COLUMNA

El Grillito Sin Censuras
Alfonso Cerdenares Domínguez

-.La gente pierde la vergüenza al probar las mieles del poder. -.Muchos luchadores radicales se vuelven reaccionarios. Cuauhtémoc Cárdenas, en 1988, ¿negoció en lo oscurito? -.Sebastián de la Rosa, defensor del alcalde de Iguala.
Cuando la gente pierde la vergüenza, no hay nada que los haga retroceder en sus acciones; es más, pareciera que las radicalizara y se convirtiera en “el malo de la película”, porque esa es su tendencia; así también, recordemos que todo aquel que se dijo “luchador social”, que al rato prueba las mieles del poder, se vuelve reaccionario, actúa en contra de sus mismos compañeros, se pone a favor del Estado y se convierte en el peor enemigo de sus otrora correligionarios; eso mismo se puede aplicar, no a uno, sino a decenas de personajes de la vida social que han actuado de esa
manera, se les ha visto en todas las organizaciones, sean políticas, sociales o independientes; dentro de la CNTE, de los ferrocarrileros, del PRD, del PT y probablemente, en lo futuro, en el naciente partido político que ha dado una severa lección al Estado, MORENA; claro está, a ello no escapan los llamados “independientes”, a los ahora funcionarios que lograron el voto de la ciudadanía en las urnas y que han llegado al poder; nosotros esperamos que no den la vuelta a la tortilla y a la primera de cambios vuelvan la espalda al pueblo que los eligió; para muestra, basta un botón: recordemos a los perredistas, cuando se decidieron a separarse de su partido original, el Revolucionario Institucional, creando la Corriente Crítica el PRI; en ésta estaba el mismo Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, Porfirio Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez Villicaña y otros tanto más, cuyos nombres ya escapan a nuestra memoria; ellos decidieron escindirse del PRI, pues consideraron que no los tomaron en cuenta; entonces fundaron, junto a otros líderes de izquierda, como don Heberto Castillo y dirigentes de institutos políticos, el Frente Democrático Nacional, “lanzando” como candidato presidencial, en 1988, al ingeniero Cárdenas Solórzano, quien a la hora de la verdad, pues prácticamente tenía el triunfo en sus manos, muy por encima del nefasto Carlos Salinas de Gortari, no se animó a defender el voto, sea como fuera; habían cientos de miles de seguidores, quizá algunos millones que no hubiesen dudado en tomar las armas para que respetaran su voto y correr, de una vez por todas, a los pricolores de Los Pinos; sin embargo, esto no sucedió y se rumoró que Cuauhtémoc Cárdenas “negoció en lo oscurito” y nada pasó; ahora, eso mismo va a suceder en el PRD de Guerrero, cuyos legisladores locales han aceptado como su coordinador a Sebastián Alfonso de la Rosa Peláez, uno de los peores legisladores chimoltrufiascos que hemos tenido los guerrerenses, lo “canijo” de todo es que ni siquiera es de nuestra entidad, pues procede del estado de Oaxaca; El Sebas fue uno de los que defendieron a capa y espada –a ultranza dicen los politólogos –al alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, luego que fuera señalado como el principal responsable de la masacre de los estudiantes de Ayotzinapa, en septiembre de 2014; también fue de los que aprobaron las Reformas Estructurales, dándole en toda la torre al pueblo trabajados, con la Laboral y la Educativa; en fin, veremos en qué acaba todo esto, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenaresd@hotmail.com

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