PRIMERA PLANA

Pararon hoy lunes labores elementos de la  Policía Preventiva de Chilpancingo, denuncian corrupción en el Fondo de Aportaciones para la Seguridad de los municipios, que depende de la federación y acusan al responsable, Efraín Zúñiga Cortes de “rasurar” los sobres.

Paralizan Preventiva, acusan

corrupción y no hay pagos aquí. 

Bernardo Torres.—Elementos de la Policía Municipal de Chilpancingo, suspendieron hoy lunes todo tipo de actividades relacionadas con la Seguridad Pública en colonias y comunidades, para denunciar actos de corrupción en el Fondo de Aportaciones para la Seguridad de los municipios, que depende de la federación.

Desde las 08:00 de la mañana de hoy lunes, los 119 policías que conforman la corporación municipal se acuartelaron en sus instalaciones en demanda de una audiencia con el secretario de Seguridad Pública de Chilpancingo, Esteban Espinoza Montoya, y el alcalde priista Marco Antonio Leyva Mena, así como la intervención de autoridades estatales.

La inconformidad estalló hoy lunes luego de que a varios elementos no les ha llegado la quincena de la segunda mitad de septiembre, y el aumento del salario prometido por el alcalde hace dos meses, se aplicó sin tomar en cuenta la antigüedad de los trabajadores.

Exigen se les informe bajo qué criterios se aplicó, pues a trabajadores con más de 10 años de trabajo o que fueron certificados, les llegó un aumento similar a quienes son de nuevo ingreso.

Acusaron que se trata de un nuevo acto de corrupción por parte del encargado del Fortaseg, Efraín Zúñiga Cortés, quien desde hace siete años que está en el cargo, no ha hecho más que “rasurar” los recursos que llegan a la dependencia municipal provenientes de la federación.

La situación no sólo se da en los aumentos salariales sino en todo tipo de prestaciones, las cuales si no se retrasan, llegan con descuentos, incluso en la entrega de uniformes, hace 15 días que les fueron otorgados, llegaron con piezas faltantes, playeras, gorras, o pantalones.

Los policías lamentaron tener que suspender las labores de vigilancia de las más de 600 colonias de Chilpancingo, para exigir lo que por ley les corresponde, y sobre todo para que se les pague un salario que ya devengaron.

Actualmente esta corporación, después de la depuración implementada hace más de dos años, sólo cuenta con 119 elementos para toda la capital y sus comunidades, y sólo cuatro unidades vehiculares para realizar recorridos.

Consideraron urgente que las autoridades de los tres niveles de gobierno tomen cartas en el asunto, pues gran parte de los recursos están siendo desviados, situación que impactará aún más, con los recortes anunciados por la Federación a este ramo presupuestal.

A pesar de este paro de labores, en Chilpancingo continúa la aplicación de la Estrategia de Seguridad para los cinco municipios más violentos del estado, y los 50 con más incidencia delictiva a nivel federal, en el que participan el Ejército Mexicano, la Policía Federal y la Fuerza Estatal.

Los uniformados atravesaron una patrulla oficial en el viejo libramiento a Tixtla, a la altura de su cuartel, bloqueando el paso de vehículos, para ejercer presión hacia las autoridades. (API).