POLICRÓNICA

    Taxco…Un pico del turístico “Triángulo del Sol”, conformado por Acapulco y Zihuatanejo, hoy en día Taxco de Alarcón que en un 95 por ciento de su población vive de la producción, venta de artesanías y joyería de plata, ahora sufre de la espiral violenta criminal e inseguridad desenfrenada, en la que los tres niveles de gobierno nada hacen al menos  darle un “mejoral”.

 La espiral de violencia e inseguridad en el centro turístico de Taxco de Alarcón, no cesa, cada día va en aumento, los ciudadanos viven en constante zozobra desde que llegó como presidente municipal Omar Jalil Flores Majul, del Partido Revolucionario Institucional (PRI) se ha teñido de sangre, incluido el periodista Francisco Pacheco Beltrán asesinado el 25 de abril de este año. La violencia está atacando a todos los estratos sociales del municipio de Taxco de Alarcón, tierra del dramaturgo Juan Ruiz de Alarcón, ubicado en la región norte del estado de Guerrero, en donde no hay día que no haya hechos delictivos que van desde los asaltos a transeúntes, comercios, secuestros, levantones y asesinatos sin esclarecerse ninguno de ellos. El presidente municipal taxqueño, Omar Jalil Flores Majul distinguido militante del PRI,  no hace nada en favor de la defensa de los ciudadanos ante la imparable violencia en la que no solo se mata a ciudadanos de todos los estratos sociales, incluyendo hasta un periodista y funcionarios. La violencia e inseguridad que padece todos los días la población, ya no sabe a quién recurrir para encontrar protección a su integridad física y su patrimonio familiar. Taxco de Alarcón está ubicado en la región Norte que colinda con Iguala de la Independencia, en ambos operan las células del crimen organizado “Los Rojos” y los “Guerreros Unidos”, dos cárteles contrarios del narcotráfico. La actual ola de violencia criminal que se ha vivido en la ciudad y municipio platero contradice al Alcalde, Omar Jalil Flores Majul con sus declaraciones “Taxco, es una muestra de que se ha recuperado de la violencia que azotó al estado en los últimos años y que alejó al turismo de la región”. Pero la realidad es que Taxco de Alarcón se ha convertido nuevamente en una ciudad violenta, en donde la gente tiene miedo de salir por las noches y los turistas se encuentran indefensos ante la nula seguridad que ofrecen las policías locales, estatales y federales encargados de la seguridad de la ciudad. Tan insegura es la ciudad platera que hasta se recomienda a los ciudadanos que si piensa visitar Taxco  de Alarcón cualquier día o el fin de semana, no caminar por calles solitarias ni asistir a lugares como bares, taquerías y discotecas que funcionan en altas horas de la madrugada, porque la situación de seguridad es muy crítica.  Se duelen  los empresarios de Taxco de Alarcón en que el turismo y la venta de plata cayeron a causa de la violencia y la inseguridad que provocan los grupos delictivos, por ende afectan la economía local. La empresaria María Lagunas, integrante de la organización “Unidos por Taxco”, informó que el municipio ya no recibe turismo internacional porque no se puede garantizar la seguridad de los visitantes.  Como señalar que el 95 por ciento de los taxqueños viven de la producción, venta de artesanías y joyería de plata. Actualmente, enfrentan una crisis económica severa, porque no hay turistas que lleguen a la ciudad platera a comprar sus productos y tampoco existen canales de venta en el extranjero. La falta de expectativas de crecimiento en Taxco de Alarcón ha provocado que los jóvenes emigren a otras ciudades o estados. La diseñadora de joyería Carmen Tapia dijo que existe “fuga de cerebros”, porque el municipio no cuenta con opciones educativas de nivel superior ni con ofertas de desarrollo y crecimiento profesional. Por este motivo, los jóvenes que salen a otros estados para estudiar ya no regresan a Taxco de Alarcón. Definitivamente la