PRIMERA PLANA

Un año desaparecida y 10 meses más congelada en el SEMEFO, finalmente su madre pudo recuperar el cuerpo de su hija Zaira para darle cristiana sepultura en Chilpancingo, tras enfrentar la ineptitud de las autoridades.

Desaparecida Zaira un año
y diez meses en el Semefo

Bernardo Torres.--Durante 12 meses estuvo desaparecida, 10 meses más los pasó en una cámara frigorífica en el Servicio Médico Forense de Chilpancingo y durante estos 10 meses estuvo siendo reclamado su cuerpo por sus familiares, este viernes, su madre, finalmente le dará sepultura.

Los últimos 10 meses, su madre estuvo reclamando el cuerpo, el cual identificó en el Semefo de Chilpancingo por la complexión, y por la ropa que portaba, sin embargo la retardada burocracia y la falta de oficio de las autoridades responsables, le impidieron llevarse a su hija.
Zaira Hernández Chino, es originaria de Chilpancingo y vivía en la colonia 01 de Mayo, desapareció el 10 de marzo de 2015 cuando se dirigía a la Alameda “Francisco Granados Maldonado” en el centro de la ciudad, alrededor de las 14:00 horas en ese entonces contaba con 15 años de edad.
Al no llegar a su destino, desde ese momento Zaira fue considerada como una persona desaparecida y se interpuso la denuncia ante las autoridades competentes y se inició la búsqueda por parte de sus familiares.
En enero de 2016, mediante una llamada anónima se reportó el hallazgo de una fosa clandestina, en las inmediaciones de la comunidad de Amojileca, donde posteriormente peritos de la Fiscalía General del Estado, hallaron los cuerpos de dos personas, uno de ellos correspondía a una mujer.
Por las características de una de las personas y la vestimenta, la señora Bellanira Chino Ocampo, madre de la menor, identificó plenamente el cuerpo, pero aun así fue trasladado al Servicio Médico Forense de Chilpancingo, para que le fueran tomadas muestras de ADN.
Autoridades de servicios periciales de la Fiscalía General del Estado llevaron a cabo las muestras de ADN e informaron que el cuerpo le sería entregado hasta en tanto se hiciera la confronta del ADN de la madre y del cuerpo que correspondía a Zaira Hernández Chino.
Sin embargo, transcurridos otros 10 meses, las autoridades se negaban a entregar el cuerpo a los familiares y tras una larga travesía realizando medidas de presión, como huelgas de hambre protestas ante la Procuraduría General de la República (PGR), bloqueos a la Avenida Reforma en la Ciudad de México, finalmente este 20 de octubre el cuerpo les fue entregado.
Al notar el retraso en la realización de los estudios la familia buscó ayuda con organizaciones no gubernamentales, y en el anonimato, sin hacer público su dolor, se conformó el “Colectivo de Padres y Madres de Desaparecidos, Secuestrados y Asesinados en el Estado y el País”, con al menos 60 familias que buscaban a un ser querido.
En Guerrero, ninguna autoridad les hizo caso, y se trasladaron directamente a la PGR, donde finalmente sus casos fueron aceptados por la Subprocuraduría de Derechos Humanos Prevención del Delito y Servicios a la Comunidad, donde empezaron a dar seguimiento a los casos.
Finalmente, la entrega de los restos de Zaira, se logró luego de una reunión con el secretario particular del gobernador César Armenta Adame, con quien se reunieron para exigir que los más de 400 cuerpos que se encontraban en los Semefos del estado se les practicaran los estudios de ADN, antes de que fueran depositados en el panteón ministerial, se les abriera averiguación y practicara la confronta para saber su identidad; ahí también fue expuesto este caso.
La segunda reunión fue con el Vice Fiscal de Prevención, Alejandro Santos, el día 12 de octubre de este año, a quién también le hicieron entrega de un escrito para el fiscal general del estado donde se plasmaban las exigencias antes mencionadas, quien los canalizó con el Vice Fiscal de Investigación, José Antonio Bonilla.
