PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA
Cárcel para Ortega M.
ante posible peculado
Javier Francisco Reyes.—Incongruencia y desafortunadas declaraciones de que estaría en quiebra las finanzas del gobierno estatal, por lo que se le podrían fincar responsabilidades no solo juicio político, sino hasta cárcel al gobernador sustituto Salvador Rogelio Ortega Martínez, por el delito de peculado, al tiempo que sugirió también en adelantar la toma de posesión al electo del priísta Héctor Antonio Astudillo Flores, ¿yo para que tengo que estar lidiando con este toro?
Las anteriores reacciones se dieron, luego de ayer en el Distrito Federal por el gobernador sustituto compareciera ante diputados federales y senadores de la república de la Comisión Permanente en la que acusó a las autoridades de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público le recomendó usar el primer trimestre de las participaciones que ahora, hasta les cobra intereses, además del boquete financiero, y en ese marco también sugirió declarar al estado en quiebra o “adelantamos la toma de posesión del priista Héctor Antonio Astudillo Flores”.
Para justificar sus desafortunadas declaraciones de Ortega Martínez, dijo "Adelantemos la toma de la posesión porque ahora vamos a entrar a una crisis financiera muy profunda" y añadió ante el silencio de los representantes populares que fue el tema educativo el que generó este boquete en Guerrero y si bien se resolvió un problema histórico, queda ese boquete.
Ante esto, resulta incongruente Ortega Martínez que haya ido a la Ciudad de México a declarar que la situación financiera de Guerrero es grave y que prefiere adelantar la sucesión “antes de seguir lidiando con este toro”, cuando al relevar al ex gobernador Ángel Heladio Aguirre Rivero, en octubre del 2014, manejó en el último trimestre el resto de un presupuesto de más de 41 mil millones de pesos y en este 2015, en funciones plenas, a Ortega Martínez se le autorizó un presupuesto de más de 44 mil millones de pesos.
Sorprende hasta el más ingenuo ciudadano que a más de medio año al actual mandatario guerrerense ya se le haya acabado el dinero y ahora demande a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público le libere más recursos.
Al gobierno que encabeza Salvador Rogelio Ortega Martínez, la LX legislatura local en diciembre le autorizó un presupuesto para el 2015, alrededor de 44 mil millones de pesos, y se desconoce su paradero, porque en todo el territorio guerrerense no hay obra material.
Por lo que los conocedores del derecho consideran que se está configurando en un posible desvío de recursos y peculado, por lo que podría terminar en la cárcel, como ha sucedido con los ex gobernadores, Jesús Reyna García, por el delito de delincuencia organizada; Andrés Granier Melo, de Tabasco, por desvío de recursos; Narciso Abundes Montaño, de Baja California por peculado; Pablo Salazar Mendiguchia de Chiapas, por mal manejo de dinero; Mario Villanueva Madrid, Quintana Roo, por lavado de dinero y Luis Armando Reynoso Femat, Aguas Calientes por peculado.
Por lo que el diputado local y presidente de la Comisión de Gobierno de la LX legislatura local, el perredista, Bernardo Ortega Jiménez, le respondió al mandatario estatal guerrerense, que no solamente juicio político se le podría imponer a Salvador Rogelio Ortega Martínez, sino cárcel de comprobarse que ha cometido ilícitos por ejercicio indebido de la función pública y del derecho, peculado, desvío de recursos etiquetados para fines distintos a los destinados.
Criticó lo expresado de que si ya hay mandatario electo, "¿para qué sigo lidiando con el toro?", y propuso adelantar la toma de posesión. El diputado perredista consideró que no se puede adelantar la toma de posesión, pues se quebrantaría la ley.
Consideró que esas declaraciones no son absurdas, pero indicó que la ley no lo permite, al tiempo que agregó: “Eso no puede ser; vivimos en un estado de derecho y no podemos quebrantarlo salvo que pidiera licencia o renunciara, pero tendríamos que nombrar a otro interino por los meses o días para llegar al 27 de octubre”.
Ante un escenario catastrófico, Ortega Jiménez, indicó que en caso de que Salvador Rogelio Ortega Martínez pidiera licencia o renunciara a su cargo como gobernador sustituto, el Congreso tendría que nombrar a otro gobernador que termine el periodo constitucional, pero eso desestabilizaría más al estado.
El legislador del PRD, puntualizó “Nombrar a otro interino desestabilizaría aún más al estado; por eso no podemos andar con ese tipo de declaraciones desafortunadas y nada viables; porque sí genera mucha incertidumbre, más en una situación muy complicada por la que atraviesa Guerrero (…).
Por su parte René Juárez Cisneros, senador plurinominal del PRI, y que estuvo en la comparecencia de Ortega Martínez, rechazó el planteamiento de quiebra o adelanto de gobierno.
Durante la Segunda Mesa de Diálogo Intergubernamental sobre la Implementación de la Reforma Educativa en el Senado, reprochó a Ortega Martínez que cuando estuvo al frente del gobierno hace 16 años, pudo pagarles a los maestros y “nunca pedimos un solo peso prestado”.
Por ello que rechazó el ex gobernador de Guerrero, Juárez Cisneros a que se declare en quiebra al estado, porque Ortega Martínez tiene que “buscársele salida necesariamente (al problema), no se puede declarar en quiebra”.
También comentó que el cambio de gobierno tiene que ser hasta el 27 de octubre tal como lo establece la Ley, “lo tenemos que hacer, es cumplir la ley y ni modo”.
Por su parte abogados guerrerenses plantearon ante una eventualidad de fincarle responsabilidades a Ortega Martínez por enriquecimiento ilícito y violaciones a los principios de legalidad, como aprobar matrimonios entre personas del mismo género sin modificar el Código Civil del estado, así como a la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos.
Por quê no investigan la larga relaciôn de familiares que cobran doble, empezando por su sobrino Juan Manuel Jaimes Adân, secretario particular y a la vez coordinador de asesores, quien entre sus puntadas dictô la instrucciôn de emponderar el caso de los mêdicos y empleados de Salud secuestrados para distraer la atenciôn pûblica de los desvîos financieros?
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