COLUMNA

El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez

No nos cansaremos de escribir. -.No sólo la Reforma Educativa, sino también la Reforma Laboral. -.El “home office” o trabajo en casa. -.El outsourcing o la subcontratación.

 No nos cansaremos –como alguna vez lo hiciera Jesús Murillo Karam, cuando tenía a su cargo las investigaciones del crimen de lesa humanidad perpetrado en contra de los estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa –de continuar escribiendo, de continuar desparramando oraciones, letras, ríos de tinta, ideas guajiras en torno a la mentada Reforma Educativa que trata de imponer, a sangre y fuego, el gobierno del ignorante y maquiavélico muñeco de plástico, Enrique Peña Nieto; evidentemente, luego de tres años de “mandato presidencial”,

podemos decir que la “reforma” está siendo derrotada, que de nada sirvió que los arrastrados legisladores locales de la mayoría de las entidades hayan recibido varias decenas de millones de pesos para que la aprobaran; sin embargo, todos los mexicanos debemos de tener claro que no solamente es la Reforma Educativa, de la que tenemos que pedir su abrogación, sino de la Reforma Laboral en su totalidad; veamos por qué: 1.- Se implementa las actividades a distancia utilizando las tecnologías de información, el llamado “home office”; es decir, el empleado puede laborar desde su domicilio, lo que representa un ahorro para el empresario; sin embargo, esta modalidad elimina algunas prestaciones como lo es la seguridad social, el proporcionar las herramientas de trabajo y la capacitación que debe de tener el empleado; es más, falta claridad con respecto al control de la jornada de trabajo y la consabida operatividad al respecto; 2.- El pago por hora se encuentra establecido en el Art. 83, pero en el documento –que debe de ser la Ley Federal del Trabajo –no queda lo suficientemente claro en cuanto a la cantidad mínima que debe pagarse al trabajador, lo cual desincentiva el uso de este esquema; pese a todo, presuntamente el pago no podrá ser inferior al que corresponde a una jornada diaria, así que el empleador sigue cuestionándose si es más elevada la contratación por esta vía, a emplear bajo la modalidad tradicional; 3.- Confusión para outsourcing; es decir, la Reforma planteó regular la subcontratación para evitar la evasión de obligaciones por parte del patrón, pero en la forma como se redactó el documento podría caerse el riesgo de que existan dos relaciones de trabajo, una con el contratista y otra con el contratante; esto es, los empleados no estarán directamente contratados por alguna dependencia, sino al servicio de una empresa privada que habrá de hacer tratos con la dependencia que lo requiera, tal y como ocurre con Jobamex, entre otras tantas que ahora escapan de nuestra memoria, lo que prácticamente eliminaría diversas prestaciones a los que el trabajador tendría derecho y estaría al servicio de dos patrones, donde trabaja y de quien depende salarialmente, lo que no garantiza el pago íntegro de su salario, aguinaldo, disfrute de vacaciones e, incluso, el llamado reparto de utilidades; a todo eso va la llamada Reforma Educativa y comienza con el pago –de parte de los padres de familia –en el caso del aseo y vigilancia de las escuelas; esto es, serán los Consejos de Participación Social, haciendo uso de la “autonomía de gestión”, quienes se encarguen de contratar a tal o cual empresa privada para garantizar el aseo de las instalaciones escolares y así como van las cosas, en lo futuro, serán ese tipo de empresas las que van a “garantizar” la contratación de los docentes para dar clases en los planteles escolares; en fin, veremos qué pasa, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: elahuizotejr@hotmail.com