COLUMNA
Cosmos
Héctor Contreras Organista
AA CUMPLE HOY 81 AÑOS DE SALVAR MILLONES DE VIDAS:.
Con especial gratitud al sacerdote católico don Humberto Osorio Refino y a los médicos Jesús Mendoza Adame, Mario Muñiz Ramírez, Saúl Alarcón Abarca, Francisco Aparicio Soto, al Dr. Lévaro y a don Octavio Javier Calvo Leyva, por su valioso aporte humanitario a favor de Alcohólicos Anónimos, y que nos consta.
Lo mismo a los muy distinguidos periodistas don Héctor García Cantú y don Hermilo Castoena Noriega, que en paz descansen, pioneros en apoyar en sus medios de comunicación a la naciente agrupación, en 1975, en Chilpancingo.
Gracias a Bill W y al Dr. Bob, hoy viernes 10 de junio de 2016 se cumplen 81 años que comenzó a funcionar la sociedad de Alcohólicos Anónimos, en Akron, Ohio, Estados Unidos de Norteamérica, para beneficio de millones de alcohólicos y sus familias, en todo el orbe.
El Programa de “Los 12 Pasos”, “Las 12 Tradiciones” y “Los 12 Conceptos para el Servicio Mundial”,llegó a México en 1946, y a Chilpancingo en 1975, siendo el primer grupo el “5 de abril”, que comenzó a funcionar en el año mencionado, por espacio de algunas semanas en el viejo edificio del ayuntamiento (donde en la actualidad se venden periódicos y revistas), pero en aquel entonces fue desocupado, por haberse trasladado las oficinas municipales y presidencia a lo que es hoy “El Museo Regional”.
El apoyo moral para su apertura lo dio el presidente municipal de entonces, el licenciado Juan Alarcón Hernández y el Cuerpo Edilicio, con el apoyo directo del regidor don Arturo Aguilar Nava.
Al rentar el primer local para el grupo al profesor Alfonso Sales, propietario del edificio localizado en la esquina de Hidalgo y Rayón, por iniciativa de uno de los miembros de AA., (Antonio G. o “Toño Gordo”), se propuso y aceptó cambiar el nombre de “5 de abril” y se bautizó como “Grupo Chilpancingo”.
En 1976, inició actividades en la calle Omiltemi y después en la calle de Ejido 5, de la colonia “Guerrero”, el grupo “Buena Voluntad” (29 de septiembre).
En 1977, nacieron los Grupos de AA, “Sobriedad” (19 de agosto), en la calle de Allende y el “Vista Hermosa”, en la calle de Cedros y colonia que lleva esa nomenclatura y que funcionó únicamente hasta principios de 1980. Se le cambió el nombre y a las pocas semanas, desapareció.
En 1979, empezó a funcionar en la calle de Amado Nervo el grupo “Catarsis” (10 de julio) y para el 14 de julio de 1980 el grupo “Nueva Vida”, en la calle Zaragoza 46. Le siguió el grupo “El Encanto” -Cedros número 16- (8 de noviembre de 1981), en la colonia del mismo nombre, que se consideran los grupos pioneros en la capital del estado de Guerrero.
Por el gran respeto que se le guarda al Principio del Anonimato (explicado ampliamente en las Tradiciones 11a. y 12a.) no se usan los nombres completos, pero fueron don Rubén G. y don
Justino F. quienes trajeron el Mensaje de AA, a Chilpancingo, Guerrero. El segundo de ellos vive, aunque se retiró hace mucho de los grupos.
A él le pasó el mensaje de AA don Hermenegildo R., en la ciudad de Tixtla, cuando trabajó como alcaide.
Su jefe era precisamente don Hermenegildo R. quien fue profesor y él, a su vez, recibió el mensaje cuando trabajaba en una escuela de Guasave, Sinaloa, adonde fue enviado como castigo por las autoridades Educativas de Guerrero porque en Tixtla, su ciudad natal, eran frecuentes sus borracheras, a pesar del gran prestigio que tenía como reconocido educador.
