๐๐ผ๐บ๐ฝ๐ฎ๐ฟ๐๐ถ๐ฒ๐ป๐ฑ๐ผ ๐๐ถรก๐น๐ผ๐ด๐ผ๐ ๐๐ผ๐ป๐บ๐ถ๐ด๐ผ ๐ ๐ถ๐๐บ๐ผ
๐๐ ๐ฟ๐๐ข๐๐ฃ๐จ๐รณ๐ฃ ๐๐ ๐ก๐ ๐๐๐จ๐๐ช๐
(๐๐ฆ๐ดรบ๐ด, ๐ข๐ญ ๐ข๐ด๐ค๐ฆ๐ฏ๐ฅ๐ฆ๐ณ ๐ฉ๐ข๐ค๐ช๐ข ๐๐ฆ๐ณ๐ถ๐ด๐ข๐ญรฉ๐ฏ ๐ด๐ฆ ๐ณ๐ฆ๐ท๐ฆ๐ญ๐ข ๐ข ๐ดรญ ๐ฎ๐ช๐ด๐ฎ๐ฐ, ๐ค๐ฐ๐ฏ ๐ญ๐ข ๐ท๐ฆ๐ณ๐ฅ๐ข๐ฅ ๐ช๐ฏ๐ต๐ฆ๐ณ๐ช๐ฐ๐ณ ๐ฅ๐ฆ ๐ด๐ถ ๐ข๐ญ๐ฎ๐ข ๐บ ๐ฆ๐ฏ๐ต๐ณ๐ฆ๐จ๐ข๐ฏ๐ฅ๐ฐ ๐ฆ๐ญ ๐ฆ๐ด๐ฑรญ๐ณ๐ช๐ต๐ถ. ๐๐ญ๐ฐ๐ณ๐ข ๐ด๐ข๐ฏ๐จ๐ณ๐ฆ, ๐ฑ๐ถ๐ณ๐จ๐ข ๐ฏ๐ถ๐ฆ๐ด๐ต๐ณ๐ข๐ด ๐ฎ๐ช๐ด๐ฆ๐ณ๐ช๐ข๐ด, ๐ฅ๐ฆ๐ณ๐ณ๐ช๐ฃ๐ข ๐ญ๐ข ๐ฆ๐ฏ๐ฆ๐ฎ๐ช๐ด๐ต๐ข๐ฅ ๐ค๐ฐ๐ฏ ๐ด๐ถ ๐ค๐ข๐ญ๐ท๐ข๐ณ๐ช๐ฐ. ๐๐ดรญ, ๐ฉ๐ฆ๐ฎ๐ฐ๐ด ๐ฆ๐น๐ฑ๐ฆ๐ณ๐ช๐ฎ๐ฆ๐ฏ๐ต๐ข๐ฅ๐ฐ ๐ญ๐ข ๐ง๐ถ๐ฆ๐ณ๐ป๐ข ๐ณ๐ฆ๐ฏ๐ฐ๐ท๐ข๐ฅ๐ฐ๐ณ๐ข ๐ฅ๐ฆ๐ญ ๐ท๐ฆ๐ณ๐ฃ๐ฐ, ๐ณ๐ฆ๐ต๐ฐ๐ณ๐ฏ๐ข๐ฅ๐ฐ ๐ข๐ญ ๐ฏรญ๐ท๐ฆ๐ฐ ๐ท๐ฆ๐ณ๐ด๐ฐ ๐บ ๐ข ๐ญ๐ข ๐ซ๐ถ๐ด๐ต๐ข ๐ฑ๐ข๐ญ๐ข๐ฃ๐ณ๐ข, ๐ค๐ฐ๐ฏ ๐ญ๐ข ๐ฑ๐ณ๐ฐ๐ต๐ฆ๐ค๐ค๐ชรณ๐ฏ ๐ค๐ฆ๐ญ๐ฆ๐ด๐ต๐ช๐ข๐ญ ๐ฅ๐ฆ ๐๐ข๐ณรญ๐ข).
I.- ๐๐ ๐๐ข๐ ๐๐ก๐๐ข ๐๐ ๐ฅ๐๐ ๐ข๐ฆ
La poblaciรณn que aguarda al Mesรญas,
crea y se recrea en el enardecimiento,
une la tierra con el cielo, la hace viva,
enaltece de gozos todos los caminos,
toma el sol y remueve las oscuridades.
Es el soplo de acoger y de recogerse,
de lanzarse con laurel y de relanzarse,
de volver la vista al interior de cada ser,
de sentirse parte de esa ofrenda divina,
pรณrtico que nos lleva a la santa semana.
Florezca en nosotros la vida de Cristo,
tomemos la decisiรณn de acompaรฑarle,
de guardar y resguardar su gran amor,
dando fundamento a toda existencia,
y esparciendo la esperanza en los dรญas.
๐๐.- ๐๐ ๐ฅ๐๐๐ข๐ก๐๐๐๐๐๐๐ร๐ก ๐๐ข๐ก ๐๐๐ข๐ฆ
La tradiciรณn de la pasiรณn nos sublima,
y nos engrandece nuestra mรญstica fe,
nos lleva a profundizar sobre la cruz,
y nos devuelve a un hondo silencio,
para observar la noche de su agonรญa.
Los continuos oficios de este tiempo,
a quien fue triunfador de la muerte,
nos atraen a elevar al Seรฑor rogativas,
en acciones concretas de conversiรณn,
y de justa reparaciรณn de corazones.
El Padre, suculento en clemencia,
ha derramado sobre el ser humano,
su imperecedera bondad y verdad,
por medio del sacrificio de su Hijo,
para que nuestra savia no se disipe.
๐๐๐.- ๐๐ ๐๐๐ก๐๐จ๐๐๐ ๐๐๐ ๐ฆ๐จ๐ฃ๐๐๐๐๐ข
La alianza del Martirizado no ahoga,
sigue el camino de la mansedumbre,
nunca es un pacto armado, ¡nunca!,
tampoco es algo interesado, ¡jamรกs!,
es una donaciรณn de luz y existencia.
La Pascua brota de alegrรญa siempre,
es el saludo del Redentor nuestro,
que nos alienta corazรณn a corazรณn,
nos cita y nos resucita cada aurora,
vacรญos de dominio y llenos de amor.
Pasemos de lo terrenal a lo celeste,
abrรกmonos al alma de lo benigno,
cerrรฉmonos al espรญritu del maligno,
que con la piedad dada y recibida,
se fragua el hogar y se forja la paz.
Vรญctor Corcoba Herrero
corcoba@telefonica.net
01 de abril de 2023.-
#QuรฉdateEnCasa๐ก๐
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