SUMARIO DE SEGUNDA PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

Quedan en la orfandad
22 niños, tras masacre

Javier Francisco Reyes.—Tras el asesinato de vecinos de Alcozacán, municipio de Chilapa de Alvarez, para el Gobierno de Guerrero que encabeza Héctor Antonio Astudillo Flores del Partido Revolucionario Institucional (PRI), no está clara en que condiciones murieron los 10 indígenas el pasado viernes, uno tenía escasos 15 años y 9 dejaron en la orfandad a 22 n

iños.
De acuerdo con datos proporcionados por sus familiares y por la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias de los Pueblos Fundadores (CRAC-PF), el consejero Bernardino Sánchez Luna, explicó que  de los 10 sólo uno no pertenecía al grupo Sensación Musical y además, en ocasiones amenizaban fiestas con un equipo de sonido en distintas comunidades de la región tanto del municipio de Chilapa de Alvarez como de José Joaquín de Herrera (Hueycantenango).
También destacó que algunas de las víctimas ya habían prestado su servicio como policías comunitarios de su pueblo, aunque aclaró que actualmente no fungían como policías comunitarios, consejeros o coordinadores, cargos que son rotativos y designados en asamblea por las comunidades.
Dio a conocer que Tlayalpan, a donde fueron a tocar, y Mexcalcingo en donde sufrieron la emboscada son comunidades controladas por el grupo delictivo “Los Ardillos” y su policía por la Paz y la Justicia.
Dijo que los jóvenes artistas fueron a cumplir con el contrato porque no era la primera vez que salían a localidades que están fuera del territorio de la CRAC-PF y no habían sufrido incidentes, hasta esta vez que les prepararon la emboscada y los asesinaron a todos.
Luego detalló sobre lalista de las ahora víctimas, Marcos Fiscaleño Baltazar de 36 años, estaba casado con Josefina Pasado Ahuelicán de 36 años de edad, dejó sin su protección a ocho hijos, de 18, 15, 13, 10, 6, 4, 3 y 2 años de edad.
En tanto Juan Joaquín Ahuejote de 42 años, dejó a su esposa Esther Mendoza Mendoza y en la orfandad a cuatro hijos: de 12, 9, 6 y 3 años.
Por su parte, Crescenciano Migueleño Guapango de 31 años dejó a su esposa Maribel Morales Hilario de 31 años y en la orfandad a tres hijos, de 11, 3 y un año. En tanto, Israel Tolentino Ahuelicán de 24 años, quien estaba casado con Marina Tepetitlán Mendoza, dejó en el abandono a tres hijos, de 3 y 2 años, así como una niña de 4 meses.
José Julio Fiscaleño Hilario de 37 años de edad, dejó en el desamparo a su esposa Artemia Mendoza Pasado de 30 años, y en la orfandad a una hija de 6 años de edad. Igualmente, Antonio Mendoza Tolentino, tenía 24 años y dejó a su esposa Basilia Tepetitlán Chino de 25 años con ocho meses de embarazo.
Regino Fiscaleño Chautla de 21 años estaba casado con Fidencia Tepetitlán y dejó a un hijo de un año de edad. Asimismo, Cándido Fiscaleño Hilario de 17 años estaba casado con Aurelia Flores Mendoza de 16 años y dejó en el abandono a un hijo de un año.
Lorenzo Linares Juárez de 32 años dejó a su madre María Antonia Jiménez de 57 años, era el único sostén de ella, debido a que su esposo los abandonó hace años. El más joven es Israel Mendoza Pasado quien apenas tenía 15 años, era alumno de secundaria, y el que ayudaba a su mamá María de Jesús Pasado, quien ahora quedó en el abandono, contaron por teléfono familiares de Israel.
El coordinador de la CRAC-PF informó  que por lo menos Marcos Fiscaleño Baltazar, Crescenciano Migueleño Guapango y José Julio Fiscaleño Hilario, ya habían prestado sus servicios en años anteriores como policías comunitarios de la CRAC-PF.
SALVO  ESCAPO RAPTADO POR LOS ARDILLOS
Luego de que fuera raptado por la mañana de ayer lunes, presuntamente por hombres armados vinculados con el grupo delincuencial “Los Ardillos”, cuando era trasladado a Tlanicuilulco, municipio de Quechultenango, logró escapar.
Como se informó en la edición de ayer tarde en La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, el labriego Cenobio Morales Baños, había sido levantado la mañana de este lunes en sus tierras de cultivo.
La denuncia la hicieron las autoridades de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Pueblos Fundadores (CRAC-PF), de que el campesino estaba desaparecido y acusaron directamente a los integrantes del grupo criminal “Los Ardillos”.
El campesino fue levantado en el punto conocido como La Pasadita, en el poblado de Ayahualtempa, municipio de José Joaquín de Herrera (Hueycantenango).
Más tarde en un primer momento un representante de la CRAC-PF, había confirmado de que el labriego Senovio Morales Baños estaba a salvo y resguardado por policías comunitarios de Rincón de Chautla, municipio de Chilapa de Alvarez.
Las autoridades de la CRAC-PF detallaron que la víctima, quien también funge como policía comunitario, escapó de sus captores cuando éstos lo trasladaban hacia el poblado de Tlanicuilulco, Quechultenango, bastión del grupo delictivo Los Ardillos.
Por su lado mediante comunicado de prensa, la Secretaría de Seguridad Pública estatal, dio a conocer la liberación del campesino sin dar mayores detalles de lo acontecido.
El boletín oficial de Seguridad Pública estatal “Autoridades comunitarias confirman que el Sr. Senovio Morales Baños que había sido reportado como desaparecido, se encuentra bien, fue localizado en sus tierras de labor ubicadas en Hueycantenango”.
De esta acción, la CRAC-PF responsabilizó a la banda criminal de los Ardillos, que en esa zona de Guerrero opera a través de la policía comunitaria por la Paz y la Justicia.