COLUMNA

EL GRILLITO SIN CENSURAS

Alfonso Cerdenares Domínguez

-.Ayotzinapa un juego perverso del Estado. -.Un sinvergüenza “El princesito Sofío”. -.¿Nos estamos acostumbrando a la violencia? -.Un cuento chino lo del basurero de Cocula.

Sin duda alguna, es un juego brutal, una guerra sucia, un juego por demás maquiavélico en el que se ha caído por el caso Ayotzinapa y sus 43 desaparecidos; un juego macabro en el que se juega –válgase la “rebuznancia” –con los sentimientos de la gente; lo peor de todo es que, en medio de toda esta malidicencia, los políticos se aprestan a externar sus ambiciones; ¡¡¡vamos‼!, ya

comenzaron a hacerlo; ya vimos como el “exdamo de compañía”, Socorro Sofío Ramírez Hernández, que en tiempos aguirristas se sentía el ungido por el dedo señalador del mandatario para contender, primero por la candidatura y luego por la gubernatura de la entidad; ese tipejo de marras no tuvo empacho en pedir, solicitar, mendigar ante la dirigencia estatal del tristemente célebre Partido de la Revolución Democrática –cuya dirigencia habrá de ir a parar al basurero de la historia –que lo apoyaran, pues él quiere ser gobernador de Guerrero; con esas andanzas que ya le conocemos y si el pueblo no pierde la memoria, podemos anticipar que el “Princesito Sofío” tendrá un fuerte descalabro y más aún si es postulado por el Partido “de la sangre y la violencia”, tal y como lo moteara el desaparecido exmandatario guerrerense, José Francisco Ruiz Massieu, cuya hija debió ser la vergüenza para su señor padre, luego que se aliara con quienes presuntamente ordenaran su asesinato, pero eso ya es otra historia; desgraciadamente, el caso Ayotzinapa, cuyo tema diariamente sirve para las movilizaciones del Movimiento Popular Guerrerense, ha dado al traste con las preferencias del partido en el poder –si es que lo tiene aquí en Guerrero –el PRD, pues la actuación, tanto de sus legisladores como de sus gobernantes han dejado mucho qué desear, pues los aquelarres y demás desfalcos saltan a la vista; el juego perverso del gobierno nos ha llevado a enfrentarnos unos a otros, a dar más importancia a las pérdidas materiales que a las pérdidas de vidas humanas; son 43 seres humanos que vieron truncadas sus aspiraciones, sus ideales de ser maestros para ayudar a su pueblo, a su familia, a su gente; no es posible que, con el paso de los días, en medio de tantas desgracias, de tanto crimen, nos estemos acostumbrando a que esto se convierta en el pan de cada día; no es posible que carezcamos de sentimientos, de tal forma que denostemos una lucha social que va en busca de aclarar qué sucedió en realidad con los muchachos; nosotros consideramos que al Estado “se le pasó la mano” y ahora no sabe cómo salir del enorme atolladero en el que se ha sumido, en el que lo ha sumido su ambición por el poder; tener un presidente ignorante como el que tenemos los mexicanos nos lleva a tener a un semidios, a un monarca que cree que todo lo que diga y haga es infalible, que nadie puede contradecirlo; ¿cuántas veces hemos escuchado que así como va la economía mexicana va por la ruta correcta?; eso es un cuento chino que ya ni ellos se lo creen, como ahora, ni ellos se tragan el brete de que los 43 normalistas fueron calcinados en una noche lluviosa, en un basurero de Cocula y que luego fueron arrojados sus restos al río San Juan; seguramente el gobierno mexicano dio varios cañonazos económicos a la gente de Austria para que nos salieran que uno –sólo un –de los estudiantes sí fue quemado en ese lugar; habrá que indagar qué ocurrió con los otros 42; veremos qué pasa, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenares@hotmail.com