PRINCIPAL DE NOTA ROJA
Se habría accidentado
y murió un motociclista
Antonio Cantú Rendón.—Un vendedor de chacharas la mañana de hoy miércoles perdió la vida cuando manejaba su motocicleta, derrapó y se estrelló contra el muro de contención.
El ahora occiso respondía al nombre de Rigoberto Bahena Aparicio de 33 años de edad, según su licencia de manejo expedido en Chilpancingo, y se presume que pudiera vivir en la comunidad de Huitziltepec o Azazacualco, municipio de Eduardo Neri (Zumpango).
Según dijeron las autoridades que hoy miércoles cerca de las 7:00 horas les reportaron que sobre la Autopista del Sol, en el tramo Chilpancingo-Cuernavaca, a la altura del kilómetro 259+360 pasando los túneles se encontraba una persona herida en el camellón.
Una ambulancia con paramédicos de la Cruz Roja, se trasladaron hasta ese punto en donde les habían indicado que había un herido, arribaron al lugar y efectivamente estaba una persona, a quien le checaron sus signos vitales, y descubrieron que ya había muerto.
En el lugar se encontraba una motocicleta color amarilla de la marca Italika, alrededor de esta estaban dos maletas con ropa y mercancía que al parecer vendía en la zona rural el ahora occiso.
Se presume que Rigoberto Bahena Aparicio salió de su lugar de origen y se dirigía al parecer hacia Chilpancingo, y al pasar los túneles supuestamente una de las llantas de su “caballo de acero” derrapó y terminó estrellándose contra un muro de contención.
Al impactarse recibió un golpe en el pecho eso produjo que el casco que llevaba en su cabeza volara, cayera en la barranca, en tanto que él conductor presuntamente rodó sobre la cinta asfáltica aún con vida.
Con ganas de seguir viviendo el ahora occiso al quedar sin aire, presuntamente se habría sacado su cinturón y se abrochó su pantalón, pero debido al golpe mortal que recibió en su pecho, no pudo resistir, finalmente falleció quedando en uno de los camellones con la cara mirando al cielo.
Las autoridades acudieron y por medio de su licencia de conducir se conoció que responde al nombre de Rigoberto Bahena Aparicio, en su cartera se le encontró cerca de mil pesos y todas sus pertenencias fueron recogidas por un auxiliar de la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común.
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