๐๐ผ๐บ๐ฝ๐ฎ๐ฟ๐๐ถ๐ฒ๐ป๐ฑ๐ผ ๐ฑ๐ถรก๐น๐ผ๐ด๐ผ๐ ๐ฐ๐ผ๐ป๐บ๐ถ๐ด๐ผ ๐บ๐ถ๐๐บ๐ผ
๐๐ฉ๐๐ก๐ก๐ ๐๐๐ง๐๐จ
(๐๐ฏ ๐ฆ๐ญ ๐จรฉ๐ฏ๐ฆ๐ด๐ช๐ด ๐ฅ๐ฆ๐ญ ๐ท๐ฆ๐ณ๐ด๐ฐ ๐ข๐ฑ๐ข๐ณ๐ฆ๐ค๐ฆ ๐ฏ๐ถ๐ฆ๐ด๐ต๐ณ๐ข ๐ฎ๐ฐ๐ณ๐ข๐ฅ๐ข ๐ค๐ฐ๐ฎรบ๐ฏ ๐บ ๐ณ๐ฆ๐ข๐ฑ๐ข๐ณ๐ฆ๐ค๐ฆ ๐ค๐ฐ๐ฏ๐ด๐ต๐ช๐ต๐ถ๐ช๐ฅ๐ข ๐ฑ๐ฐ๐ณ ๐ถ๐ฏ๐ข ๐ข๐ฎ๐ฑ๐ญ๐ช๐ข ๐ณ๐ข๐ฎ๐ช๐ง๐ช๐ค๐ข๐ค๐ชรณ๐ฏ ๐ฅ๐ฆ ๐ข๐ป๐ถ๐ญ๐ฆ๐ด ๐ค๐ฆ๐ญ๐ฆ๐ด๐ต๐ฆ๐ด. ๐๐ถ๐ด๐ต๐ฆ๐ฏ๐ต๐ฐ ๐ฆ๐ด๐ฆ๐ฏ๐ค๐ช๐ข๐ญ ๐ฑ๐ข๐ณ๐ข ๐ฆ๐ญ ๐ฑ๐ฐ๐ฆ๐ต๐ข ๐ฒ๐ถ๐ฆ ๐ต๐ฐ๐ฅ๐ฐ๐ด ๐ญ๐ญ๐ฆ๐ท๐ข๐ฎ๐ฐ๐ด ๐ฅ๐ฆ๐ฏ๐ต๐ณ๐ฐ ๐บ ๐ฑ๐ถ๐ฏ๐ต๐ข๐ญ ๐ฅ๐ฆ ๐ช๐ฏ๐ด๐ฑ๐ช๐ณ๐ข๐ค๐ชรณ๐ฏ ๐ฆ๐ฏ ๐ฏ๐ถ๐ฆ๐ด๐ต๐ณ๐ข ๐ฑ๐ณ๐ฐ๐ฑ๐ช๐ข ๐ฃ๐ช๐ฐ๐จ๐ณ๐ข๐งรญ๐ข ๐ฅ๐ฆ ๐ด๐ฐรฑ๐ข๐ฅ๐ฐ๐ณ. ๐๐ญ ๐ฆ๐ฎ๐ฑ๐ถ๐ซ๐ฆ ๐ฆ๐ด ๐ฆ๐ญ ๐ฑ๐ถ๐ญ๐ด๐ฐ ๐ค๐ฐ๐ฏ ๐ด๐ถ ๐ฑ๐ข๐ถ๐ด๐ข ๐ฅ๐ฆ ๐ต๐ช๐ฏ๐ต๐ฆ๐ด. ๐ ๐ฆ๐ญ ๐ฅ๐ฆ๐ด๐ต๐ช๐ฏ๐ฐ, ๐ถ๐ฏ ๐ฐ๐ญ๐ฆ๐ข๐ซ๐ฆ ๐ฒ๐ถ๐ฆ ๐ด๐ฆ ๐ฉ๐ข๐ค๐ฆ ๐ข ๐ญ๐ข ๐ญรญ๐ณ๐ช๐ค๐ข, ๐ซ๐ถ๐ด๐ต๐ฐ ๐ค๐ถ๐ข๐ฏ๐ฅ๐ฐ ๐ฏ๐ข๐ค๐ฆ ๐ฆ๐ญ ๐ง๐ญ๐ถ๐ซ๐ฐ ๐บ ๐ฆ๐ญ ๐ณ๐ฆ๐ง๐ญ๐ถ๐ซ๐ฐ ๐ฅ๐ฆ ๐ญ๐ข๐ด ๐ค๐ฐ๐ณ๐ณ๐ช๐ฆ๐ฏ๐ต๐ฆ๐ด ๐ฅ๐ฆ ๐ข๐ช๐ณ๐ฆ, ๐ค๐ฐ๐ฏ ๐ญ๐ฐ๐ด ๐ญ๐ฐ๐ฐ๐ณ๐ฆ๐ด ๐ข๐ญ ๐๐ณ๐ฆ๐ข๐ฅ๐ฐ๐ณ ๐บ ๐ญ๐ฐ๐ด ๐ฅ๐ฐ๐ญ๐ฐ๐ณ๐ฆ๐ด ๐ฅ๐ฆ ๐ญ๐ข๐ด ๐ค๐ข๐ฅ๐ฆ๐ฏ๐ข๐ด; ๐ฑ๐ณ๐ฆ๐ต๐ฆ๐ฏ๐ฅ๐ช๐ฆ๐ฏ๐ฅ๐ฐ ๐ณ๐ฆ๐ฎ๐ข๐ณ, ๐ฆ๐ฏ ๐ถ๐ฏ ๐ณ๐ฆ๐ค๐ฐ๐จ๐ช๐ฎ๐ช๐ฆ๐ฏ๐ต๐ฐ ๐ฏรก๐ถ๐ต๐ช๐ค๐ฐ).