El 19 de octubre del presente año, José Antonio Bonilla les informó que los más de 400 cuerpos de los Semefos del estado ya tenían sus perfiles genéticos y también contaban con una base de datos de dichos perfiles, y se comprometió a que en siete días resolvería la petición de la señora Bellanira.
La respuesta, reveló las anomalías en el caso y en la dependencia
Este jueves 20 de octubre, Michelle Chen Araujo, directora General de Atención a Víctimas del Delito y Servicios a la Comunidad de la FGE, citó a la señora Bellanira, en la Coordinación de Servicios Periciales, para darle la respuesta definitiva, la cual develaría una serie de anomalías en el caso, y en el trabajo que realiza la dependencia.
Ahí le informaron que los comparativos de ADN, ya estaban listos desde el mes de agosto de este año, sin que se hubiese enviado la confronta a la averiguación correspondiente, ni a la madre de la citada menor, cuando en reiteradas ocasiones la familia y la organización acudían a solicitar información.
En la dependencia contaban con los datos personales, como teléfono y domicilio particular y constantemente acudía comparecer ante el agente del ministerio público, que llevaba la averiguación de su hija Zaira, sin recibir ninguna noticia.
“Cuando acudimos al Semefo de Chilpancingo para hacer el reclamo del cuerpo de la menor, fuimos testigos de varias irregularidades y anomalías con que se manejan los cuerpos depositados, nos dimos cuenta que no tienen ningún protocolo, ni registro para ser identificados, no cuenta cada cuerpo con cadena de custodia, ni folio de los 185 cuerpos que están en ese lugar, por lo que no existe la certeza y seguridad de que la señora Bellanira haya recibido el cuerpo de su hija Zaira”, expuso una de las integrantes del Colectivo.
Las víctimas denunciaron también, que el presidente de la comisión ejecutiva Estatal de atención a víctimas José Luis Gallegos Peralta se negó a prestar atención y apoyo para los gastos funerarios, argumentando que el CEAV-Gro, no cuenta con fondos y presupuesto para las víctimas.
Los inconformes condenaron la ineptitud e insensibilidad con la que autoridades encargadas de atender a Víctimas de secuestro y desaparecidos en Guerrero se conducen, pues mientras el gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores, en reiteradas ocasiones ha manifestado que las víctimas son su prioridad pareciera que a sus funcionarios no les ha llegado el mensaje.
Criticaron que el Gobernador este regalando al Teletón 47 millones de pesos y destinó para las víctimas en Guerrero sólo nueve millones, cuando en el colectivo al que representan, hay niños con hambre, que han dejado los estudios porque se han quedado sin su padre o madre, ignorando las leyes de atención víctimas.
Las anomalías halladas en el caso, expusieron que son una constante en todos los casos de personas desaparecidas, no hay voluntad por parte de las autoridades para buscarlos, en los Semefos, hay cientos de cuerpos sin reconocer, por la falta de oficio de las mismas autoridades.
Este viernes en una humilde vivienda de la colonia 01 de Mayo, en la periferia de la Ciudad de Chilpancingo, la madre de Zaira derramó las últimas lágrimas que le quedaban para sepultar a su hija, que ahora estaría a punto de cumplir 17 años.
Sobre al ataúd, fue colocada una foto del rostro, dos coronas de flores y la compañía de algunos vecinos, pero al menos para ella ha terminado la travesía de no saber dónde estaba el cuerpo de su hija… No así para los cientos de familias en Guerrero y el País que aún buscan a sus seres queridos.
El funeral se dio en medio de fuertes reclamos a las autoridades estatales y federales, a los encargados de llevar los casos de desaparecidos, de realizar búsquedas, de atender a las víctimas, en contra de su insensibilidad y su complicidad con la delincuencia organizada. (API)