ARTÍCULO

La filosofía antigua

Apolinar Castrejón Marino
¿Y por qué decimos que la filosofía es la madre de todas las ciencias? Porque en los años 70s se trató de hacer una definición que fuera breve, y que la entendieran las mayorías….aunque no fuese verídica.
En otros tiempos, hombres muy importantes estuvieron dispuestos a hacer los más grandes sacrificios por la filosofía. Sócrates fue sentenciado a morir envenenado, si no se retractaba de sus enseñanzas. Aceptó tranquilamente su sentencia, y sus últimas palabras fueron para recomendarles a sus discípulos que hicieran un sacrificio en su nombre: “No olvides matar un gallo a Asclepio”.
La misma historia se repitió con Giordano Bruno, quien enseñaba la verdad del universo. Fue sentenciado a morir en la hoguera, y cuando su cuerpo se quemaba, sus últimas palabras fueron: “Y sin embargo se mueve”.
Los reyes y los papas temían a la filosofía, porque sabían que era una fuerza tan poderosa, que podía arrebat

arles sus reinos y sus tronos. Alejandro Magno “Se amarró el dedo antes de cortárselo”, dándole bienes y dones a Aristóteles, con tal de gozar su amistad.
Dionisio padre, y luego Dionisio hijo, ofrecieron a Platón el gobierno de Siracusa, en un intento por asegurar su afecto. Regentes y reyes de Francia, se sintieron amenazados por las ideas de Voltaire, y se confabularon para expulsarlo del país. Bien pronto se arrepintieron, al enterarse que en el mundo civilizado fuera de sus dominios, los hombres libres buscaban sus enseñanzas, y se beneficiaban con sus teorías humanistas. Los hombres honraban a la filosofía, disfrutando sus enormes reinos, y se integraban voluntariamente a su imperio.
Una tarde, después de una jornada de guerra, Alejandro conversaba con Diógenes, y en un asalto de franqueza, le confesó que lo consideraba el hombre más ilustre…después de él, desde luego. La respuesta del filósofo fue sorprendente, le dijo que tuviera la bondad de hacerse a un lado, pues su real persona, le estaba quitando el sol del atardecer.
La filosofía de hoy, ha dejado de ser estimada y respetada, porque perdió por completo su fuerza para defender las ideas. Los hombres primitivos avanzaron poco en el sendero del saber, o al menos no dejaron más testimonio que pinturas en las cuevas, vasijas y danzas. Es evidente que descubrieron el fuego, los metales, el cultivo de las plantas, el uso de la rueda y muchas otras cosas útiles.
En la Grecia clásica del siglo IV, había sabios y sofistas, que  eran personajes, positivamente convencidos de poseer la verdad, y se dedicaban a transmitirla a las nuevas generaciones…mediante módicas cuotas. Además de cobrar grandes sumas de dinero, establecían lazos de amistad –interesada– con las familias más ricas y poderosas.
En ese tiempo, los hombres quisieron saber si hubo una materia primigenia de la que todo se originó. Sin ningún temor ni desconfianza, y sin importarles que eventualmente, la humanidad los juzgara equivocados, los filósofos expusieron sus teorías.
En una región llamada Mileto, surgieron 3 filósofos. TALES, dijo que todo proviene del agua, y que es el origen de todas las cosas, tanto sustancias solidas como aeriformes.. Las observaciones que había realizado, le indicaban que sin el agua no existe la vida, que es la materia más abundante en la naturaleza, que circunda y tal vez, sostiene las tierras emergidas.
ANAXIMANDRO quiso refutar estos argumentos, pues su inteligencia y sus observaciones, le indicaban que aquello de lo que todo  proviene, no es una sustancia en particular, sino el INFINITO o ILIMITADO, que todo lo abraza y todo lo gobierna. El infinito es algo supremo y divino que bien puede identificarse con DIOS. Por su parte, ANAXÍMENES decía que la causa de todo es el AIRE, que enrareciéndose se convierte en fuego, y condensándose y en agua y tierra.
En otra región de Grecia conocido como Elea, otros sofistas especulaban acerca de asuntos diferentes.
JENÓFANES afirmaba que DIOS no puede asemejarse a los hombres ni por la imagen, ni por el intelecto. Argumentaba que los negros adoraban a dioses chatos y negros, mientras los tracios creían en dioses rubios con cabelleras rojas. Aseguraba que si los bueyes, caballos y leones pudieran expresarse como los hombres, sus dioses serian como bueyes, caballos y leones.
PARMÉNIDES decía que EL SER  es una esfera compacta y homogénea que ante todo ES y que no puede, al mismo tiempo NO SER. Los sentidos y la opinión nos dicen que las cosas nacen y mueren, pero la vía de la razón pura nos demuestra que la realidad es llena, completa y eterna; que en ella no hay nacimiento, muerte, ni cambios cualitativos.
ZENÓN era el polemista más respetado. Fue el primero en utilizar el METODO DIALÉCTICO, admitiendo a manera de hipótesis los argumentos del contrario, pero procurando inferir conclusiones absurdas.