𝘰 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘪𝘯𝘵𝘦𝘭𝘪𝘨𝘦𝘯𝘤𝘪𝘢 𝘢𝘳𝘵𝘪𝘧𝘪𝘤𝘪𝘢𝘭, 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘳𝘦𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘦 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘫𝘢𝘮á𝘴 𝘦𝘴𝘧𝘶𝘦𝘳𝘻𝘰 𝘺 𝘩𝘶𝘮𝘢𝘯𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘤𝘰𝘮𝘣𝘢𝘵𝘪𝘳 𝘦𝘭 𝘥𝘦𝘴𝘦𝘮𝘱𝘭𝘦𝘰 𝘺 𝘭𝘢 𝘱𝘰𝘣𝘳𝘦𝘻𝘢”.
=============================
Víctor CORCOBA HERRERO/ Escritor Español
============================= 

Nos hemos globalizado. Ahora nos resta continuar uniendo pulsos, haciendo camino, despojándonos de intereses egoístas, entregarnos a una transición ecuánime, donde nadie se sienta excluido. Esto requiere de un níveo aliento por parte de todos, que es lo que entrelaza la sostenibilidad medioambiental con la justicia social, lo que garantiza el cambio sereno, con la creación de empleo y fuertes medidas de protección social. Para esto, pues, no hace falta armarse, sino amarse de verdad. Lo importante es quererse, fomentar la cultura del abrazo especialmente con los más vulnerables, creando una mano de obra compartida y eficaz; pues lo importante es dar prioridad, tanto a las personas, como al planeta en el que moramos. 
Desde luego, la globalización y la interdependencia de los diversos cultos y culturas, están abriendo nuevas oportunidades de conocerse y de reconocerse como activo social, que ha de mejorar el nivel de vida en todo el mundo, al mismo tiempo que persisten los obstáculos para que haya una mayor integración y una participación plena de cada pulsación viviente. Por ello, es capital situar la imparcialidad mutua en el epicentro de las agendas políticas internacionales, nacionales y regionales. Hay que lograr la protección benéfica universal en salud; y, en todo aquello, que nos haga más humanos entre sí, máxime en un momento de impacto de la inteligencia artificial, lo que requiere como jamás esfuerzo y humanidad para combatir el desempleo y la pobreza. 
Sabemos, además, que la humanidad en su conjunto no está fuera de peligro. Las temperaturas están subiendo, los ecosistemas están desapareciendo y la contaminación continúa siendo una amenaza mortal. Naciones Unidas no deja de advertirlo, ya que los avances en todos los frentes siguen siendo lentos y desiguales. Indudablemente, todos estamos llamados a impulsar el espíritu cooperante. Son problemas globales que requieren soluciones globales. Junto al cuidado de la casa común, está el aluvión de actos de terror y extremismo violento que nos acorrala, hasta el extremo de la desolación, al ver cómo se extiende un tenebroso soplo de impunidad. La perspectiva de una guerra nuclear continúa siendo, desenfrenadamente, un riesgo claro y presente. 
Ante este cúmulo de desastrosas realidades, la globalización exige entonces ser acompañada de una legislación común; puesto que, a nivel general se han de buscar soluciones jurídicas que garanticen el mantenimiento de la concordia, regularicen la marcha de la economía planetaria para asegurar a todas las naciones los beneficios del desarrollo y ensanchen la vigencia ecuménica del respeto de los derechos humanos y de la dignidad de la persona. Que esto se lleve a buen término es responsabilidad conjunta, tanto de las organizaciones universales, como de aquellas regionales. Indudablemente, los esfuerzos de unificación económica y de coordinación política han de sentir la urgencia de mejorar la condición de todos, especialmente de los más desvalidos.
Sea como fuere, será saludable conjuntamente salir de la pasividad y el pesimismo, no dejarse abatir por la angustia ni por la resignación. Cada cual, consigo mismo, es protagonista de su propia historia. No hay que vencerse, hay que tomar impulso y no desfallecer en la lucha por un orbe más habitable, con poéticas de mano extendida siempre y políticas racionales equitativas que afiancen la moralidad, para que todos tengamos un salario decente y los derechos sociales adecuados; si no hay esto, la lógica del descarte material y el rechazo humano se va a extender, deshumanizándonos por completo. El hermanamiento llega por la unión de latidos, haciendo efectivo el afecto en nuestra vida, a través de nuestras relaciones familiares y en la acción específica de cada momento corporativo.
corcoba@telefonica.net
19 de febrero de 2025.-
#𝘌𝘹𝘪𝘨𝘪𝘳𝘭𝘦𝘊𝘭𝘢𝘶𝘥𝘪𝘢𝘤𝘶𝘮𝘱𝘭𝘢.

Comentarios

Entradas populares de este blog

"1938, cuando el petróleo fue nuestro";Ahora solo en película

𝗟𝗮 𝘇𝗼𝗻𝗮 𝗽𝗿ó𝘅𝗶𝗺𝗮 𝗱𝗲 𝗱𝗲𝘀𝗮𝗿𝗿𝗼𝗹𝗹𝗼

𝗖𝗲𝗻𝘁𝗲𝗻𝗮𝗿𝗶𝗼 𝗱𝗲𝗹 𝗻𝗮𝘁𝗮𝗹𝗶𝗰𝗶𝗼 𝗱𝗲 𝗖𝗼𝗵𝗶𝗻𝘁𝗮 𝗚𝘂𝗲𝗿𝗿𝗲𝗿𝗼 𝗔𝗽𝗮𝗿𝗶𝗰𝗶𝗼