PRIMERA PLANA

 Libre de afectación por la minera
Media Luna el río Balsas:UNAM

COCULA, GRO.--“Se observa que las actividades de explotación minera están muy por debajo de los límites permisibles que procuran la integridad de los peces y sus huevos en el río Balsas. Por lo tanto, no se presenta un impacto en el hábitat de los cardúmenes” (grupo de peces), aseguró el Maestro José Antonio Martínez, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

En una investigación desarrollada por el Instituto de Ingeniería de la UNAM, a solicitud de los pobladores de las comunidades de Nuevo Balsas, Atzcala, Nuevo Real de Limón y Nueva Fundición para conocer el impacto en los peces de la presa El Caracol demostró que las voladuras que realiza la empresa Minera Media Luna no perturban, ni representan riesgo para la presa.
Así mismo, la investigación demostró que las frecuencias y velocidades de las voladuras realizadas por la minera en Nuevo Balsas no representan riesgo alguno para las construcciones en el poblado, dado que las velocidades son muy pequeñas.
El especialista en temas de geofísica, sismología y estructuras informó que dicha investigación se realizó tomando estándares nacionales e internacionales como lo pidieron los pobladores. Los resultados se analizaron comparándolos con estudios realizados por el Departamento de Pesca y Caza de Alaska (ADFG), el Código de Prácticas Medioambientales para Minas de Metales (ECPMM) y el Reporte Ténico Canadiense de Pesquería y Ciencias Acuáticas (CTRFAS-2107) los cuales establecen como velocidad de partícula máxima suficiente para proteger la vida de los huevos y peces es de 13 milimetros por segundo (mm/s).
Durante la investigación se demostró que las velocidades máximas de partícula registradas están en el rango de 0.55 mm/s a 0.66 mm/s, es decir ni siquiera se registra un punto de los 13 mm/s, recomendados por las guías internacionales. En los márgenes del río Balsas el máximo registrado fue de 0.1 mm/s.
“Del tajo de la mina al poblado de Nuevo Balsas hay una distancia lineal de aproximadamente 3 km de distancia, por ello, la energía de la voladura en su trayectoria va bajando paulatinamente, y las voladuras son 13 veces más pequeñas del máximo permitido según las normas” aseguró el científico que durante 2015 y con apoyo de pobladores de la zona, realizó la investigación.