COLUMNA

Lectura Política

Noé Mondragón Norato

 De indisciplinas e incongruencias perredistas

El PRD proyecta no solo serios problemas de identidad ideológica –aunque en el fondo, es una divisa que pierde y recupera según la circunstancia y los intereses de las tribus-, sino de control y disciplina sobre su militancia. Los vaivenes y escenarios adversos para ese partido se acumulan progresivamente, ante la mirada perpleja e impertérrita de dirigentes y personajes que lo conforman. Y eso refleja una tangible ausencia de liderazgo. Nada más es cuestión de asomarse a ciertos eventos recientes para confirmar esta nociva tendencia que lesiona y degrada cada vez más, a toda la militancia del partido del sol azteca.

INDISCIPLINA E INCONGRUENCIA.- Para la militancia perredista, el tránsito de aquí a la elección de julio de 2015, atraviesa por la difícil tarea de lograr hacer bien las cosas. Es un requisito indispensable a fin de retener el gobierno estatal. Y uno de los obstáculos recientes ha sido la polémica levantada en relación a la iniciativa gubernamental para despenalizar el aborto. El otro, se mide con el regreso del PRD al debate sobre la Reforma Energética en el Senado de la república. Hay que ir por partes: A) En una vistosa conferencia de prensa, el secretario general del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, Alejandro Sánchez Camacho, señaló al diputado federal priísta, Manuel Añorve Baños, como el personaje que “agita las aguas en el estado a través de su esposa, la diputada local Julieta Fernández Márquez, para propiciar el voto en contra de la despenalización del aborto”. En ese evento se hizo acompañar del dirigente estatal de ese partido, Carlos Reyes Torres. Pero el punto que jala no puede dejar de leerse: la diputada local perredista, Ana Lilia Jiménez Rumbo, es otra de las principales promotoras del voto en contra de esa iniciativa. Y ahí los perredistas, como los mariachis, callaron. Sánchez Camacho adujo incluso, “no tener lista la guillotina” para cortar cabezas políticas al interior de las tribus locales. En específico, contra la diputada Ana Lilia. Y el dirigente estatal del PRD, Reyes Torres lanzó un tibio llamado a David Jiménez Rumbo, -líder de la tribu Grupo Guerrero (GG) a la que el propio dirigente estatal pertenece-, a fin de explicarle en qué consiste la propuesta “e invitarlo a respaldar la propuesta del PRD”. Con esa simple postura, Reyes Torres acusó de ignorante sobre el tema de la despenalización del aborto, a su tutor político. Y la diputada Ana Lilia les sigue metiendo ruido a todas las expresiones perredistas. En otras palabras: los patos le están tirando a las escopetas. No hay disciplina ni liderazgo partidista en el sol azteca que frene estas conductas a título personal. Y así, las tribus se aprecian muy debilitadas y faltas de carácter frente a la contienda electoral que se aproxima. B) En el Senado de la república, la fracción del PAN abandonó la mesa de discusión sobre la Reforma Energética que el PRI y el presidente Peña Nieto, veían asegurada con los votos albiazules. El pretexto de los panistas se fincó en un hecho controversial: el PRI no ha impulsado a fondo la reforma política en los estados del país. Y tiene la firme intención de modificar el artículo 87 de la Ley General de Partidos Políticos, relacionada con las coaliciones. En concreto, el párrafo 13 a través del cual y de acuerdo a la percepción panista “se trata de dar vida artificial a los partidos pequeños”. Y es que el PAN es partido pequeño en algunas entidades del país como Guerrero. Esa fue una oportunidad de oro para los perredistas, quienes a través de su coordinador en el Senado, Miguel Barbosa, anunciaron el regreso del PRD a la mesa del debate energético en las Comisiones Unidas de Energía y Estudios Legislativos. Junto a la fracción del PT, el PRD abandonó la sesión del pasado viernes 13 de junio en medio de una ríspida discusión con los senadores del PRI y PAN. Hoy sin el PAN, los perredistas podrían ocupar su lugar en la negociación política con el PRI de Peña Nieto. Y eventualmente, hasta olvidarse de la consulta ciudadana en materia energética que promueve ese partido junto a otros de izquierda como el Morena, el Movimiento Ciudadano y el PT. Ese hecho revela los niveles de incongruencia y extravío del PRD. En suma, no atraviesa por su mejor momento. Y todavía estaría en proceso, lo peor para ellos.

HOJEADAS DE PÁGINAS…Y es precisamente en el PAN donde las cosas tampoco caminan bien. Al parecer, una maniobra operada desde el centro del país, dejó parcialmente fuera de la competencia interna por la candidatura al gobierno estatal, al diputado local panista, Jorge Camacho Peñaloza. Ese lugar estaría reservado para Enrique Castro Soto, actual secretario de Desarrollo Económico en la administración de Ángel Aguirre. Pero aun así, las aguas podrían revolverse. La unidad panista atraviesa también, por sus puntos de quiebre.

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