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Vรญctor CORCOBA HERRERO/ Escritor espaรฑol
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Reconstruir la confianza y modificar el estilo de movimientos, debe ser nuestro afรกn y desvelo. De entrada, me emocionan esas gentes que son forjadores de humanidad, que cultivan tanto el buen decir como el obrar, en su itinerario viviente. Andamos necesitados de ternura, pues activemos la correcciรณn. Un homenaje a los soรฑadores, a los artรญfices del cambio en todo el mundo, que hacen gala de la innovaciรณn, de la creatividad y el emprendimiento. En este sentido, tanto los jรณvenes como los mayores no sรณlo son ciudadanos con igualdad de derechos, sino tambiรฉn poderosos agentes de trasformaciรณn, cuyas voces deben ser plenamente escuchadas. Sin duda, toda aportaciรณn al servicio de la vida y del bien comรบn, nos imprime un bienestar singular inenarrable.
Realmente, son estas acciones realizadas de corazรณn a corazรณn, las que nos animan a levantar la mirada y a navegar por nuestros interiores, que es por donde debe empezar el reencuentro, para poder llevar amor allรก donde no lo hay, poniendo ademรกs comprensiรณn en donde sรณlo se hallan absurdas contiendas. No queremos seguir viviendo asรญ. Necesitamos un planeta seguro y unos moradores mรกs poรฉticos que poderosos. Es necesario que retorne la concordia y que, al mismo tiempo, รฉsta se instituya sobre bases muy sรณlidas. Comience por volver la paz a nuestro hogar, lo que conlleva considerarse y quererse, para ser los inventores de la reconciliaciรณn de uno consigo mismo. Tenemos que conseguirlo: Querer hacerlo es poder llevarlo a buen tรฉrmino.
Conciliados es como se puede aliviar la pobreza, reducir las emisiones y mejorar la salud, promover la igualdad y apoyar el desarrollo sostenible en todo el orbe. Precisamente, a lo largo de la historia, el ingenio y la lucidez del ser humano, las ideas y el descubrimiento de nuevos horizontes, nos han permitido superar los retos y avanzar. Para volver al buen camino y alcanzar los nuevos anhelos, tenemos que aprovechar la aportaciรณn colectiva como elemento impulsor para liberar tensiones y capturar latidos existenciales, a fin de afrontar esos desafรญos mundiales comunes a todos. Por cierto, en referencia a estas situaciones complejas, en demasiadas ocasiones se pone de relieve la falta de un servicio de asistencia social especรญfico para los desfavorecidos.
El mundo de la marginalidad estรก ahรญ, en cualquier esquina del planeta. Lo mismo sucede con el ciclo de represalias, o con las destrucciones insensatas, hay que poner orden y conjugar el amor como bandera. Indudablemente, el eficiente soplo solidario conjunto, forma comunidades fraternas, que es lo que da una verdadera alegrรญa de vivir; y, al mismo tiempo, debe permitir a todos los pueblos el llegar a ser autores de su destino. De ahรญ, lo sustancial de ir tejiendo vรญnculos entre todos para logar un cambio, no รบnicamente ambiental sino socioambiental, para generar atmรณsferas armรณnicas y un mejor saber acompaรฑarse. Seguramente tendremos que diseรฑar otros modos de transitar por aquรญ abajo, al menos para ayudar a reducir los costes de producciรณn y el impacto circunstancial.
Los bocetos del futuro serรกn obligatoriamente ecolรณgicos, y el sistema de propiedad intelectual alentarรก a los proyectistas a fabricarlos, acogiendo la protecciรณn de los esbozos originales contra la copia e imitaciรณn no autorizada. Seamos autรฉnticos. No olvidemos que la capacidad de la humanidad para crear e innovar es ilimitada. Es un recurso humano vital con un potencial vivencial, que no conoce de edades ni de espacios. A mi juicio la situaciรณn no es fรกcil para nadie, las sombras del mal estรกn por todos los rincones, lo que nos demanda a enfocar la labor desde una cultura del encuentro, creando redes, ayudรกndonos unos a otros. Sea como fuere, tenemos que salir de la era del caos, con nuevos procesos de acciรณn vinculada, a partir de un espรญritu de motivaciรณn en valores. A estimarse, luego.
corcoba@telefonica.net
24 de abril de 2024.-
#๐๐ฐ๐ต๐ข๐ฑ๐ฐ๐ณ๐ฒ๐ถ๐ช๐ฆ๐ฏ๐ฒ๐ถ๐ช๐ฆ๐ณ๐ข๐ด๐ณ️
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