COLUMNA

Carpeta Política
Tino Gatica

¿Y las obras materiales papá?
Sé que a algunas personas no les simpatiza ni causa gracia que no reconozca el trabajo del Ejecutivo federal en nuestro país, o sea Don Andrés Manuel López Obrador, quien en verdad no tiene resultados en función de las expectativas que forjó en su campaña. Ya otros cuantos, no sé la cantidad, me dirán “ya siéntese señor” con la idea de callarme o no aceptar lo que es parte de mi realidad. Yo no habito el mundo feliz, feliz, feliz, de López Obrador ni comulgo con algunas de sus frases como esa de combatir la inseguridad (plomo, armas) con abrazos o “exorcis

mos” estilo “fúchila guácala” con un nivel muy ramplón que no presidencial. Perdida toda noción de lo que es gobernar un Estado mexicano en donde coexisten varios Méxicos, AMLO se sigue yendo por lo más fácil, incluso hasta parece que se mantiene en una campaña permanente. Su misma edad, que le empieza a pesar, lo está traicionando. En las mañaneras que gusta de aventarse, en sus conferencias de prensa, ofrece, anticipa y promueve algunas de sus acciones de un programa que solamente él y su gabinete cercano o mejor dicho de confianza lo saben, aunque es bien visto que suele cambiarles la agenda. A pocos días de que se cumpla un año de su administración, no hay nada de obras importantes, nada de resultados contundentes que adviertan que sí va está pensando en trabajar por México, a no ser de dos programas en donde ayuda con nuestro dinero a los jóvenes y personas de la Tercera Edad, aunque solamente son una extensión de lo que hacía tímidamente cuando era Jefe de Gobierno de la Ciudad de México. Nuestro Estado mexicano posee estructuralmente infinidad de asuntos que atender, mismos que han sido ignorados, olvidados por el patriarca de la Cuarta Transformación así como los abanderados del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que a su vez están enloquecidos, enajenados por la disputa de espacios de poder. Este próximo 1 de diciembre de este mismo año, se cumplirá una primer etapa de una nueva administración federal que prometió hacer cambios, prometió una nueva manera de hacer gobernanza. Sin embargo, tal parece que solamente se ha dedicado a destruir instituciones, a confrontarse con quienes no piensan como él o su camada, a verbalizar la violencia e incluso a apartarse de la agenda que más preocupa a una persona común y corriente: un buen salario, una buena economía, un mejor ambiente de seguridad pública, un mejor campo (para tener lo que necesariamente nos urge, alimento), mejoría en la salud, etc. Como en su momento consideré que AMLO era un buen agente de cambio, en los hechos, en la práctica no lo ha demostrado. Solamente para tomar como una situación espejo de sus otras giras que ha realizado en su agenda itinerante en el país, en su visita reciente a la cabecera municipal de Tlapa solamente dijo lo que a la gente le gusta escuchar, pero sin que se comprometiera a más. No dijo gran cosa, como no dice nada más de lo mismo en sus mañaneras, en donde los mismos reporteros de la fuente, reciben evasivas cuando de hacer cuestionamientos más profundos se refiere. Nada de obras materiales ha tenido esta 4T, sí dos grupos “vulnerables” beneficiados, pero con los mismos recursos financieros que se han aplicado a las instituciones, cuando no es por la desaparición de algunas de éstas. Luego entonces, hasta ahora nada de obras majestuosas, importantes, que generen interés de inversionistas, de empresarios, de grandes cadenas mexicanas y trasnacionales, etc. Entonces, no existe interés genuino en propiciar mejores formas de convivencia para nuestra sociedad, al menos no para quien difiere de sus planteamientos y presuntos programas. Y ya faltan pocos días para que nos vuelvan a dar atolito con el dedo. Faltan unos días para el 1 de diciembre de este año 2019, sin novedad, aunque la inseguridad siga tan campante, en donde las cifras de estos saldos confirman esta percepción ciudadana. (Comentarios: danificados@outlook.es/FB:tinogatica).