NOTA

 Se debe dejar a los niños
reaccionar a la lectura

 Norma Patricia Rodríguez Reyes

Quien lee, sabe, quien sabe, elige. Quien elige, es libre. Cecilia Malem
El Programa de Fortalecimiento de la Calidad Educativa con el propósito de brindarle estrategias a los docentes para impulsar las Bibliotecas Escolares y de Aula, comparte la experiencia de una educadora de Teloloapan, Guerrero, que al entrevistar vía telefónica al escritor Felipe Garrido, destacó la oportunidad de entablar un diálogo con un autor experto en la lectura en voz alta y quien está a favor de dejar a los niños reaccionar a la lectura.

Por tanto, la docente le externó que cuando las educadoras cuentan cuentos a los niños o están dramatizando una historia, les preocupa mucho el hecho de mantener quietos a los niños, y por tanto le cuestionó qué hacer al respecto.
El autor, quien ha tenido múltiples experiencias de ver en orden a grupos de niños y jóvenes inquietos, inteligentes, curiosos, a quienes precisó, no se les puede tener como momias.
Se les debe permitir que se muevan, que hagan preguntas, que alguno de ellos quiera decir algo, darles el micrófono para que ellos digan lo que quieran decir.
Reconoce que no hay que tener histeria por el orden, éste debe ser el suficiente para que nos oigamos, para que ellos escuchen lo que estamos diciendo.
Puntualizó que el arte de escuchar se desarrolla con el tiempo, y si al principio los niños necesitan estar manipulando algo con sus manos para que estén quietos, no hay que tenerle miedo a que estén dibujando algo o haciendo garabatos con su lápiz, si eso los mantiene tranquilos e interesados con la lectura.