COLUMNA

COSMOS

Héctor CONTRERAS ORGANISTA

QUISIERA
(Quinta Parte)
QUISIERA que no olvidáramos “La Noches de los Tlacololeros”, aquella de diciembre de 1981 cuando el gobernador ordenó que se presentaran en la plaza pública de Chilpancingo, pero los danzantes del Barrio de San Mateo dijeron no, porque no les daban apoyos para comprar nuevos ajuares y el muy apreciado paisano señor don Chencho Flores, que era responsable de la danza, obedeciendo una indicación de Antonio, el hermano del gobernador, durante tres días ensayó como tlacololeros a un grupo de policías y los vistió como danzantes y los trajo a bailar al zócalo… Cuando los tlacololeros de

a de veras, los del bordo de San Mateo se enteraron, se enojaron, se pusieron de acuerdo y esa noche, vistiendo sus viejos costales y encolerizados llegaron hasta frente a la iglesia de la Asunción donde encontraron dizque danzando a los tlacololeros-policías y les dieron una chirrioniza que hasta la fecha no han de olvidar. Los policías tal vez serían muy diestros en el manejo de la macana-tolete, pero enarbolar el chirrión y hacer buen uso de él, solamente los traviesos tlacololeros de San Mateo: ¡Anécdotas del Tlacololeros chilpancingueños!...QUISIERA que algún día, alguna autoridad gubernamental del estado hubiese tenido un mínimo de sentido común para no haber dejado ir de Guerrero la valiosa colección de estandartes y banderas de México que data de la época de los aztecas y que pretendió obsequiarnos el admirado y muy emprendedor comerciante y coleccionista (especialistas en numismática) don Roberto Calleja Garibay, jalisciense avecindado por años en Guerrero, donde hizo fortuna y quien agradecido con nuestra entidad pretendió en varias ocasiones obsequiar al gobierno y pueblo de Guerrero su invaluable colección, pero nunca nadie del mundo oficial tuvo tiempo de prestarle un mínimo de atención…  El señor Calleja, avecindado después en el estado de Morelos, tenía en su poder documentos originales firmados por Hidalgo, Morelos y Guerrero, pero por acá, los funcionarios, siempre ocupados, jamás le dieron audiencia. Falleció y sus muchas colecciones fueron a parar a otra entidad, obsequiadas, y él quería se quedaran en Guerrero, pero… ¡Pero!...QUISIERA que, como aportación histórica se escribiera de manera más abundante y detallada las sorprendentes similitudes que existen entre los estados de Veracruz y Guerrero… Las primeras carreteras entre la Nueva España y los puertos de Veracruz y Acapulco tenían el mismo kilometraje, a partir de “La Ciudad de los Palacios”. A 300 kilómetros, partiendo de la ciudad de México se llegaba a Jalapa, la capital del estado de Veracruz, y a esa misma cantidad de kilómetros, se llegaba Chilpancingo, la capital del estado de Guerrero… Entre Jalapa y el puerto de Veracruz, donde comienza la costa jarocha hay un lugar que se llama Tierra Colorada, y entre Chilpancingo y Acapulco, donde comienza la costa suriana hay un lugar que se llama Tierra Colorada… La catedral de Jalapa está dedicada a la virgen de Santa María de la Asunción y en Chilpancingo, el templo histórico, hoy catedral, está consagrada a la virgen de la Asunción. La zona cafetalera de Veracruz es Atoyac, y en Guerrero, la zona cafetalera se llama Atoyac… Al rectificarse las carreteras y abrir autopistas, el kilometraje se alteró, pero hay varias similitudes que se deben investigar… QUISIERA que las nuevas generaciones supieran que aquí (en el Barrio de San Francisco, calle Juan Ruiz de Alarcón) nació el famoso cantante Federico Valdez quien se hizo famoso con una sola canción “De Chica en Chica”, era estudiante de medicina de la UNAM cuando la grabó con otras canciones en un LP  y después se dedicó a ejercer su profesión de médico…QUISIERA que de una vez por todas tuviéramos una gobernadora o aunque sea otro gobernador que exija a todas las estaciones de radio del estado a que programen música guerrerense, como obligación, y al que