PRIMERA PLANA

El hartazgo porteño, sin 

terminar pésimo Acabús 

Miguel Angel Mata Mata.ACAPULCO, GRO.--La obra que debería estar finalizada desde agosto del año pasado, se ha ido alargando por diversos motivos, por lo que la molestia de la gente ante la mala planeación de los trabajos y los constantes rompimientos del concreto ya instalado 

Una de las obras que ha puesto de cabeza a los ciudadanos de Acapulco como ninguna otra en muchos años, es el Sistema Colectivo de Transporte Acabús, la cual tiene en primera instancia tuvo una inversión de mil 800 millones de pesos, ha levantado gran polémica en los distintos sectores de la sociedad, debido a que  la mala planeación de la obra causó un exorbitante tráfico vehicular, además de que se ha retrasado más de un año y medio su inauguración.

Polvo, embotellamientos, estrés constante, cierre de cortinas de varios negocios afectados por la construcción e innumerables quejas por la falta de agentes de tránsito que apoyaran en la circulación de los automovilistas, son ingredientes que acompañan la magna obra, que no obstante, también genera voces de aprobación por la cantidad de beneficios que habrá cuando esté finalizada, sin embargo, ese es un sueño por el que han dejado de creer miles de personas.

El 26 de marzo de 2012 iniciaron formalmente los trabajos del proyecto del Acabús, donde el gobernador del estado el perredista Ángel Heladio Aguirre Rivero, dio el banderazo inicial de una obra histórica en Guerrero, quien mencionó los trabajos debieron estar finalizados en agosto de 2013, meta que no se cumplió, ya que a últimas horas los constructores vuelven a romper el concreto para instalar tuberías y a últimas horas se les ocurrió la ampliación del Paseo Bicentenario, lo que ha retrasado más y más su uso.

Urgen acapulqueños la finalización de los trabajos

Acapulqueños entrevistados en distintos puntos del puerto, manifestaron que están de acuerdo en la modernización de Acapulco y en el ordenamiento de los camiones urbanos, sin embargo, reprueban la mala planeación del Acabús, lo que ha generado embotellamientos constantes, cierre de calles, accidentes, entre tantas cosas negativas que empañan el lado positivo de la obra.

A lo largo de la avenida Cuauhtémoc, donde actualmente se lleva a cabo la ampliación del Paseo Bicentenario, la mayoría de los ciudadanos cuestionados afirmaron que ha sido una obra mal planeada, a decir de Marina Cortés Alonso, “ya que abrían en todas partes y no terminaban un segmento, cuando ya abrían otra ruta, lo que causaba y hasta la vez provoca congestionamiento vehicular”.

Mariano Carranza Valente explicó que los policías viales deben poner orden en los distintos puntos donde se trabaja, porque los ciudadanos son los más afectados debido que se tienen que venir una hora o hasta hora y media antes de sus domicilios, ya que en su trabajo no les importan las obras, y si llegan tarde los regresan o les ponen falta.

María Concepción Rodríguez, trabajadora de un hotel en la costera “Miguel Alemán”, comentó: “No es posible que se lleven más de dos años por la construcción del Acabús y que todavía no haya fecha para su culminación cuando los que pagamos los platos rotos somos los ciudadanos que pagamos nuestros impuestos y salimos perjudicados, ya que si llegamos tarde al trabajo, nos castigan o descuentan el salario”.

“Yo estoy de acuerdo con la obra y que pongan en orden a los choferes de los camiones urbanos que abusan de la gente, ya que no tienen educación; se paran en doble fila y bajan a los pasajeros donde les da su gana, por lo que el Acabús es una gran solución, sin embargo, su tardanza ha generado hartazgo en la ciudadanía, ya que se piensa que sólo se están robando los recursos y se inventan pretextos para no finalizar con los trabajos de una sola vez”, dijo la porteña.

Inversión

En la obra se llevan invertidos más de mil 797 millones de pesos, de los cuales el 39.8 por ciento proviene del gobierno estatal, el 38.7 por ciento del Concesionario del Sistema Integrado de Transporte y el 21.5 por ciento del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin).

Beneficios

Atropellos, varias muertes por la imprudencia de la mayoría de los choferes de los camiones urbanos, desconocimiento total de la cultura vial, falta de respeto a los pasajeros, entre otras cosas, fueron los principales motivos para que el gobierno estatal pusiera en marcha esta magna obra del Acabús, algo que beneficiará aproximadamente a un 60 por ciento de los porteños que tienen que abordar unidades chatarra, con operadores sin la debida capacitación y que constantemente manejan con exceso de velocidad.

El Transporte Colectivo Acabús tendrá un corredor principal de 16 kilómetros, que irá desde Las Cruces, por la avenida Cuauhtémoc hasta Caleta, donde por 18 estaciones circularán 38 autobuses articulados.

Además, contiguo al principal eje, se desprenden cinco rutas troncales con paradas predeterminadas (una la costera Miguel Alemán), nueve auxiliares, 61 alimentadoras y 43 remanentes por las cuales se desplazarán 227 autobuses tipo padrón con capacidad para 100 pasajeros, 51 autobuses articulados, 51 camiones, 400 microbuses y 294 combis o van. Esta reorganización permitirá reducir de 217 rutas que hay actualmente en el puerto a 118, con una flotilla de vehículos de transporte colectivo de mil 010 unidades y que según expertos, descenderá el trafico en un 25 por ciento.