inseguridad es el “problema primario” de la zona y requiere “un plan global bien establecido” para resolverse. Por la espiral de la violencia criminal, los empresarios están en desánimo, incluso tienen temor de crecer y volverse productivos, porque saben que con la inseguridad eso es un riesgo. Ese es el sentir de la población de Taxco de Alarcón en la que se percibe la desolación y el dolor de todo lo que está ocurriendo, en la que los tres niveles de gobierno pocas acciones realizan, gracias a la apatía del alcalde Flores Majul, quien debería gestionar ante las correspondientes instancias que se instrumenten diversos operativos para abatir la delincuencia. La tierra del gran dramaturgo  Juan Ruiz de Alarcón, cada día pierde su brillo de plata, se extraña aquel clima de paz y tranquilidad. Se espera que el gobernador priista, Héctor Antonio Astudillo Flores regrese la vista hacia ese centro turístico, que es importante  como Acapulco y Zihuatanejo, en donde se han instrumentado diversos operativos policiacos-militares, para inhibir la violencia, desde luego, que no ha tenido éxito, sin embargo están siendo atendidos esos dos destinos de playa, ahora falta que lo haga con el de plata.  Existe desesperación de ciudadanos taxqueños, quienes esperan que algún día se acuerde de ellos el mandatario Astudillo Flores, por lo menos que les vaya a palmear las espaldas y les repita su frase trillada que trae por todos lados “¡No están solos!”…Resultados… “El que no arriesga no gana”, refiere la máxima popular y es lo que ha hecho el actual Fiscal General del estado de Guerrero, Xavier Ignacio Olea Peláez, quien el 11 de diciembre cumplirá un año de estar en el encargo con sus altibajos por ser una dependencia “caliente”, pese a todo ello, hay resultados a favor delos guerrerenses. El funcionario en los últimos días ha sido criticado excesivamente por los plumíferos mercenarios, descalificando el trabajo del Fiscal General del estado (FGE), Xavier Ignacio Olea Peláez por algunos resbalones, y hasta por el manejo semántico de los dichos o palabras, sin embargo nadie pondera su trabajo y sin exagerar  su valentía, lo ha colocado hasta armarse y cumplir con su encomienda, en otras ocasiones ha estado en los juzgados de prácticas interrogando a los imputados y de estos nadie valor. Quienes tenemos memoria, nunca antes se tuvo a un procurador de justicia, ahora convertida en fiscal, había estado en los interrogatorios de los detenidos en casos de  alto impacto, como lo ha hecho hoy en día Olea Peláez, y también anteriormente nadie se había cargado un arma  para ir atrás de los delincuentes, cumpliendo al pie de la letra de lo que es el abogado del pueblo. “No hagas caso a los comentarios maliciosos de aquellos amigos que, sin tomar riesgos nunca, sólo pueden ver los fracasos de otras personas.-Paulo Coelho.  Ante un supuesto escenario adverso, el próximos 11 de diciembre cumplirá exactamente un año de estar al frente de la FGE, Olea Peláez, sin temor a equivocarnos, tiene más y mejores aciertos que otros que fungieron como procuradores de justicia, pues no salían de sus escritorios, y solo mandaban a sus agentes a investigar y realizar operativos. Para que no sea sorprendido, prefiere personalmente resolver los problemas y dar cuentas a quien tenga que entregarlas. Sin pretender echar inciensos, el Fiscal General está dando resultados al pueblo de Guerrero, y también es cierto que ha resbalado, con lo último al declarar que echaría pa’bajo  a Raybel Jacobo de Almonte (a)  “El Tequilero” que ha sembrado el terror en algunos municipios de la región de la Tierra Caliente, principalmente en su zona de influencia San Miguel Totolapan.  Esa palabra tiene muchas connotaciones e interpretaciones, entre ellas echar “pa’ bajo” pero de la sierra en donde se esconde el criminal, atraparlo, pero nunca mencionó las palabras “asesinarlo”, “matarlo” o “acribillarlo”. Desde luego el populacho interpreta que “pa’ bajo” es matar, cuando en realidad en el argot policial es detenerlo, echarle el guante, arrestarlo para meterlo a la cárcel o presentarlo ante la ley.  