PRIMERA PLANA
Aunque me construyan casas de oro,
no me devuelven a mi familia:Juana
ATOYAC DE ALVAREZ, GRO.--Lo que está haciendo el gobierno no tengo con que agradecérselo —pero aunque me construyan una casa de oro sé que ya nadie le devuelve la vida a mis dos hijas, a mi papá y mi hermano que estábamos acostumbrados a vivir juntos en La Pintada —, narra de manera sollozada, la señora Juana Castro, quien recibió un proyecto de tortillería y en próximos días estará lista su vivienda que le construye el gobierno federal.
Subiendo la mirada al cielo en reiteradas ocasiones; Juana Castro, de manera dolorosa, comenta que un enorme alud de tierra ocasionado por la tormenta “Manuel”, en septiembre del año pasado, terminó con la vida de sus hijas Ariani de 14 años, Martha Graciela de 8; además de su padre, Justino Castro Baltazar y su hermano, Justino Castro Márquez—se habla que en total fueron 95 personas que murieron enterrados en la Pintada, municipio de Atoyac de Álvarez.
A seis meses de la tragedia, Juana Castro reconoce que el apoyo del estado y federación ha sido el mejor que han recibido en consideración con otros municipios donde hubo damnificados: “Nos han apoyado muchísimo, cuando no había nada de casa, me preguntaba y decía; hay Dios mío cómo le voy hacer ahora dónde voy a vivir, qué va a ser de nosotros, mis hijos los que me quedaron cómo le voy hacer, sin nada de dinero ningún apoyo”.
Cuando sucedió la tragedia varias de las familias damnificadas fueron trasladadas a Acapulco “nos dijeron que nos iban apoyar, que no nos preocupáramos que nos iban hacer las casas, que íbamos a tener un lugar donde vivir y cumplió el presidente —Enrique Peña Nieto—, quisiera verlo en persona para agradecérselo, no tendremos con que pagarle lo que ha hecho por nosotros, lo que está haciendo y las casas”.
Sobre los apoyos recibidos, explicó que le entregaron una tortillería, la capacitaron y le manifestaron que si le echaba ganas se quedaría con el proyecto “ahora todo lo que tengo lo he comprado yo, con lo que he ido sacando, no tengo con que agradecerles; por ese lado yo estoy contenta me siento a gusto”, narra la señora Juana.
Le he echado muchas ganas, gracias a Dios, al gobierno, los topos, la Marina que nos apoyó, cuando sacamos los cuerpos de mis hijas de mi hermano y mi papa, “ver como los sacaban, para mi toda esa imagen la tengo en mi mente y va ser imposible borrarla, es un dolor que no se le desea ni al peor enemigo.
Hoy me da tristeza ver a mi niño (de 10 años de edad) que no quiere ir a la escuela, no quiere jugar no quiere hacer nada, y cómo lo obligo, si vio cómo se tapó su tío, su abuelito y sus hermanas , “a lo mejor para los que no perdieron familia todo esto es como fiesta, alegría porque todos salieron beneficiados gracias a esto, pero para nosotros todo es tristeza, aunque pasen los años es muy triste para mí, muy doloroso de qué sirven casas buenas y todo, cuando el dolor y las tristeza es muy grande: “Porque así puede tener uno cien hijos, nunca un hijo remplaza al otro eso jamás, los hijos son la vena del corazón y de eso yo creo que nunca me voy a reponer”.
Contenta porque va a tener casa nueva
La Señora Eneyda Alonso, es una de las 13 familias que están aún en el albergue que se instaló en La Pintada, porque el resto de los damnificados vive en la comunidad con otros de sus familiares; “mi casa se perdió y también la van a reconstruir, mi casa era de adobe arriba tenía lamina, la van hacer de material”, dijo que aún continúa Protección Civil, llevando despensas, hay una panadería, tortillería, carpintería, hay juegos infantiles y canchas de fútbol, tenemos lo necesario para llevar bien la vida”.
Se están construyendo 210 casas
La señora Natalia Márquez Rojas, encargada del comedor que se instaló en la comunidad, manifestó que en la llamada “noche de la desgracia”, fallecieron como 95 personas sepultadas por el lodo; afortunadamente; dijo que el gobierno está construyendo las casas y estamos agradecidos “hay 210 que se van a construir, no nos han abandonado, le damos gracias al presidente Peña, estamos agradecidos”, viviendas que se están construyendo también para las familias que están en zonas de alto riesgo de la población.
Explicó que aunado al apoyo material que han recibido, la secretaria de Desarrollo Social (Sedesol), Beatriz Mojica Morga, los ha apoyado con psicólogos “para irnos olvidando poco a poco y le estamos echándole ganas”.
Interviene Sedesol con psicólogos y sociólogos
Durante un recorrido que realizó por segunda ocasión en menos de una semana, la secretaria de Desarrollo Social, Beatriz Mojica Morga; dijo que lo ocurrido en la comunidad La Pintada fue una tragedia muy fuerte para los guerrerenses, por ello explicó que la Sedesol está realizando una intervención de reconstrucción social, “porque no todo se basa en cuestiones materiales, la gente quedó muy afectada y en ese sentido están viniendo psicólogos y sociólogos para trabajar con los niños, familias para poder restablecer la confianza y los lazos comunitarios”.
Beatriz Mojica, explicó que se están realizando terapias grupales con psicólogos que le permitan a la gente expresarse y sacar ese dolor que llevan dentro, “después vamos a hacer otras cosas sobre el rescate de los libros, la biblioteca, espacios públicos.
En el recorrido que efectuó con niños y niñas de la comunidad, acudieron a la Piedra La Pintada, contaron sus anécdotas, habló con los deudos de las familias que fallecieron, con quienes están en el albergue y profesores; posteriormente psicólogos y sociólogos, de la Sedesol realizaron diversas actividades para que hoy los niños y niñas estén haciendo acciones que refuerzan la identidad, que permitan restablecer la confianza y los lazos comunitarios”.
Beatriz Mojica manifestó que posteriormente va a continuar con otros proyectos productivos y promocionar el café y sus derivados que es uno de los más exquisitos del país.
La Piedra La Pintada cobrará vidas cada 50 años
Ismael Gómez Maldonado, de 12 años de edad; originario de la comunidad Los Cajeles, Narró: “estamos en la Pintada por la tragedia que le pasó a la familia, primos hermanos murieron, uno se quedó huérfano perdimos a mucha familia y venimos a apoyar a mi hermano en su huerta de café, apoyamos en lo que se pueda”.
Sobre lo que pasó en el mes de septiembre del año pasado, cuenta que recientemente vinieron unos científicos y estudiaron La Piedra La Pintada —emblema de la comunidad—, dice que se cuenta que hay un reloj antiguo que dejaron los mayas.
Narró: “En este lugar vivió un brujo y antes de morir hizo pacto con el diablo y dijo que el reloj marcaría que cada 50 años, va a cobrar vidas; y por la tragedia que pasó aquí estamos convencidos de que eso es” (ANG).
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.