Él nos platicó, en una entrevista, que llegando a su nueva escuela preguntó a sus compañeros cuáles eran las bebidas típicas en Guasave, y le respondieron que todos los profesores eran miembros de AA, de tal suerte que esa misma noche, por andar de preguntón fue a parar al grupo de AA, “La Taberna de la Sobriedad”. Encontró la solución al consumo de alcohol, dejó de beber y se convirtió en un activo miembro de AA.
Al regresar a Tixtla, la gente lo eligió para presidente municipal, y por las noches, contando con el apoyo del comerciante don Anselmo López Alcaraz y de su esposa, doña Ofelia Astudillo, que no fueron alcohólicos sino más bien gente altruista, propietarios de una zapatería localizada en avenida Ignacio Manuel Altamirano esquina con Sor Juna Inés de la Cruz, junto al edificio municipal, el 14 de septiembre de 1973, echaron a funcionar el grupo de AA “Independencia”, en la sala de recepción del ayuntamiento de Tixtla. La primera mujer que llegó al grupo fue Libertad R. Algunos conocidos comerciantes de Tixtla, radicados ahora en Chilpancingo deben de recordar la anécdota.
El grupo formalizó sus sesiones en un local (una especie de zaguán) que el matrimonio López-Astudillo les facilitó en un espacio de su propiedad en la calle Sor Juana Inés de la Cruz. Los primeros miembros fueron los hermanos de apellido Blanco; Isauro R., Lalo J., y don Teodoro y el alcaide don Justino F., a quien Hermengildo llevaba con alguna frecuencia a sesionar a los grupos “Bahía” y “Acapulco”, en el puerto guerrerense ya que le grupo “Independencia” sesionaba una vez por semana.
A esos grupos del puerto, Justino F. llevó a sesionar a su primer “doceavo”, Tomás R. quien le dijo que quería dejar de beber pero no sabía cómo.
Después de varias sesiones en Acapulco, Tomás le comentó a Justino que para evitar estar yendo al puerto, hicieran un grupo en Chilpancingo. Hablaron con el regidor Aguilar Nava y este a su vez con el alcalde Juan Alarcón Hernández y les prestó un espacio en el viejo edificio municipal adonde llegaron algunos paisanos que supieron que se podía dejar de bener y acudieron.
De tal suerte que de todos los que llegaron al grupo el miembro más antiguo en Chilpancingo es Gustavo I. Algunos le llaman, el decano. Por motivos de salud hace rato dejó de asistir a las sesiones.
Para ese momento ya don Rubén G. (chilpancingueño, pero radicado hacía mucho en el DF) había sido traído de la ciudad de México por Magdalena A., quien por petición de su mamá, doña Magda GM, fue a solicitar auxilio en favor de Marcial A., su hijo quien desde muy joven no dejaba de beber. La primera sesión de AA la coordinó don Rubén G., en el domicilio de la familia Alarcón en la calle de Justos Sierra, donde termina la calle República del Salvador.
Acudieron algunas personas porque don Rubén puso anuncios de la Junta Pública de AA, en el periódico y en el radio. Al que escribe le tocó atenderlo personalmente en los dos medios. Y es por ello que son dos las vertientes de AA en Chilpancingo. Una proveniente de Guasave, Sinaloa y la otra del DF. Marcial A., lamentablemente falleció pero se benefició su cuñado Héctor H. quien es uno de los más antiguos miembros de la agrupación. El conoció AA en Tixtla pero dedjó de beber asistiendo al grupo en la ciudad de México.
Los grupos de Alcohólicos Anónimos se han multiplicado. El único objetivo de la agrupación es “llevar el Mensaje al alcohólico que está sufriendo” y el único requisito para ser miembro de AA, es que la persona tenga el deseo de dejar de beber. AA no cobra por sus servicios y se respeta el anonimato.
Las sesiones duran hora y media y no hay jefes ni se dan ordenes y mucho menos consejos. Se comparten experiencias, nada más. Quien no esté a gusto puede salirse de la sala de sesiones a la hora que lo decida.