Xavier Ignacio Olea Peláez, asumió los riesgos con valentía, se fajó los pantalones y con pistola al cinto, se fue a Ajuchitlán del Progreso a encabezar el operativo militar y policiaco conjunto Guerrero y Michoacán para atrapar al famoso  “El Tequilero”, pero antes de ello, la orden del gobernador priista  Héctor Antonio Astudillo Flores, era rescatar a las siete personas que había secuestrado el grupo delictivo. El operativo que dirigió Olea Peláez, tiene frutos y tan modesto el abogado litigante, que dejó que en su cuenta de Twitter, el Gobernador, Héctor Antonio Astudillo Flores, informara de la liberación registrada a las 20:00 horas de ayer martes de cinco varones que habían sido secuestrados en el Municipio de Ajuchitlán del Progreso, por el grupo delictivo conocido como “Los Tequileros”. Hasta donde se sabe, la banda de “Los Tequileros” no tiene a ninguna persona privada de su libertad, según refirieron a las autoridades ministeriales, los cinco varones que fueron resguardados por policías ministeriales, después de que estas cinco personas fueron liberadas del cerro de La Gavia donde los mantenían sus captores y ya fueron conducidos a sus respectivos domicilios por policías ministeriales al poblado de San Jerónimo el Grande. Ahora se espera que hoy miércoles, las cinco personas liberadas declaren ante el Ministerio Público del Fuero Común por la privación de la libertad que fueron objeto. El fruto del operativo estuvo compuesto por 80 efectivos del Ejército Mexicano, y desde ahora en adelante realizarán la búsqueda de los plagiarios para hallarlos, detenerlos y ser procesados por sus delitos. Las críticas de las plumas mercenarias, no le hacen mella a Olea Peláez, porque está dando resultados en su trabajo, que no es nada cómodo, y fácil, por el contrario es de alta peligrosidad, pese a ello estuvo en días pasados encabezando el operativo y seguramente lo continuará haciendo hasta dar con “El Tequilero” de quien dicen que anda lento, pues huye y se esconde gravemente herido. El compromiso será detenerlo vivo y coleando, y no dudamos que lo habrá de presentar el mismo fiscal ante los medios cuando ya lo tenga atrapado y para evitar que evada la justicia, el mismo se encargará de interrogarlo cuando esté frente al juez de la causa...Maldición…Cada vez vienen miembros del gabinete de seguridad del gobierno federal, y llegan a Guerrero a declarar falsedades de que están bajando los índices delictivos, como una maldición, los diversos grupos delictivos que se disputan el control de las plazas, responden con intensa violencia. Eso les molesta, los irrita, por ello responden virolentamente. Lo último que se conoció, es que estuvo en Guerrero, el Secretario de la Defensa Nacional, a supervisar los módulos de seguridad, que han servido para maldita la cosa, en tres de los cinco municipios más violentos incluidos dentro de los 50 de todo el país. Lo afirmamos con responsabilidad, por ejemplo, ayer desde temprano, todo el día y hasta entrada la tarde y noche, estuvo un grupo de militares en la avenida Insurgentes, a la altura del mercado “Baltazar R. Leyva Mancilla”, haciendo el ridículo, pues ya no son los que imponían el respeto olivo, ahora el gobierno federal y con la complicidad del titular de al SEDENA, estaban convertidos en agentes de tránsito guiando el tráfico y por cierto, muy mal. No es invento nuestro, hoy mismo publicamos un par de gráficas de esa actividad, que no es su competencia, pero ahí estaban los soldados abajo del rayo del sol y en la tarde el frío, con sus banderolas y conos color naranja. Los militares deben regresar a sus cuarteles, no hacerla de policías o agentes de tránsito. Si se quiere rescatar lo que había sido la institución