PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

Como regalo de Navidad Moreno

 desalojó 200 damnificados, hoy

 Javier Francisco Reyes.--Como regalo de Navidad y Año Nuevo de parte del presidente municipal de Chilpancingo, el priísta cumplió su ultimátum al desalojar con policías a más de 200 damnificados que permanecían desde hace casi tres meses tras las afectaciones del huracán “Ingrid” la tormenta “Manuel” que se presentaron en el mes patrio, en tanto el edil afirmó que muchos de estos no tenía necesidad y otros tienen familia donde llegar.

Hasta hoy viernes, había unas 200 damnificados en las instalaciones en el Instituto del Deporte y la Juventud de Guerrero (INDEG), que ya está resguardado con uniformados de la Policía Estatal Preventiva, ya que unas 100 personas se negaba abandonar el lugar cerca de las 14:30 horas, para ello, les quitaron alimentos, servicio de agua y energía eléctrica.

La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, la mañana de hoy realizó un recorrido por el albergue, se observó que hay resistencia de dejar el lugar, no porque sea un capricho, sino que no hay la garantía en donde llegar porque muchos lo perdieron todo.

El desalojo fue instruido por el presidente municipal priísta  Mario Moreno Arcos para las 200 familias damnificadas que todavía quedaban en el lugar hostigados por los uniformados los que se resistían abandonar el lugar y otros comenzaron a sacar sus bolsas de color negro llevando lo poco de ropa como pudieran cargaron, otras más se resistía hasta las 14:30 horas decían que no abandonaría el albergue de las instalaciones del Indeg, porque no tenía a donde ir, incluidos varios discapacitados.

Se veían familias con el rostro desencajado, con sus miradas pérdidas, porque el alcalde priísta Mario Moreno Arcos, nada concreto les ofreció, ahora no saben dónde ir, algunas luchaban para cargar sus bolsas de su escasas pertenencias.

Para obligarlos a dejar el lugar en donde todavía dormían niños sobre algunas, pero la arrogancia llegó al extremo de la encargada del albergue del INDEG, Yeni Francisca Solís Carmona, la mañana de hoy les aventó unos cuantos chiles verdes y sardinas, “ahí se los deje, si tienen hambre coman, porque yo ya me voy de vacaciones”.

En tanto una de las pocas veces que asume una gran responsabilidad, el regidor del Partido Movimiento Ciudadano, Andrei Marmolejo Valle, andaba ofreciendo limosnas al nombre del Ayuntamiento de Chilpancingo, la cantidad de 2 mil pesos para que paguen la renta y un paquete de 20 láminas de cartón para que hagan su casa en donde quieran.

En algunos casos, aplicaban el adagio popular, “De lo perdido lo que aparezca”, aceptaron ese disque apoyo “institucional” que ofrecía Marmolejo Valle, luego de que casi no va a su oficina, esta ocasión se le vio muy cansado de echar saliva con las familias damnificadas.

Se conoció desde el pasado miércoles y que la fecha límites sería hasta el mediodía de hoy viernes en que las familias damnificadas que permanecen en esas instalaciones desde el mes de Septiembre debido a que sus casas quedaron inhabitables, y como fue amenazados de que sería desalojados con la fuerza pública, la mayoría prefirieron abandonar el lugar antes de que llegaran los policías.

Los afectados no solamente están preocupados, si no que no saben a dónde ir, porque si la orden del alcalde Mario Moreno Arcos es desalojar, lo consideran como una persona deshumanizada, ya que no les ofrece un espacio en donde vivir con sus familias, en tanto otras más lo tomaron como un regalo anticipado del alcalde con motivo de la Navidad y Año Nuevo.

Denunciaron  que el miércoles por la noche, la encargada del albergue y Secretaria de Desarrollo Social del municipio, Denisse Martínez Mendiola llegó acompañada de otros funcionarios y algunos policías municipales para anunciarles que solo podrían permanecer en el lugar hasta las 12:00 del día de este viernes, debido a que el inmueble sería entregado al gobierno del estado.

Eso desde luego que causó molestia y negativa de los damnificados, con una actitud arrogante, la funcionaria les advirtió que “no le importaba a donde se fueran, aunque sea debajo de un puente pero se tenían que ir”, comentaron las ahora familias desamparadas que recibieron el mensaje de las autoridades municipales “tomen su Navidad”.

Con impotencia para enfrentar la realidad, al no tener nada, en la que los tres niveles de gobierno, simplemente se echan la bolita, con lágrimas en los ojos y voz cortada, una de las afectadas señaló que en el albergue hay más de 200 familias que perdieron sus bienes por completo y que hoy, no tienen siquiera donde dormir. 

Por lo que recriminaron la actitud deshumanizada del priísta Mario Moreno Arcos y su gobierno municipal, ya que los está dejando desamparados y exigiéndoles que abandonen el albergue pues, de lo contrario, para este viernes a las 12:00 del día enviarían a policías para realizar un desalojo.

Existía mucho temor de que llegara la fuerza pública a echarlos a la calle con sus pocas cosas que han tenido durante casi tres meses, inclusive ya no recibieron alimentos este jueves, fue racionada a su máxima expresión, solo recibieron un platillo por persona.

Igualmente les advirtieron que a las personas que salieran a trabajar temprano este viernes, ya no se les daría acceso a las instalaciones a su regreso, mientras que las personas que quedaran dentro serían desalojadas a la hora mencionada.  

Es preciso señalar que hace una semana el presidente municipal priísta Mario Moreno Arcos adelantó que se cerraría definitivamente el albergue del Indeg, pese a ser el único que quedaba en Chilpancingo, sin embargo, frente a representantes de medios de comunicación, el primer edil afirmó que se abriría otro albergue, aunque más pequeño. 

Por lo menos hasta la mañana de hoy, la promesa no se veía que se fuera a cumplir por Moreno Arcos, por lo que los damnificados exigieron la presencia del alcalde y “que él mismo tenga el valor de decirnos que nos tenemos que ir”. 

Igualmente recordaron que una de las promesas que les hizo el presidente de la República y del gobernador del Estado, quienes llegaron al albergue junto con el alcalde, se anunció que se adquiriría un terreno en el que temporalmente construirían unas galeras para darles un techo a las familias.  

La mañana de hoy mismo, el edil priísta Mario Moreno Arcos, dijo que muchas de las 200 familias que permanecían, no tenía mucha necesidad, porque algunas tienen empleo, trabajan, y otras más cuentan con casas, y familias en donde llegar.

Las familias recibían tres alimentos diarios sin trabajar, por lo que consideró de que definitivamente muchas de la familias ya no tenía razón de estar en el lugar y las que realmente necesiten se les ayudará como el pago de la renta, ofreció  el alcalde capitalino.

Insistió Moreno Arcos que ya eran los menos que realmente necesitan una vivienda, para ello se está trabajando para definir en donde se les reubicará para dar cumplimiento el ofrecimiento presidencial.