no cumpla, se le cancele la concesión o por lo menos se le multe… No es poco el usufructo que en beneficio de esas empresas se llevan de Guerrero, pero sí de cero la atención para impulsar la cultura y sobre todo la música guerrerense, y nadie dice nada… QUISIERA que en lugar de cada mes estar regalando millones y millones de pesos a la Comisión Federal de Electricidad por el “servicio” de energía eléctrica en Acahuizotla, para traer de sus manantiales agua a Chilpancingo, se invitará a la Universidad Nacional Autónoma de México a que sus estudiantes vinieran a realizar en trabajo social  investigaciones y vieran si hay posibilidad de instalar un sistema eólico en ese lugar, que genere electricidad para evitar el pago a la CFE, o aprovechar la fuerza hidráulica que llega de San Roque a Acahuizotla para instalar una planta de luz, como la de Colotlipa, o en su caso buscar la manera de beneficiarse de la energía solar para ya dejar de estar de rodillas ante los arbitrarios gandules de Comisión Federal de Electricidad quienes a la hora que no reciben pago, dejan sin servicio a Acahuzotla y sin agua a Chilpancingo. Ya se sabe que los funcionarios de la CFE, se llevan de la lima un gajo, pero también se sabe que el pueblo, si se decide, puede cambiar para bien los servicios que le beneficien, de manera justa y sin depender de un verdugo implacable como es la CFE. Y de paso, cancelar el maldito “cambio de horario” que como todos sabemos, a los únicos que benefició es a los que nos han saqueado hasta la saciedad. Según, “ahorramos” con el cambio de horario, pero esos canijos siguen saqueando al país… QUISIERA  que a la generosa comunidad de Acahuizotla, las autoridades federales, estatales y municipales les compensaran con muchos beneficios en obras la gran aportación de agua que han hecho para Chilpancingo… QUISIERA que después de 426 años de que dicen que se fundó Chilpancingo, ya tuviéramos un alcalde pensante encaramado en la silla municipal y diera atención, como si se tratara de curar un cáncer, y procurara ocupar en beneficio de Chilpancingo el agua que brota de “La Cueva de Amojileca” la que al bajar al Huacapa de Chilpancingo se pierde inmisericordemente…. QUISIERA que las próximas autoridades municipales tuvieran la iniciativa de reunir a los profesionistas nacidos en Chilpancingo que viven en diversas partes del país y del extranjero y se les pida su valiosa colaboración para intentar cambiar en muchos rubros, el sistema de vida de Chilpancingo con proyectos ambiciosos de una ciudad que quiera salir del estercolero… QUISIERA que ciudadanos representantes de los cinco barrios de Chilpancingo, lleváramos al estacionamiento del centro de abastos “Baltazar R. Leyva Mancilla”, ahí donde hacen sitio las urvans del transporte colectivo de toda la ciudad en el mercado, al presidente municipal, a los síndicos, a los regidores del ayuntamiento, a los funcionarios municipales, particularmente al de Salud, al gobernador del estado, a todos sus funcionarios, particularmente a su secretario de Salud, diputados, senadores y a los que quieren ser, y tenerlos de pie un par de tres horas en ese estacionamiento, de preferencia un mediodía, a ver si así se dan cuenta y “carburan” que ese lugar ya es insoportable por su insultante hediondez, su agresivo olor a mierda y porque ya está causando graves daños de salud a los comerciantes y a los usuarios de las urvans y de paso, además de ser un foco de infección, exhibe de cuerpo entero la inutilidad de las áreas responsables de Salud en todos los niveles de gobierno y que el pueblo paga mediante impuestos… QUSIERA no hacer tanto coraje con tanto atarantado dizque gobernando… QUISIERA que sembráramos árboles en la plaza central y por lo menos colocar sombrillas y más bancas… QUISIERA que los chilpancingueños gestionáramos ante algunas empresas, la nomenclatura de Chilpancingo. Urgen nombres de calles y nueva numeración domiciliaria en la ciudad.