que imponía respeto, ahora sus integrantes se les ve confundidos haciendo labores que no son de su competencia. Su  misión del Ejército Mexicano, es defender la nación y combate al narcotráfico. El día de ayer martes llegó a Guerrero, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el general Salvador Cienfuegos Zepeda, quien en sus declaraciones afirmó que la incidencia delictiva en cinco de los principales municipios de la entidad ha disminuido “de manera extraordinaria”, como en Acapulco, pero que la percepción social distinta se debe a un problema “comunicacional”. En contraste, la realidad le estalló en la cara al general, ya que durante el día se reportaron cerca de 20 ejecutados en distintos puntos de la entidad suriana, de los que una decena se registró en la región Centro de la entidad. Cienfuegos Zepeda arribó ayer martes para visitar la zona urbana de Chilpancingo, Iguala de la Independencia, Chilapa de Alvarez y Coyuca de Benítez, cuatro de los cinco puntos del programa de los 50 municipios más violentos en el país, donde aseguró que se ha hecho “un buen trabajo”. Cuando se le cuestionó el hecho de que la percepción de la sociedad es distinta ante los niveles extremos de inseguridad y violencia que persisten en la entidad, y sobre las fallas de la estrategia de seguridad federal en Guerrero durante estos años, donde ha sido evidente que no se han logrado revertir los efectos de la narcoviolencia, el general soltó: “Creo que no es precisamente una falla. A mí me gustaría que en un momento oportuno hiciéramos un ejercicio para comparar cómo estaba Guerrero hace 10, ocho, seis, cuatro o dos años. Cómo están los números. La percepción sigue siendo negativa entre la sociedad, pero eso es un problema comunicacional”, sin rubor justificó Cienfuegos Zepeda. Esto se dejó escuchar durante una conferencia de prensa realizada noche en el cuartel de la 35 Zona Militar de Chilpancingo, donde el secretario de la Defensa Nacional se aferró a decir que la incidencia delictiva en las principales ciudades de la entidad ha disminuido y que el operativo de seguridad que dirige el Ejército ha dado buenos resultados estadísticos. “La cuestión de los números que no coinciden con lo que sabe la sociedad. Yo no podría darle una respuesta a eso. Yo digo lo que nosotros sabemos y está documentado –y me atrevo a decirlo–: Que hemos hecho un buen trabajo y los índices delictivos van para abajo”, dijo textual el general Salvador Cienfuegos Zepeda. Incluso, aseguró que la evaluación del programa para atender los 50 municipios más violentos del país, de los cuales cinco se localizan en Guerrero, ha sido positiva, porque en Acapulco, sostuvo, “sus números van extraordinariamente a la baja”, y en Iguala “los resultados son muy satisfactorios”. Sin embargo los reportes oficiales de la Secretaría de Seguridad Pública estatal (SSP), que dirige el general Pedro Almazán Cervantes, advierte que el registro de homicidios dolosos este año son similares a la estadística documentada en 2012, cuando se rebasó la cifra anual de 2 mil asesinatos. Una vez mienten los encargados de la seguridad de este país, pues solamente ayer martes hubo al menos 20 asesinatos, de los cuales en Chilpancingo, fue una decena. Tres privados de la vida a un lado del libramiento a Tixtla, entre ellos un ex regidor y otro embolsado en la Autopista del Sol, frente a la cabecera municipal de Zumpango, en tanto por la noche fueron ejecutados cinco juntos en el cerro de Machohua y otro más privado de la vida en la colonia “San José”, además sin cuantificar las diversas balaceras registradas en toda la capital del estado de Guerrero. Cada vez que vienen estos servidores públicos a la entidad, traen la maldición al aumentarse la violencia con muchos muertos. Preferible que no vengan,  y tal vez se tenga menos violencia, pues con sus declaraciones nada más provocan a los violentos con fuego y sangre.