“๐ฆ๐ฒ ๐ฑ๐ฒ๐๐ฐ๐ผ๐ป๐ฒ๐ฐ๐๐ฎ ๐ ๐๐ฒ ๐ฒ๐ป๐๐ฟ๐ฒ๐ด๐ฎ ๐ฎ ๐๐ถ๐ผ๐, ๐ป๐ผ ๐๐ฒ ๐๐ถ๐ฒ๐ป๐๐ฒ ๐ฒ๐น ๐ฑ๐ผ๐น๐ผ๐ฟ”
๐รฉ๐๐ฉ๐ค๐ง ๐๐รบ๐ก ๐๐ค๐ฃ๐ฏรก๐ก๐๐ฏ.TAXCO DE ALARCON, GRO.— Ni la cera caliente, las espinas de zarza enterradas en los hombros o las puntas de acero clavadas cientos de veces en la espalda les duelen cuando los penitentes caminan descalzos por empinadas calles durante la Semana Santa de Taxco, Guerrero.
“Cuando uno inicia te pones en manos de Dios, te desconectas y te entregas a รฉl, cuerpo, alma y espรญritu, en el momento vas haciendo tu oraciรณn, te concentras en tu oraciรณn, pides, oras, uno se desconecta y se entrega a Dios, no se siente el calor, no se siente la ligadura en tus tobillos, no sientes cansancio porque lo haces con amor, amor a Dios”, expresรณ una de las decenas de mujeres que participan en las procesiones, integrante de la Hermandad de รnimas de la Santa Veracruz.
Desde hace dรฉcadas, durante la Semana Santa por las calles de Taxco caminan cientos de penitentes, hombres y mujeres que con el rostro cubierto flagelan su cuerpo de diversas formas.
Algunos cargan sobre su espalda y hombros un rollo de varas de zarza con espinas que llega a pesar hasta 60 kilos.
Otros utilizan un instrumento denominado disciplina, una cuerda con plomo y clavos con la que azotan su espalda durante horas hasta terminar en carne viva.
Mujeres penitentes amarran pesadas cadenas a sus pies descalzos y caminan encorvadas mientras llevan en las manos velas cuya cera cae directamente sobre su cuerpo.
“Nosotras llevamos un cabresto en la cintura, va a nuestra cintura, llevamos unas cadenas amarradas a los tobillos y llevamos velas de un kilo cada vela, no en todas las procesiones salimos con velas, pero llevamos una cruz, eso es lo que mรกs llevamos.
“Las velas es la luz, la luz para que nosotros iluminemos, las cadenas es como el sacrificio pues, de arrastrarlo, el esfuerzo, y el cabresto va a nuestro cuerpos… de una forma o de otra sentimos lo que Dios sintiรณ en el momento”.
Todos los penitentes recorren las empinadas calles de Taxco con los pies descalzos
La intenciรณn de cada penitente al participar en la procesiรณn es distinta, pero el comรบn denominador es intentar ser una mejor persona, cumplir una manda o agradecer a Dios las bondades que reciben.
“La razรณn รบltima o primera es la santificaciรณn, el ser santos como Dios, estar unidos, sean uno como yo, dice Jesucristo, somos uno con el Padre, la santificaciรณn, si tenemos una persona que es santa, santifica a su familia, santifica el ambiente donde se encuentra el lugar de su trabajo, santifica al pueblo, a la ciudad, al estado, santifica a Mรฉxico y al mundo, ese es el fin, el motivo, digamos รบltimo. Hay otros motivos, por ejemplo, alguien promete ser mejor habiendo recibido un favor, aquรญ es muy famoso esto, una manda”, explicรณ Tomรกs Martรญnez Rivera, pรกrroco de Santa Prisca.
Durante su recorrido, los penitentes realizan oraciรณn y reflexionan.
La participaciรณn en las procesiones es anรณnima, por eso los penitentes cubren su rostro con una capucha negra con la que solo se les ven los ojos.
“La vestimenta negra ea la renuncia al pecado, por eso van vestidos totalmente de negro; la cruz y la flagelaciรณn va siendo el derrame de sangre de la flagelaciรณn de Nuestro Seรฑor Jesucristo; el arrastre de cadenas simboliza el arrastre del pecado de todos los seres pecadores de este mundo, y el rollo de zarzas representa la cruz de Cristo cuando va en su trayectoria, es parte de su pasiรณn de Jesucristo”, dijo Cรฉsar Tagle Reyes, integrante de la Hermandad Mayor de Encruzados.
Las heridas que sufren quienes participan en las procesiones pueden llegar a durar hasta 7 dรญas, aunque las cicatrices les quedan toda la vida.
Sin embargo, aseguran que la pasiรณn y fe con la que caminan durante la procesiรณn hace que no sientan dolor alguno.
“No se puede definir con palabras, cuando uno estรก totalmente en la penitencia, cuando uno estรก totalmente entregado en el momento del acto penitencial, le puedo decir y le puedo asegurar que cuando uno estรก preparado, cuando uno prepara su cuerpo y lo liga con el espรญritu, el sufrimiento no se va sintiendo, no se siente, es una manera si se puede decir asรญ, hasta de gozo, hasta de gozo, pero no en el sentido de morbo, sino en un sentido de cambio de vida, en un sentido de conocimiento, mรกs espiritual, mรกs a que me lleve enfocado una vida mejor, a una vida mejor, humano, social, espiritual, eclesiรกstico, si asรญ lo podemos decir”, dijo desde el anonimato otro de los penitentes, integrante de la Hermandad Cristo es el Camino.
Algunos de los penitentes participan en las procesiones para agradecer a Dios las bondades recibidas durante el aรฑo.
“La sensaciรณn es la misma desde el primer aรฑo que yo estoy participando, siempre son nervios, antes de que me pongan el rollo son nervios, cuando una vez me amarran, todo ya es en manos de Dios y se me olvida todo, me entregรณ completamente a lo que estoy haciendo, en oraciรณn y caminando con fe y con oraciรณn.
“Esto se trata para mรญ de agradecer por todo lo que Jesรบs nos da, que es trabajo, una familia, el simple hecho de tener salud porque mas que nada si una persona no tiene esa preparaciรณn de salud y fe, pues es imposible casi salir e intentar hacer lo que hacemos. Nosotros lo hacemos para caminar con Jesรบs”.
En Taxco de Alarcรณn esta tradiciรณn tiene registro desde el aรฑo 1598, sin embargo, se lleva a cabo regularmente desdela dรฉcada de 1920.
Durante todo el aรฑo, los penitentes se preparan fรญsica, mental y espiritualmente
Para ello deben acudir cada semana a reuniones de oraciรณn, participar en dos retiros al aรฑo, cuatro reuniones de juntas generales y dos extraordinarias.
Ademรกs deben participar activamente con servicios de altar en las parroquias de la comunidad.
Todo eso para tener la fortaleza y soportar las procesiones que durante horas recorren las calles del Pueblo Mรกgico de Taxco.(๐ฃ๐ข๐ซ๐ฐ ๐ฑ๐ข๐ญ๐ข๐ฃ๐ณ๐ข.๐ค๐ฐ๐ฎ.๐ฎ๐น).
#QuรฉdateEnCasa๐ก๐
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