𝗚𝗼𝘁𝗮 𝗱𝗲 𝗛𝗶𝘀𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮
Arturo Ríos Ruiz
𝙐𝙣 𝙗𝙪𝙚𝙣 𝙤𝙧𝙖𝙙𝙤𝙧 𝙩𝙧𝙖𝙗𝙖𝙟𝙖 𝙪𝙣 𝙡𝙚𝙣𝙜𝙪𝙖𝙟𝙚 𝙘𝙤𝙧𝙥𝙤𝙧𝙖𝙡...
Un buen orador trabaja un lenguaje corporal adecuado para el público y la idea que transmitirá. Esencial tener como base un mensaje estructurado para que la audiencia no pierda su atención. Yo conozco uno. Se llama Bernardino Vielma Heras, reconocido como de lo mejor en Guerreo, entre otros, nacido en Acapulco, pero escogió Tecpan de Galeana para toda su vida.
Recuerda mi hermano Armando, que recorrían la Facultad de Derecho; en un salón estaba Joel López Mayren, nacido en Oaxaca y acapulqueño por convicción. Los vio llegar y los anunció, les pidió participaran, mi hermano declamó la poesía de nuestro padre Canto al estado de Guerrero y Bernardino pronunció un discurso ante estudiantes en desorden.
Vielma Heras, inició su disertación y paulatinamente acaparó la atención ante su increíble habilidad y dominio de la palabra que hilvanaba frases que conmovían a la asistencia que interrumpían con aplausos.
Al cerrar su discurso pronunció la frase más llamativa por su contenido: “Los valientes buscan con la palabra el cielo y los cobardes con el orifico al infinito”.
El amplio salón explotó con ruidosas palmas. Un maestro en oratoria emocionado expresó: “Nunca en mi vida había escuchado una pieza como ésta ¡Bárbaro!
Bernardino fue tres veces campeón de Oratoria en guerrero, una entidad donde abundan elocuentes y hay muchos nombres sobresalientes, Jorge Montufar, Imperio Rebolledo, Antonio Alcocer y muchos más de gran talla, De acuerdo a la generalidad, pocos como él en esa materia.
Ocupó cargos públicos con honestidad y aún mantiene un respeto general desde hace muchos años.
Puede ser una imagen de 4 personas y texto que dice "GOTAS Un orador excepcional Bernardino Vielma de Acapulco, Pero entregó su corazón a Tecpan Bernardino Vielma H. Jesús Araujo Armando Ríos Ruiz"
#𝗤𝘂é𝗱𝗮𝘁𝗲𝗘𝗻𝗖𝗮𝘀𝗮. 🏡 💙
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