ARTÍCULO
Elías Azar
Juan López
La derrota es fría, lóbrega, umbrosa. La padecen con estoicismo, pocos. Genaro García Luna igual a El Chapo Guzmán no tienen tiempo siquiera para arrepentirse de sus fechorías, ante la avalancha de acusaciones correccionales sepultureras.
Caso símil el de Elías Azar acosado hoy por el látigo operador de Hacienda, UIF (Unidad De Inteligencia Financiera): Se desea una explicación del origen de tanto dinero acumula
do en sus haberes. Él quien nunca fue financiero bursátil, jamás hizo las veces de corredor de bienes inmuebles, productor industrial de cuños, ni generador de marcas en harinas, azúcar ni abarrotes. De lo único donde se ha ocupado y bien el señor Elías es en producir como burócrata partos de organigramas, simular gastos al aparato presupuestal, facilitar y aparentar erogaciones, tanto como fuese preciso y además ya de presidente en el Tribunal Superior de Justicia del D.F., hacer perdedizos cerca de mil quinientos millones de pesos anuales; extravíos de los depósitos hechos por indiciados para conseguir su libertad bajo fianza.La derrota es fría, lóbrega, umbrosa. La padecen con estoicismo, pocos. Genaro García Luna igual a El Chapo Guzmán no tienen tiempo siquiera para arrepentirse de sus fechorías, ante la avalancha de acusaciones correccionales sepultureras.
Caso símil el de Elías Azar acosado hoy por el látigo operador de Hacienda, UIF (Unidad De Inteligencia Financiera): Se desea una explicación del origen de tanto dinero acumula
Sus inversiones personales le dejan una cosecha en rentas anuales por 87 millones de pesos, la Secretaría de Hacienda ansía saber cómo llegó hasta sus alforjas este botín de muchos dígitos. Misterioso capital de la más sucia manera obtenido: venta de favores, tráfico de influencias, extorsiones, amenazas, confesiones en calabozo, todo con el goce y disfrute de una a toda prueba IMPUNIDAD: Sí, ya, cancelada. Pero fue la IMPUNIDAD del señor Elías la única explicación de su enriquecimiento.
En el desamparo sólo hay una figura muy triste: la de un gañán en agonía.
PD: “Las vacas de hoy son los carniceros de ayer”: Refrán.
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