ARTÍCULO

Uso del libro en la actualidad
Apolinar Castrejón Marino
¿Usted cree que lis libros han perdido su magia? Porque hasta hace poco tiempo, los libros eran mágicos, porque guardaban los grandes secretos de la humanidad, del cosmos, y de Dios.
En los libros podíamos encontrar respuestas a nuestras dudas, inspiración para nuestros más secretos anhelos, y valor y fuerza, para perseguir nuestros ideales. Aunque los libros también podían ser las armas más peligrosas; tanto como una pistola cargada en manos de un niño de 2 años.
En los libros de Nietzsche (Nitzé) encontramos la idea por demás extraña, de que hay un camino entre los simios y un superhombre… y nosotros nos encontramos a mitad de ese camino. Nietzsche se esforzó por convencernos que para llegar a ser superhombres, debemos alejar de nuestras mentes las ideas que nos vulneran, como la piedad, la solidaridad, y Dios.
Por el contrario, Kierkegaard se afanó toda su vida para persuadirnos de que lo más conveniente era que nos dedicáramos a formarnos como  “caballero de la fe”, dejando de llenar nuestra mente de dudas y desconfianza acerca de la voluntad divina. Escribió una obra titulada “El Idiota” en la cual expuso sus argumentos.
Jean Paul Sartré, creía que “…la vida es un continuo desear, nunca satisfecho. Para alcanzar la felicidad, debemos dejar de desear”. 
Pasando a temas más prácticos, diremos que los libros contienen la verdad incondicional. Ellos están ahí, y es responsabilidad de quien los lea, lo que pueda entender. Dejar que penetre y es establezca en su mente, para mejorar su vida…o para ponerla en riesgo.
Verbigracia: la gente está positivamente convencida de que sabe muchas cosas. Pero los libros pueden demostrarnos que no es así. Una posición más prudente, sería decir “Yo solo sé, que no sé nada”. Como dijo Sócrates.
¿Cuánta gente hay que se dedica a hacer ejercicio como loca, creyendo que con eso mantendrá una vida sana? Si usted conoce a una de esas taradas que se pasan horas en el “gim”, o trotando como caballos, en parques y jardines, o en espacios deportivos, díganle, que la sobreactividad física provoca que el cuerpo produzca una sobrecarga de radicales libres, responsables de la oxidación de las células, lo cual lleva al envejecimiento prematuro.
Así lo explica en sus libros, el investigador clínico Ullianov Peralta, de la Escuela Superior de Medicina del Instituto Politécnico Nacional. Este señor, asegura que al hacer ejercicio, el cuerpo llega a utilizar hasta 15 veces más oxigeno que de lo normal, lo cual provoca estrés oxidativo.
Las mujeres, por voluntad propia, sin que nadie las obligara, adoptaton posturas “ambientalistas”… sin tener el conocimiento necesario, Usted las ha escuchado hacer férrea defensa de la naturaleza.
Seguramente no saben, por ejemplo que los árboles jóvenes no limpian la atmósfera, y que empiezan a absorber bióxido de carbono, a partir de los 20 años. Hasta entonces emiten más bióxido del que han absorbido ¿Entonces? ¿Dónde está la ayuda? Tampoco sabrán que la madera (de los árboles) que se pudre, también emite CO2 ¿Verdad?
Cada bebe necesita 3 mil pañales por año, durante 2 años. Esos pañales reunidos equivaldrían e llenar desde al piso hasta el techo, 10 veces su recamara ¿Nos podrían decir qué hacer con ellos? ¿Dónde van a dar?
Todos los cosméticos que utilizan para embellecerse desde los 15 años en adelante, suman casi una tonelada de productos derivados del petróleo (ceras y glicerinas). Sus cremas, maquillaje, tintes, rímel, y demás tlapalería, producen residuos ácidos suficientes para contaminar 10 hectáreas de terrenos agrícolas ¿Así protegen a la naturaleza?
Bueno. El punto es que el conocimiento se encuentra en los libros, pero; la gente ya no lee. Los mexicanos leen muy poco, debido a que se sienten atraídos por otras actividades, sobre todo las que tienen que ver con la tecnología.
Y el mayor problema es que dan total credibilidad a lo que ven en la televisión, o en Facebook. Aún las más grandes mentiras y los más grandes embustes, son tomados por la gente como 100% verdaderos.
Mucha gente que se declara escéptica y atea, se toma los “documentales” de National Geografic, y los videos de YouTube, como su hubiesen sido hechos por Dios Padre.
Los 5 de países donde más leen, de acuerdo con un estudio de la agencia Nop World son: Tailandia. Sus habitantes leen 9.4 horas a la semana; China, ocho horas semanalmente; Filipinas, 7.3 horas a la semana; Egipto, 7.3 horas; y República Checa, 7.24 horas. México ocupa la posición 25, ya que sus habitantes sólo leen 5.3 horas semanalmente.

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