ARTICULO

Blindaje político

“Ahí Está el detalle… chatos”. Mario Moreno “Cantinflas”.

Efraín Flores Maldonado*

Ante las sospechas fundadas y las presunciones legales y moralmente legítimas de que el atentado contra Pioquinto  Damián Huato es probable autor intelectual Mario Moreno Arcos, el presunto culpable ha recurrido de manera ingenua y candorosa a cubrirse con un “blindaje político” notoriamente estúpido. “Me atacan porque soy el aspirante mas fuerte al gobierno del Estado”,chilló melodramáticamente y amenazó con demandar el empresario que sin tapujos lo señaló como instigador del atentado. Como estudioso de la Ciencia Política estoy tratando de elaborar un enfoque, hipótesis o teoría, que me permita aspirar a que los politólogos reconocidos universalmente abreven en mi propuesta de nueva teoría política. Podrá decir “todo

aspirante a candidato a Gobernador por el PRI está exento de toda  sospecha legal y quienes lo acusen serán procesados y condenados a 100 años de prisión”. Esa pretensión de blindaje político no es más que el reflejo de un nerviosismo sospechoso. ¿Si es inocente, porque se niega a comparecer ante la ley? ¿De dónde saca que es “fuerte” aspirante a la candidatura del PRI? Por el contrario, una elemental lógica lo descalifica de antemano para su pretendida candidatura, por las siguientes razones; Es un personaje eminentemente municipal; es, de todos los aspirantes, el que tiene la más pobre formación escolar; Escasos estudios de Secundaria y un dudoso diploma de Contador Privado sin registro ni reconocimiento en la SEP, emitido por una academia “patito”. Ante esta realidad, debería ser humilde servidor público  y no compararse con aspirantes del PRI y de otros partidos que tienen presencia estatal y hasta estudios de posgrado. Así se parece a un rijoso enano, tratando de tomarse la foto con gigantes. Otra razón más que lo descalifica es que “llora como mujer por la ciudad a la que no ha  podido servir ni defender  como hombre”, pues en Chilpancingo los servicios públicos son un desastre y la inseguridad es una realidad de la que Mario Moreno Arcos parece cómplice. Si no puede administrar política y socialmente un municipio, menos podría asegurar el bienestar y la seguridad pública de los guerrerenses. Como se dice en ese librito titulado “Los principios de Peter”, Mario Moreno Arcos ha encontrado en su segunda Presidencia Municipal “su nivel de incompetencia”; Pero el aspirante a gobernador, se hace como que no lo sabe, aunque el pueblo se lo señale a gritos. El autodefinido precandidato “fuerte” al gobierno de Guerrero, en realidad es un Presidente Municipal sin gracia y en desgracia. Su situación actual lo ubica como un minúsculo político navegando en un barco de papel; iluso, el Presidente Municipal de la ciudad capital pretende escudarse tomándose la foto con el Gobernador perredista Angel Heladio Aguirre Rivero, sin darse cuenta que el mandatario tiene sus propios problemas y que se antoja imprudente y necio quererle echar encima los problemas que debe enfrentar Mario Moreno Arcos. Lo que procede moral, legal y políticamente es que Mario Moreno Arcos “voluntariamente” se retire de la Presidencia Municipal mientras se realizan las investigaciones, incluido  él como presunto responsable y esperar que la justicia lo condene o lo declare inocente. Lo demás son puras “Cantinfladas” de un mimo que se siente “político”.Es todo.*Doctorante en Ciencia Política.