PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

Armados se levantan
contra la delincuencia

Texto y fotos:Jonathan Cuevas.—PETLACALA, Mpio. DE SAN MIGUEL TOTOLAPAN, GRO.--Dos mil 300 hombres y 380 mujeres de doce pueblos de la Sierra de San Miguel Totolapan se levantaron en armas en contra de los grupos de delincuencia organizada que operan en la zona, cansados de los secuestros, asaltos, amenazas, presiones, hostigamiento, asesinatos y violaciones a las mujeres. 

Además, los habitantes de Petlacala que encabezan este movimiento de autodefensa decidieron no renunciar a sus tierras como en el caso de al menos 22 pueblos de la sierra de San Miguel Tototlapan, Heliodoro Castillo y Coyuca de Catalán, cuyos habitantes decidieron huir ante los embates que sufrían del crimen organizado.
Petlacala…
El pueblo de Petlacala está enclavado en lo más profundo de la alta sierra guerrerense, a 12 horas de la capital y 6 de la cabecera municipal de San Miguel Tototlapan. Ahí la gente vive sin servicios, olvidados por los tres órdenes de gobierno, en especial por su presidente municipal Saúl Beltrán Orozco que no lleva apoyos y menos obra social. 
El gobierno federal ha dejado de mandar apoyos y el estatal ni siquiera tiene policías en la zona. En toda la sierra alta no hay un solo policía estatal resguardando a ciudadanos, lo cual fue confirmado por el Secretario de Seguridad del Estado. 
Los petlacaleños se han visto obligados a salir de los programas de asistencia pública a raíz de que los operadores de los programas han dejado de subir a la Sierra por cuestiones de inseguridad, pues ahora el gobierno federal exige a los ciudadanos bajar hasta la cabecera municipal para poder ser beneficiarios con algún programa y hacer sus gestiones, lo cual, no pueden hacer por temor a ser víctimas de la delincuencia en los caminos. 
Programas como Procampo, Insumos Agrícolas, Oportunidades, Apoyos para la Canasta Básica y para Adultos Mayores han dejado de llegar a toda la sierra alta, mientras que Diconsa ha dejado de surtir en las tiendas comunitarias.
Las empresas refresqueras, de pan comercial y comida chatarra también han dejado de subir luego de que han sido amenazados por grupos del crimen organizado que les piden pagar una cuota para poder entrar desde la Tierra Caliente hasta la Sierra. 
Por si fuera poco, el transporte público que conecta a los pueblos con la cabecera municipal, dejó de funcionar. 
En la escuela primaria no hay maestros desde antes de que concluyera el ciclo escolar pasado y éste ni siquiera se ha iniciado por la misma razón, mientras que los médicos o enfermeras atienden el centro de salud “por temporadas”, ya que quienes llegan a subir permanecen por mucho un mes y luego no regresan más. Hoy, el centro de salud está cerrado.  
En Petlacala hay cerca de 700 habitantes que se dijeron cansados de los abusos de la delincuencia organizada, principalmente del grupo denominado La Familia Michoacana. Por eso decidieron levantarse en armas y auto protegerse ante el olvido gubernamental. 
Pueblos fantasma… 
En los caminos que conducen hasta Petlacala, se pueden observar más comunidades azotadas por el crimen organizado, pero en especial, 22 pueblos en los que la gente en su totalidad o mayoría, han huido. 
Yendo por el Filo Mayor hacia Petlacala se pueden observar pueblos como Yerba Buena, Yerba Santa, El Jilguero, Vuelta del Sur, Escalerilla, La Guitarra y La Galera que han sido abandonados por sus habitantes en gran proporción o totalmente; todos estos municipios pertenecientes al municipio de Heliodoro Castillo. 
En La Guitarra y La Galera se pueden observar además de las casas abandonadas totalmente, vehículos incendiados y viviendas quemadas, producto de la brutalidad de sicarios que intentan apoderarse de esa zona. 
Casos similares son en La Gallinita, Toro Muerto, Cruz de Ocote, El Chachalaco, El Descombro y Puerto Progreso, de San Miguel Totolapan. El caso del Toro Muerto y La Gallinita, las comunidades están totalmente abandonadas y en el resto, permanecen no más de 10 familias.
En Petlacala solo dos familias decidieron huir, el resto, decidieron levantarse en armas.  
Pero hacia la parte baja de la sierra de Tierra Caliente, están pueblos como Piedra Concha, El Barroso y Santa María Sur que fueron abandonados totalmente por sus habitantes. Más abajo está La Mesa de Tehuetla, Barranca de Iguala, San Miguelito, Pericotepec, El Querengue, el Carrizal y Santa María de las Flores, donde la mayoría de la gente ha decidido salir. 
