COLUMNA

DH-1-07-18
Tino Gatica
“Sitio de Taxis Alfa”, un servicio de transporte terrestre como de la familia
Ciertamente que todas las personas tenemos ideas, gustos, sueños, aspiraciones, deseos, toda una amalgama de emociones que son en lo individual, repercutiendo en lo familiar y social. De lo anterior se desprende que como individuos que somos, también nos gusta estar apartados de la gente, considerados como antisociales, aunque no sea una afirmación definitiva; y se tienen a quienes les gusta socializar, contando con intereses de pertenecer o formar parte de un grupo buscando ayuda enfocada a sus respectivas necesidades. Por eso es que ya conformado un grupo se le identifica com
o asociación u organización, con objetivos definidos en sus normas, reglamentos y estatutos internos, dando paso a tener el reconocimiento de la sociedad mediante sus acciones que suelen ser de diverso carácter. De esa conformación, depende en mucho la constancia y resistencia, sobre todo cuando se tiene un compromiso genuino y real por ayudar u ofrecer un servicio que se gane la confianza de la gente. Y esto lo sabe bastante bien mi amigo Óscar Juárez Moreno, quien al frente de su asociación de taxistas “Sitio de Taxis Alfa” han sabido ofrecer un servicio digno y óptimo a la población de Chilpancingo así como a los clientes que salen de urgencia fuera del municipio e incluso de nuestro estado de Guerrero. Mi amigo Juárez Moreno se siente tan interesado en que su asociación tenga una buena capacitación para continuar siendo una excelente oferta en este servicio que ha estado invitando a sus agremiados a que se registren para sus reuniones y que participen, tan es así que recientemente tuvieron el primer curso de Relaciones Humanas y Manejo a la Defensiva ofrecida por una compañía aseguradora con sede en el vecino estado de Morelos, denominada “Grupo Caleb, venta y servicio de seguros”. En ese curso interactivo en donde estuve acompañando a esa asociación de taxistas del “Sitio Alfa” me puede dar cuenta de diversos aspectos positivos, muchos, que estaban inhibiendo a dos que tres negativos que mucho aquejan a esos choferes del volante. Y me remito a que, para empezar primero se debe de reconocer el problema para confrontarlo, atenderlo para darle una salida o propiamente una solución, en donde estriba en que se debe cambiar de actitud (pésima) ante el cliente y reconocer que siempre éste tiene la razón (aunque en muchos de los casos no sea así, porque me consta de cómo hay personas bien pinches, gandallas y sangronas). Aunque el curso duró aproximadamente tres horas, se pudo hacer dinámicas que me permitieron tener una visión distinta a la que se tiene sobre ese gremio, en donde de antemano deseo mencionar que mi amigo Óscar Juárez Moreno me invitó sin condiciones, sin prejuicios, pues aunque sabía que mi carácter de periodista en ocasiones limita o “achicopala” el comportamiento de personas, supe ganármelos. Queda desde este espacio, desearle a mi amigo Óscar Juárez Moreno que siga siempre adelante con el servicio de “Taxis Alfa”, preocupándose y ocupándose de que este gremio se capacite para seguirse sensibilizando, pues aunque no siempre el cliente tiene la razón, lo cierto es que por un pequeño desaire de un chofer se echa por los suelos toda la labor obtenida, afectando el nombre de la organización. Es todo. (Comentarios o invitaciones para acudir a otros grupos de taxis en Chilpancingo:dacnificados@outlook.es).

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