COLUMNA

El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez

Nos quedamos “boquiabiertos”. -.¿Por qué no cubrir los faltantes de maestros en todas las escuelas existentes en el país? -.El Artículo 123 Constitucional establece la indemnización para los trabajadores que sean despedidos.

 Nos quedamos “boquiabiertos”: 26 mil maestros tiene a su disposición la Secretaría de Educación Pública, SEP, en manos del sargento virrey, Aurelio Nuño Mayer, para reemplazar a los docentes paristas que, aglutinados en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, CNTE, están

en lucha por la defensa de la Educación Pública en nuestro país; ¿cuánto recurso económico tendrá disponible para cubrir los salarios de esos 26 mil mentores?; bueno, si suponemos que cada uno de ellos pretende “ganar” unos 4 mil 500 quincenales, cada quincena habrán de gastarse alrededor de 117 millones de pesos; ¡¡¡Fiuuuu!!!, una cantidad impresionante, considerando el raquítico salario que percibe el pueblo trabajador; claro está, casi estamos seguros que esa declaración del nefasto Nuño Mayer es un verdadero cacaraqueo, pues si de verdad existieran esos 26 mil docente, habrá que preguntarse si todos ellos resultaron “idóneos” en las evaluaciones aplicadas; si todos ellos tienen, cuando menos, alguna licenciatura, tal y como lo ha pregonado el funcionario, ya que ahora, todo aquel profesionista que tenga ese grado académico, puede ingresar a trabajar “aunque sea como maestro”; claro está, contratado, cuando menos, unos seis meses, sin derecho a vacaciones, aguinaldo, bonos, prima vacacional, préstamos, servicio médico y tantas prestaciones que, al ponerse en marcha el nuevo sistema de contrataciones, habrán de perderse y, por ende, violentándose el Artículo 123 Constitucional; ahora mal, si de verdad existiesen esos 26 mil maestros, ¿por qué no cubrir los faltantes de maestros en todas las escuelas existentes en el país?; ¿por qué no reducir el número de alumnos por grupo a 25 estudiantes, a fin de eficientar el aprendizaje académico?; recordemos que los maestros “notificados”, opositores a la Reforma Educativa y, por ende, a la evaluación punitiva, en caso de ser “cesados” por la autoridad, habrán de entablar una demanda laboral, demanda que pudiera durar varios años en resolverse, tiempo en que el techo presupuestal de sus plazas, de sus claves, tendrá que quedar “congelado” e irse acumulándose con el paso de los meses; es decir, en dado momento –en caso de que la Junta de Conciliación y Arbitraje falle a favor del trabajador –se le habrán de pagar los salarios caídos y ahí sí seré el momento en que la puerca tuerza el rabo; por ello, a los maestros, el tal Nuño Mayer y sus secuaces, sus pericos, sus cajas de resonancia, están tratando de enjaretar la idea –a los maestros –que serán despedidos “sin responsabilidad de la autoridad”, cuando el mismo Artículo 123 Constitucional establece la indemnización para los trabajadores que sean despedidos; esto es, tienen derecho a un finiquito, principalmente porque no están renunciando al empleo de manera voluntaria; considerando esto, a los trabajadores docentes, en caso de ser “dados de baja”, les corresponde unos tres meses de salario por cada año laborado; por ejemplo: si alguno de ellos, con 20 años de servicio, con un salario mensual, digamos de 15 mil pesos, entonces le corresponden 45 mil pesos por año que, multiplicado por 20, arroja la módica cantidad de 900 mil pesos como indemnización; ¿tendrá la Secretaría de Educación la capacidad financiera para cubrir las más de 3 mil indemnizaciones de los tantos maestros que pretende despedir este año?; ahora bien, estamos seguros que el magisterio democrático de la CNTE no se va a quedar con los brazos cruzados y tendrá que luchar acudiendo ante las instancias internacionales, como la ONU, para defender el salario de los trabajadores que se han inconformado por una Ley que ha resultado del todo punitiva; otro asunto, que la SEP de Nuño Mayer no ha tomado en cuenta, es el apoyo que pudieran tener los maestros de los padres de familia; en fin, veremos qué pasa, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: elahuizotejr@hotmail.com