COLUMNA

Lectura Política

Noé Mondragón Norato

 Morena: dividir a la izquierda o negociar con el PRD

El registro otorgado por el Instituto Nacional Electoral (INE) al Morena –Movimiento de Regeneración Nacional- del ex candidato presidencial perredista, Andrés Manuel López Obrador, para que participe como partido político legal en próximo proceso comicial del 7 de junio de 2015, es una maniobra bien planificada por parte del equipo presidencial de Peña Nieto. Porque de esa forma, divide a la oposición en más pedazos. Y fracciona también, las clientelas electorales. Eso le pegará en la cabeza a los partidos con más fuerza y que hoy son oposición del PRI: el PRD y el PAN. Pero además, le concede una prerrogativa política a su más fuerte adversario en la pasada contienda presidencial de julio de 2012: el peje tabasqueño. En Guerrero, los impactos de este registro partidista apenas están cocinándose. Es cuestión de correr el telón para asomarse a los escenarios.

PEJE: DESPLAZAR AL PRD.- El PRD va en franco declive aquí. Sus diputados federales y senadores no han estado a la altura de la circunstancia ni del momento político. Y eso los impactará de frente en la elección del próximo año. En ese contexto, hay indicios de que el Morena de López Obrador, les quitará muchos votos y clientelas electorales. Algunos indicadores así lo estarían apuntando: 1.- El discurso de López Obrador ha sido beligerante contra el senador zeferinista, Armando Ríos Piter. Lo evalúo como “achichincle de Peña Nieto”, por aprobar la Reforma Hacendaria que le pegó con dureza a los bolsillos de los ciudadanos. Y que está ligado a los aumentos mensuales a las gasolinas. Luego, dicho legislador quiso vender ese voto suyo, como un logró a favor de toda la población. Si Ríos Piter quedara hipotéticamente, como candidato del PRD a la gubernatura, se convertiría en el blanco político perfecto del Morena, para evitar que el PRD retenga el gobierno estatal en la elección del 7 de junio de 2015. Quiérase o no, Ríos encarnaría el candidato incómodo de los perredistas. El que proyecta menor posibilidad de abanderar una candidatura común de las izquierdas. El que estaría imposibilitado de antemano, para abrir una negociación con el peje. Y en consecuencia, el menos viable para esa competencia. 2.- En los hechos, las tribus del PRD tienen la estructura corporativa del voto opositor al PRI. Pero su ideología y principios han degenerado. Les han mermado sustancialmente, credibilidad. En ese carril, los perredistas saben que el discurso rupturista del peje, le ha funcionado. Porque ha tomado distancia de las políticas del presidente Peña Nieto. Mientras que la tribu Nueva Izquierda (NI) o los chuchos –que tienen el control de la dirigencia nacional de ese partido-, ha negociado con él a través del Pacto por México. Y es justamente NI la que se meterá decisivamente en el palomeo del candidato a gobernador por Guerrero. De esta forma, más de la mitad del voto corporativo del PRD, podría emigrar sin duda, al Morena de López Obrador. Por eso, el PRD de los chuchos está obligado a buscar el reencuentro político con López Obrador. O la posibilidad de mantenerse en el gobierno estatal se diluirá sistemáticamente. A todo lo anterior se agrega un factor indiscutible: la entidad es más lopezobradorista, que perredista. 3.- La maniobra política del peje tabasqueño, podría abanicar hacia varios escenarios. Pero uno es marcadamente visible: al designar como su candidato a gobernador por el Morena al secretario de Salud, Lázaro Mazón Alonso, le guiñó el ojo a la tribu NI en virtud de que éste último personaje, pertenece a dicha tribu. Es una señal que no puede desdeñarse. Es decir, López Obrador invita al PRD a postular de manera común, un candidato que englobe a los intereses tanto de NI, como del propio AMLO. Pero esa maniobra deja fuera al gobernador Ángel Aguirre. Por eso, el ex candidato presidencial juega con un alfil más en la figura del alcalde de Acapulco, Luis Walton Aburto, a quien parece tener reservado para una eventual negociación con el actual mandatario estatal. De fracasar, entonces las cosas serán demasiado complicadas para el PRD, en su pretensión de retener el gobierno estatal. Apuesta en ella, todo su futuro político en la entidad.

HOJEADAS DE PÁGINAS…El presidente Peña Nieto le acaba de cobrar la factura política al Carlos Slim Helú, el hombre de negocios más rico del país y rankeado también como uno de los más acaudalados del mundo: el pasado miércoles 9, la Cámara de Diputados aprobó el dictamen de las leyes secundarias de la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones, que le cercena ganancias y desmantela su empresa América Móvil. Y favoreció a Televisa y TV-Azteca, sus aliadas políticas desde que inició como gobernador en el Estado de México, hasta llegar a la presidencia del país. Las tribus del PRD, lideradas por Jesús Zambrano, nada pudieron hacer para ayudar a su amigo Slim.

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