PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

Ociosa PF, invade aeropista
y no combate a delincuencia

Javier Francisco Reyes.--Desde hace dieciocho meses se “fundó” la “Ciudad Policía Federal” y está invadiendo la aeropista y los uniformados no combaten a la delincuencia organizada que impera impunemente en Chilpancingo, están de ociosos, además están sólo para contener las manifestaciones de los diversos grupos sociales que exigen a los tres niveles de gobierno la presentación con vida de los 43 estudiantes normalistas de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” hechos registrados en Iguala de la Independencia en la noche y madrugada del 26 y 27 de septiembre del 2014.

La Crónica Vespertino de Chilpancingo constató  físicamente hoy de la existencia de toldos y casa-trailers que invaden  parte importante de la aeropista que se ubica al norte de la capital en la que se alojan cientos de elementos de la Policía Federal dotados de patrullas y equipos antimotines para proceder a reprimir a los manifestantes que desde hace 18 meses exigen la presentación con vida de los normalistas.
Cada vez que salen a la calle y bloquean el boulevard Vicente Guerrero, la Autopista del Sol que normalmente son la mayoría integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) van tras ellos  para que no se manifiesten, en tanto que la delincuencia con toda impunidad sigue operando en la capital del estado durante las 24 horas del día.
Aparte de que están invadiendo la aeropista los vecinos  que ya la bautizaron como la “Ciudad Policía Federal”,  también siguen destruyendo las mallas y la barda perimetral “con portillos”, pese a que les aperturaron un portón para un mejor acceso, esto se puede corroborar frente a una estación de gasolina que se ubica en la avenida Llano Grande de la colonia La Haciendita, aparte de la que está en donde comienza la zona.
También los vecinos  afirmaron que los policías federales todo el tiempo están ocupados lavando pañales, calzones y ropa para ponerlas en sus tendederos, en lugar de que salgan a patrullar por las calles y avenidas de Chilpancingo en donde transitan con toda impunidad la delincuencia organizada que pareciera que tienen también la complicidad de las policías estatales y municipales.
Desde los cerros que rodean la aeropista, los ciudadanos pueden observar de cómo luce una gran ciudad en la que se ven estacionadas patrullas, camiones, casas-trailer, trailers-sanitarios, toldos, algunos para descansar y otros los ocupan como cocinas, además por la mañana y tarde se observan movimiento de federales haciendo ejercicios.
Todo esto es un gasto innecesario e improductivo a cargo de los impuestos de los ciudadanos y que no tienen la retribución en que se les garantice la seguridad física y su patrimonio familiar desde hace 18 meses que se instalaron  varios escuadrones de la Policía Federal y que hasta este día continúan invadiendo la zona federal  sin beneficio  para la población de Chilpancingo.
Aunado a esta “Ciudad Policía Federal” ya está siendo invadida por un grupo importante de comerciantes ambulantes que expenden alimentos y productos chatarras que ya se está convirtiendo en un problema para las autoridades del ayuntamiento capitalino, ya que cuando pretendan retirarlos les habrán de exigirles respeto a su derecho de antigüedad.
El día de ayer cuando reporteros de la capital  entrevistaron al presidente municipal de Chilpancingo por el Partido Revolucionario Institucional Marco Antonio Leyva Mena fue cuestionado sobre la inseguridad pública de la capital, lo primero que contestó, sin saber si es serio o una “volada”, anunció que la Policía Federal que se encuentra concentrada en la aeropista estará haciendo rondines en la ciudad para garantizar la seguridad del municipio.
No abundó  más sobre el particular, si ya existe algún documento oficial firmado con las autoridades federales para que los elementos policiacos “distraigan” para lo que fueron traídos a Chilpancingo a reprimir al movimiento social que exige la presentación con vida de los 43  normalistas desde hace 18 meses.
Leyva Mena tampoco dio a conocer cómo se logrará ese mecanismo para que  elementos de la Policía Federal patrullen y combatan a la delincuencia que cada día causa estragos a los habitantes de Chilpancingo.
Los ciudadanos observan como un “elefante blanco” y hasta ocioso el estacionamiento de cientos de federales que se encuentran en la aeropista, inclusive han abusado de su poder contra ciudadanos indefensos que por desgracia u obligadamente tienen que transitar por la amplia avenida Llano Grande.
Los vecinos afectados por la presencia de la Policía Federal son los que viven en la parte norte de la capital, entre ellos San Rafael Norte, Casas Geo, Ampliación San Rafael, El Amate, María Dolores, El Huajal, Angel Aguirre, 11 de Marzo, Las Aguilas, Fraccionamiento Suspeg entre otras.

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