๐.- ๐๐ผ ๐๐๐๐๐๐ผ ๐๐ผ๐๐๐๐๐๐ผ; ๐๐ผ๐๐ผ ๐๐๐๐๐๐ผ ๐ ๐ผ๐๐ผ๐ฝ๐ผ๐๐๐ผ ๐๐๐๐๐๐๐ผ
Al romper el alba en el ocรฉano celeste,
todo se colma de paz y se calma de luz,
todo se torna de Dios y a Dios regresa,
todo se crece de sueรฑos y nada mengua,
porque el soplo de la verdad es la vida.
No hay mejor amanecida en la mirada,
que recubrirse de caricias con las olas,
para descubrirse sol en la masa de agua;
que confesarse marinero de sus azules,
porciรณn del cuerpo y tripulante del alma.
En cada madrugada brota un desahogo,
como prenda de quietud y gozo de rocรญo;
tan sรณlo hemos de marchar a poner proa,
a convenir una sonrisa en los mรบsculos,
y a modular una reverencia a la pureza.
๐๐.- ๐ผ๐๐ผ๐๐๐ผ๐ ๐๐ผ๐ ๐ผ๐ฟ๐๐๐๐๐; ๐๐ผ๐๐ผ ๐๐๐๐๐๐๐ ๐๐๐ ๐๐๐๐๐ผ
Nuestra barca se embarca cada aurora,
nos pide que rememos hacia adentro,
que no cesemos ni en las tempestades,
pues lo trascendental estรก en hallarse,
en fijarse en la fuente de amor que soy.
Somos seres de cielo, tierra y ocรฉano;
navegantes en perenne buceo รญntimo,
marinos en nuestra propia bรบsqueda.
Con la asistencia del pescador divino,
no habrรก marea que nos desuna la red.
El puerto estarรก a salvo para trascender,
para tomar escarceo y soltar los brazos;
pues aquel que se quiere, se comprende,
protege a que haya quietud en la resaca,
previo acogerse y recogerse en el Seรฑor.
๐๐๐.- ๐พ๐๐ ๐๐ผ ๐๐ผ๐ฟ๐๐ ๐ผ ๐ฝ๐๐๐ฟ๐;๐๐ผ๐๐ผ ๐๐๐๐ ๐ฟ๐๐ ๐๐๐ฝ๐ ๐ฟ๐ ๐๐ผ๐
En cada dรกrsena hay una historia viva,
que nos vive y nos revive sin concluir;
es como esa pleamar que va y vuelve,
con aspiraciรณn de nacer y de renacerse,
acompaรฑado y acompasado por el mar.
La manejada sobre el lรญquido elemento,
nos pone sobre el horizonte del asombro,
con el pasmo de lo visual hacia la Madre,
que nos conduce al espรญritu de la certeza,
hasta que por la cruz se curen los golpes.
Estrella de los mares y faro de fulgor,
consuelo maternal siempre en pilotaje,
concilia y reconcรญlianos con tu silencio,
que las discordias alivien en concordia,
y haz que Cristo renueve los corazones.
Vรญctor CORCOBA HERRERO
corcoba@telefonica.net
15 de julio de 2023.-
#๐ค๐รฉ๐ฑ๐ฎ๐๐ฒ๐๐ป๐๐ฎ๐๐ฎ. ๐ก ๐
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer La Crรณnica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.