PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA
Epidemia en docena de
colonias por zancudos
Javier Francisco Reyes.-Una gran epidemia se registra en por lo menos doce colonias de la zona norte de Chilpancingo en la que el mosco Aedes aegypti está causando estragos a las familias en dengue, chikungunya y zika, por lo menos en un asentamiento humano se han presentado unos cien enfermos.
Este reportero había visto el zancudo en fotografías, pero nunca se imaginó verlo físicamente, menos constatarlo que es un gigantesco animalejo, por lo que causa hasta la muerte con su virus.
Hasta este día la presencia de la Secretaría de Salud de Guerrero que encabeza Carlos de la Peña Pintos ha sido imperceptible, no hay una acción de gobierno contundente, pese a la infinidad de enfermos en todos esos asentamientos humanos de la zona norte de la capital.
De acuerdo a la versión de trabajadores temporales que contrata la dependencia estatal confirmaron a La Crónica Vespertino de Chilpancingo que en la zona norte de la capital se ha detectado una epidemia que ha provocado Aedes aegypti, y lo han reportado a los funcionarios de salud, pero nada más queda en eso, sin poner mayor interés más que la de cumplir con los reportes que quedan en papeles archivados.
Entre las colonias afectadas se encuentran la Lázaro Cárdenas, El Polvorín, fraccionamiento Los Insurgentes que la conforman La Tatagildo, José María Izazaga y Francisco Javier Mina, también está la 6 de Julio, Lomas de Insurgentes, Lomas Verdes y la Norberto Flores Baños.
La presencia del zancudo transmisor ha causado males a decenas de familias en donde y donde hay más casos desde el año pasado a la fecha es en la colonia Francisco Javier Mina, ya que hay muchas casas abandonadas, por ende infinidad de recipientes con agua estancada que genera la criadero de animales, confirmaron los brigadistas de salud.
Tan gigantesco es el mosco que este reportero lo fotografió y en esta edición de La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, lo presenta con la intención de que Carlos de la Peña Pintos se sensibilice como secretario de salud e intensifique una verdadera campaña del combate del zancudo transmisor.
La exigencia de los colonos es que haya una intensa campaña de fumigación y abatización, por las mañanas, tarde y noche se observa la presencia de verdaderos enjambres del mosco maligno y en ocasiones se han visto algunas camionetas nebulizando las calles de estos asentamientos humanos pero no son suficientes y en las escasas ocasiones pasan casi “volando”.
Los colonos confirman por su parte que hay familias enteras enfermas y como no hay vacuna de cura, solamente compran dotaciones de paracetamol y se colocan compresas de agua para bajar las altas temperaturas que presentan cada uno de los pacientes.
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