PRIMERA PLANA


 Ordena Evodio Velázquez represalia
contra hacedores de Bajo Palabra



ACAPULCO, GRO.--El alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, prefiere apostar a la agresión que corregir su conducta política deshonesta. En represalia por la cobertura crítica de “Bajo Palabra”, ordenó a su jefe de prensa, José Luis Méndez Rodríguez, sacar a todos los reporteros de “Bajo Palabra” del grupo de noticias oficiales del ayuntamiento y bloquear toda línea de comunicación oficial, incluyendo la agenda de actividades públicas del presidente municipal.

La acción represiva que ha tomado el alcalde de Acapulco contra un medio crítico como “Bajo Palabra”, además de inconstitucional, pues violenta las garantías fundamentales consagradas en el artículo sexto de nuestra Constitución Política, al limitar el derecho que tienen las y los ciudadanos “al libre acceso a información veraz, plural y oportuna, así como a buscar, recibir y difundir información e ideas de toda índole por cualquier medio de expresión”, es más que nada, la manifestación de una rusticidad política inusitada.
La acción de violencia institucional contra Bajo Palabra, corresponde al enojo del alcalde por la información que publicamos aquí mismo relacionada con el paseo que hizo en un yate prestado por un “benefactor desconocido” y sus secuelas.
A dos semanas de ser exhibido en un yate de lujo que le fue prestado por un “desconocido” benefactor, el alcalde sigue sin dar una explicación pública. El asunto no es para menos, pues esas relaciones que prefieren mantenerse en las sombras, por lo regular involucran negocios turbios con dinero y recursos públicos.
Destaca en todo esto la reprobable conducta política del PRD, un partido que ha perdido legitimación social por su proclividad a solapar a sus gobernantes corruptos, así como hicieron mucho tiempo con José Luis Abarca en Iguala, y tal como lo ha hecho el PRI a lo largo de su vida política. Ahí están impunes sus diputados federales que votaron a favor del gasolinazo, incluso, algunos pretenden brincar a otros cargos.
En el caso de Evodio y el yate, así como sobre otras denuncias públicas de evidente corrupción en su gobierno, los perredistas, con los mismos intereses y conducta política del alcalde, voltean para otro lado o atacan con odio inusitado a los que cuestionan o denuncian.
No obstante, en el PRD, sus líderes aún se preguntan por qué la gente, la que votaba por convicción creyendo que era un partido con valores de izquierda, los ha abandonado. En la última elección, el PRD apenas pudo retener Acapulco por tres mil votos de diferencia.
Así pues, la represalia contra un medio de información serio, donde trabajan reporteros, editores, caricaturistas, y periodistas de prestigio, es aún más grave, pues involucra el uso de recursos públicos con los que se pretende impedir que Bajo Palabra informe a sus usuarios  que se cuentan por cientos de miles.
Por tal razón, y por lo grave de esta agresión a la libertad de informar, “Bajo Palabra” recurrirá a las medidas constitucionales de protección que tienen los medios de comunicación ante agresiones provenientes de los gobiernos, como es el caso.
La próxima semana, nuestros abogados interpondrán las demandas correspondientes contra el alcalde y los funcionarios de comunicación social de su gobierno que tomaron acciones represivas contra nuestros compañeros y el propio medio. (bajopalabra.com.mx)¡

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