Con el apoyo oficial, AA lleva su Mensaje a escuelas, hospitales, cárceles, y donde soliciten sus servicios. Su literatura no se vende. Se obsequia.
Cuenta con tres interesantes axiomas: “Vive y deja vivir”. “Primero es lo primero” y “Poco a poco se va lejos”. Y la “Oración de la Serenidad” que a la letra dice:
“Dios, concédeme Serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar... Valor, para cambiar las cosas que puedo... y Sabiduría para conocer la diferencia”.
También en el Paso 11 se puede leer la hermosa y profunda Oración de San Francisco: “Señor, Hazme instrumento de tu amor para que donde haya odio, lleve amor...” (etcétera).
“La Oración de la Serenidad” es la reflexión de un soldado prusiano del Siglo IV, escrita en el pasillo de un hotel, en la ciudad de Koblenz, Alemania, de acuerdo a nuestra investigación periodística que iniciamos en la revista “Mis Hojas”, hace muchos años, y con apoyo de un ministro religioso, amigo nuestro, nacido en Koblenz.
La mayoría de los grupos pertenecen a la Central Mexicana de Servicios Generales de Alcohólicos Anónimos y ésta, a su vez, a la oficina de Servicios Mundiales de Nueva York. Su logotipo y literatura es marca registrada. El Logo es un círculo con un triángulo al centro y dos letras: AA, y en color azul. Los anuncios agregan que son miembros de la Central Mexicana.
Sus órganos de servicio se distribuyen por Distritos, donde se reúnen dos veces por mes los representantes de cada grupo. Ellos eligen un coordinador o Miembro de Comité que a su vez forma parte de un Área de Servicios Generales.
En Guerrero, desde 1988, funcionan tres órganos de servicio: Áreas Guerrero Norte; Guerrero Centro y Guerrero Sur.
Cada una cuenta con un delegado a la Conferencia Mexicana de Servicios Generales de AA y cada Mesa de Área cuenta con un coordinador, un secretario y un tesorero y sus comités de servicio, entre los que destacan: Información Pública, atención a Centros de Tratamiento, Comité de Cooperación con la Comunidad Profesional, Revista Plenitud, etcétera, cada una con su coordinador y auxiliares.
Su stock de Literatura es muy amplia e interesante.
Los locales no son propiedad de AA. Se rentan. Y la renta se paga mediante la aportación económica de sus miembros, negándose a recibir contribuciones de quienes no son miembros de AA. (7a. Tradición).
Muchas felicidades, es decir: ¡Felices 24 horas! a todos los y las miembros de AA por este feliz cumpleaños!
Ojalá y muy pronto tengan en sus oficinas como invitados al gobernador del estado, a los presidentes del Tribunal Superior de Justicia y a los diputados, así como al jefe de la Zona Militar, al secretario de Salud y a los altos jefes policiacos, a fin de que abran las puertas y el Mensaje de AA penetre en esas esferas donde a lo mejor urge que se conozca que es AA. Ojalá y no lo echen en saco roto.
Es muy importante -porque se salvan vidas- que los medios de comunicación abramos las puertas a la agrupación AA. Muchos medios que lo hacen con gusto, y hasta ya hay periodiqueros chayoteros y no chayoteros en los grupos, dejando la teporocha en el olvido y ya no dando espectáculos públicos todos vomitados o con el pantalón mojado (aunque no haya agua en Chilpancingo)... Pero, hay otros quienes no se rajan, se quieren morir en la raya.
¡El que por su gusto es wey, hasta la coyunda lame!
Dejar de beber es bonito, pero es más bonito y más valioso, cuando el Mensaje de AA se le da quien lo necesita y deja de beber, y con ello disminuyen los problemas que provoca un alcohólico en el seno familiar y en el terreno laboral… y a veces se evita una muerte prematura.
Los AAs, afirman que hay cinco lugares para dejar de beber: La Cárcel, el Hospital, el Manicomio, el Panteón y Alcohólicos Anónimos… ¿Cuál de los cinco será el mejor?
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.