Antecedentes… 
Según relatan los pobladores de Petlacala y pueblos vecinos, desde hace tres años se agravó la inseguridad luego de que el grupo de La Familia Michoacana empezó a apoderarse de los pueblos de esa parte serrana.   
A esta fecha, los habitantes de Petlacala se dijeron enfadados de los abusos de la delincuencia organizada que ha irrumpido en los pueblos exigiendo a las autoridades (comisarios) que la gente les diera de comer y beber el tiempo que estarían en cada pueblo.
Además se han apoderado de sus pertenencias; vehículos, casas y tierras, pero, han llegado a violar a las mujeres de algunas familias, ya sean menores o mayores de edad.
Según afirmaron los pobladores, un personaje de nombre Baltasar Bernal conocido como “el 11”, se ha llevado en las últimas semanas a 13 mujeres menores de edad de los pueblos de Las Tunas, El Aguacate y Concha Vieja, mismas que han sido violadas y luego regresadas a sus hogares. 
Relataron que otro personaje de nombre Juan Cruz a quien apodan el “Piriguas”, asesinó a 4 mujeres, dos hombres y un niño en el camino que va de Perico a Las Tunas, luego de que se negaban a pagar alguna cuota. La familia asesinada era cristiana. 
Señalan también a otro sicario conocido como “El Pájaro”, como uno de los más sanguinarios de la región. 
Actualmente hay en los pueblos de esa zona, 11 grupos del Ejército Mexicano que llegaron hace menos de una semana, cuando supieron que la gente se levantaría en armas. Antes de ello, los comisarios de varios pueblos hicieron constantes llamados a la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil, a la 35 Zona Militar y a la Novena Región Militar, pero no tuvieron respuesta alguna.
El día en que llegó el Ejército Mexicano instalaron retenes y sus bases en varios pueblos, entre ellos Petlacala y La Laguna. En éste último se puede observar el altar a la Santa Muerte que elementos militares intentaron destruir hace 15 días.
Según relatan los pobladores y de acuerdo a lo que se pudo observar, había 6 santas muertes en el altar ubicado sobre el camino que conecta a Petlacala y La Laguna, de las cuales 5 fueron despedazadas y una quedó ahí y sigue siendo adorada. 
El mismo día en que se intentó destruir el altar, los mismos militares que desarrollaron esa acción desbarrancaron cerca del río de Tiotepec, en el paraje conocido como Yolotla, delante de La Laguna. Por este accidente habrían muerto tres elementos del Ejército y varios más resultaron heridos. 
El 28 de mayo del año en curso, grupos rivales de la delincuencia organizada (La Familia Michoacana y Guerreros Unidos) se encontraron en Petlacala y protagonizaron un enfrentamiento que duró más de tres horas y se extendió hacia todo el pueblo.
La gente se refugió en sus hogares mientras los delincuentes se rafaguearon con armas de alto poder, dejando como saldo 3 presuntos sicarios muertos. Pero además la escuela Cuauhtémoc, el Centro de Salud e incluso la Iglesia del pueblo, resultaron con decenas de orificios de bala que aún se pueden observar.  
Levantamiento en armas… 
El sábado por la tarde, los habitantes de Petlacala y representantes de sus anexos y pueblos vecinos, se reunieron a las afueras de la escuela “Cuauhtémoc” para decidir un plan de acción que contempla levantarse en armas para hacer frente a la delincuencia organizada y, de ser necesario, conformarse como una policía rural. 
Pero iniciaron su movimiento como autodefensa hasta que el gobierno del estado o federal volteen a verlos. Por lo tanto hombres y mujeres sacaron sus escopetas y se pusieron a vigilar sus pueblos para cuidar a los suyos. 
Luego de la asamblea ofrecieron una rueda de prensa donde los niños de Petlacala mostraron pancartas en exigencia de paz.
Los pobladores leyeron un posicionamiento a nombre de más de 40 comunidades de las cuales 12 decidieron levantarse en armas y el resto exige al gobierno atención en el tema de la inseguridad. 
Entre otros pueblos mencionaron a Santa María de las Flores, El Querengue, Carrizal, Las Tunas, Los Encinos, Peritcoteoec, Huerta Vieja, El Aguacate, San Nicolás del Oro, San Miguelito, Ixtlayotla, Yolotla, La Hacienda, Laguna de Hueyanalco, Tacambarito, Nancitla, La Tuna, La Palmada, Santa Elena, Ototlán, Pandoloma, Ciénega de Puerto Alegre, Toro Muerto, Laureles, Lomillos, Palos Altos y Lumbreras.
