ARTÍCULO

Día nacional del caballo

Apolinar Castrejón Marino
¿DIA NACIONAL DEL CABALLO? Así es, el día 4 de agosto de 1999, el Senado y la  Cámara de Diputados reunidos en Congreso, sancionaron la Ley 25.125 para designar el día 20 de septiembre de cada año como “DIA NACIONAL DEL CABALLO”.
El ARTICULO 1º, decreta esta iniciativa “…a los efectos de celebrar la presencia y relevancia con que éste noble animal ha acompañado a la humanidad en la organización histórica, económica y deportiva de la República”.
Y el ARTICULO 2º, sanciona: “Facúltese al Poder Ejecutivo nacional a los efectos de disponer que por intermedio de los Ministerios de Cultura y Educación, Defensa e Interior, se proceda a requerir a los establecimientos educativos primarios y secundarios, como a las unidades militares del Arma de Caballería, Gendarmería Nacional y Policía Federal Argentina, realicen en el día instituido, evocaciones alusivas al caballo y su significación en la República y se invite a todas las instituciones públicas y/o privadas que, por su fundamento tengan afinidad o relación con el caballo, hagan lo prop

io”.
La Ley fue promulgada el 6 septiembre de 1999, siendo presidente de la república Carlos Menem, y presidente de la Cámara de Diputados el político peronista Alberto Reinaldo Pierri​, Carlos Federico Ruckauf, representante de la primera mayoría, y Esther H. Pereyra Arandía de Pérez Pardo, presidenta de las comisiones del H. Congreso.
“DADA EN LA SALA DE SESIONES DEL CONGRESO ARGENTINO, EN BUENOS AIRES, A LOS CUATRO DIAS DEL MES DE AGOSTO DEL AÑO MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y NUEVE…” REGISTRADA BAJO EL NUMERO 25.125. — Rubricas de ALBERTO R. PIERRI y  CARLOS F. RUCKAUF.
Alberto Reinaldo Pierri es un empresario y político, propietario de la empresa Telecentro S.A., afiliado y líder del Partido Justicialista y Carlos Federico Ruckauf, que ha ocupado muchos cargos públicos, entre ellos el de Ministro de Trabajo del gobierno de María Estela Martínez de Perón, ministro y vicepresidente de Carlos Saúl Menem, y gobernador de la provincia de Buenos Aires.
Ah, pero esto fue en Argentina. Así es. En México priva la hipocresía, cuya voz cantante está a cargo de las organizaciones no gubernamentales, empoderadas para dar rienda suelta a su protagonismo e ignorancia. Defensoras de los perros, la vaquita marina, y los delfines, pero impávidas ante las necesidades de 60 millones de pobres que no tienen un sustento económico para comer, que no tienen una casa, y que se mueren prematuramente por falta de atención médica.
En el puerto de Acapulco, algunas de estas “organizaciones” están protestando enérgicamente por la utilización de caballos para la tracción de esas carretas que llaman “calandrias”, que utilizan para pasear a los turistas. Ciertamente hay muchos caballos flacos y viejos, jalando las carretas de los costeñitos, flacos y viejos.
Pero las mujerucas de las “organizaciones” creen que lo hacen por gusto, y que si los obligan a “hacer conciencia” del maltrato animal, les van a soltar la rienda como dice José Alfredo Jiménez, o que los va a alimentar mejor, y harán que los revise el veterinario.
Evidentemente desconocen que esos compatriotas se ven en la necesidad de explotar a sus pobres animales, porque no tiene un trabajo estable, ni prestaciones, ni seguros.
Y que cuando les quitan sus animales, o les prohíben hacerlos trabajar, los condenan a pasar hambre, y quizá a delinquir: estafas, robo, proxenetas.