Así como Chichalaco, Campamento de Vaca, El Descombro, Linda Vista, San Pedro Cuauhtémoc, Puerto Progreso, Petlacala, Laguna Seca, Coronillas, Ximotla, San Bartolo, Las Hebillas, San Juan Tehuehuetla, La Mesa, Barranca de Iguala, Puerto del Coco, El Barroso, Santa María Sur, Las Latas, Los Bancos, Las Mesas, Los Cajones, Real de Tepantitlán y La Comunidad; todos de San Miguel Totolapan. 
En el posicionamiento expusieron que mientras el presidente de la República Enrique Peña Nieto lanza las campanas al vuelo para anunciar la nueva Gendarmería Nacional, en las comunidades de la Sierra de Guerrero no hay alguna autoridad policial o castrense que detenga la creciente violencia que golpea a los pueblos y las familias. 
Destacaron que infinidad de veces, grupos representativos de dichos pueblos han buscado al gobernador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Ángel Heladio Aguirre Rivero para solicitarle ayuda, pero solo han sido atendidos por funcionarios de primer o segundo nivel, entre ellos el Secretario General de Gobierno Jesús Martínez Garnelo, pero nadie les ha resuelto su petición que es “dar seguridad a la sierra”.
No obstante, el problema ha ido a la alza y ha costado un sinfín de vidas humanas, además de que los pobladores han sufrido de secuestros, levantones, agresiones físicas o ataques armados. Los responsables, afirman, son grupos de la delincuencia organizada que “se han enseñoreado” en la zona.      
Afirmaron que estos grupos, “con tal impunidad realizan toda clase de delitos como robo a mano armada, abigeato, violaciones a nuestras hijas y esposas, desapariciones de muchos habitantes que su único delito es no participar con estos grupos de la delincuencia”. 
Uno de los pobladores expresó: “lamentamos informar a la sociedad guerrerense que, en el hartazgo, impotencia, coraje y desesperación ante tantos atropellos, los ciudadanos de las comunidades mencionadas así como de otras localidades que pertenecen a municipios vecinos, hemos decidido levantarnos y tomar las armas para hacer frente con nuestros propios medios y aún a costa de nuestras vidas, a los grupos de la delincuencia que flagelan gravemente a toda la región”. 
Por tanto afirmaron que emplazaron al gobierno federal, estatal y municipal para que atiendan a la brevedad posible la situación por la que están atravesando. Solicitaron al gobernador Ángel Aguirre Rivero que resuelva el problema “de inmediato” y, “no espere que ocurra un derramamiento masivo de sangre que venga a manchar aún más su mal gobierno”. 
“Nosotros ya estamos cansados de que estos grupos abusen de nuestras mujeres e hijas, hijas menores de edad que también son raptadas, de que nos arrebaten los pocos bienes que tenemos y nos obliguen a darles techo y alimentación por tiempo indefinido, ya que si no lo hacemos, nos exponemos a que nos levanten, secuestren, golpeen o maten”, expusieron.
Los pobladores acusaron al presidente municipal Saúl Beltrán de no atender a los pueblos de la sierra pues, afirmaron, ni siquiera es capaz de visitarlos, mientras que sus policías en ningún momento desde que inició su administración han subido a esa zona. 
En su posicionamiento, los sierreños exigieron al gobierno atención inmediata y se dijeron cansados de no tener acceso a los servicios, la obra pública y de que las niñas y los niños dejen de asistir a la escuela, pero además, de que cada vez haya más pueblos abandonados. 
Exigieron al gobierno federal que envíe a un Comisionado y Representante a la Sierra “para que venga a poner orden”. 
También lamentaron la actitud de su diputado local Elí Camacho Goicochea quien afirmaron, tampoco sube a esa parte serrana y menos funge como la voz de los ciudadanos a los que representa. Dijeron que aunque tiene camioneta blindada y escoltas a su servicio, se niega a subir a la sierra.
El movimiento que surgió en esa zona de la entidad fue nombrado como “Pueblos Unidos de la Sierra en contra de la Violencia”. 
Cabe destacar que frente a medios de comunicación que estuvieron presentes la tarde-noche del sábado pasado en Petlacala, ancianos, mujeres y niños exigieron “paz”. En su mayoría, los hombres tomaron sus escopetas, algunos se cubrieron del rostro y salieron a las calles a vigilar la comunidad para evitar el ingreso de los grupos delictivos.
Cabe mencionar que este domingo 31 de agosto, un coman do armado irrumpió en “La Laguna” y se llevó por la fuerza a 3 personas, lo que puso en alerta a las autodefensas. El acto se desarrolló pese a que esa es una de las comunidades con fuerte presencia militar. (API). 

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