PRIMERA PLANA

Del amor al odio, todo por

una casa: Teresa y Delfino 

Texto y fotos:Domingo Francisco Reyes.--Vivieron ocho años juntos, no procrearon hijos, compraron entre los dos una casa habitación, ahora se la pelean mediante juicio ante tribunales y se acusan difamándose mutuamente, no es cuento, es real, lo que alguna vez fue una pareja sentimental, entre Teresa Robledo Rebolledo y Delfino Meza Bibiano.

En entrevista con La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, la distinguida militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Teresa Robledo Rebolledo, regidora de Hacienda del ayuntamiento capitalino, explica sobre el conflicto que tiene con su ahora ex pareja sentimental,  después de que  primero el malagradecido  Meza Bibiano ventilara en los medios el conflicto.  

Entre precisiones y defendiéndose la representante popular priísta, sin decir su nombre de entrada, puntualiza: “éste señor mandilón, holgazán, mantenido de las mujeres que le dan la mano y después paga con malos tratos, ya que me hecho en dos periódicos para difamarme nada mas”.

Añade “además de esto también mandó información para todos mis compañeros regidores para perjudicarme, yo tengo una profesión y mi trabajo me recomiendan”.

Ya entrada en la plática la regidora priísta se despabila ante la grabadora de  La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, “Delfino Meza Bibiano es un hombre que le faltan pantalones y es como vieja argüendera, nada más quiere perjudicarme y hacerme quedar mal con mis compañeros regidores, volanteó este problema  pero no lo conseguirá”.

Para entendimiento de la opinión pública, la edil capitalina, pues nunca se puso de acuerdo en qué es el amor, ahora lo explica de la siguiente manera: “Delfino Meza Bibiano y yo Teresa Robledo Rebolledo fuimos pareja sentimental que vivimos ocho años en la casa marcada con el número 6 de la calle “Baltazar R. Leyva Mancilla” del barrio de Tequicorral”.

Expone el antecedente del ahora conflicto, “antes de que me juntara con esta persona, ya tenía 15 años habitando esta vivienda,  donde la señora Leuteria es testigo, ahora esta persona me está demandando de que no me quiero salir de la casa habitación,  cuando yo tengo más de 5 meses de que ya no vivo en ese lugar”.

Aunque no suspira por su amor del pasado, que ahora la difama y que anda su reputación en los medios de comunicación y en boca de los ciudadanos, precisa “al juntarnos yo y Delfino Meza Bibiano, al pasar el tiempo la señora Leuteria me informó que iba a vender la casa y yo le comenté a mi pareja sentimental en ese momento y me respondió hay que comprarla”.

Para hacer el negocio, y nunca revela el costo, dice “platicamos  y coincidimos de que aportaríamos la mitad del costo de la vivienda, pero nunca pensé de que esta persona nada mas vino a jugar con mi persona, nada más tardamos 8 años de estar viviendo juntos sin procrear hijos, después se alocó y se fue con otra mujer con la que vive actualmente, dejándome en la casa que se compró con dinero de los dos y ahora me anda demandando”.

Después de que le entregó toda su juventud a ese amor que pensaba que sería eterno—Delfino Meza Bibiano--este señor, al pasar ocho años, se fue con otra mujer, y fue cuando escrituró a nombre de él, sin que me tomara en cuenta, ya que yo también aporté la mitad de la cantidad que costó este inmueble, y a su vez de manera pronta realizó otra escritura pero ahora con el nombre de Clara Isabel Meza Ortega del primer matrimonia, para que de esta manera sea esta la que me demande un juicio reivindicatorio en los juzgados Civiles de esta ciudad”.

Confesando su buena fé, y por el amor de su Príncipe azul, Teresa Robledo Rebolledo, comenta: “nunca pensé de que éste señor me iba a traicionar, que ahora hasta me echó en dos periódicos locales para perjudicarme y difamarme cosa que no lo conseguirá, ya que yo tengo mi profesión y mi trabajo que me avalan”.

Luego la representante popular con mucha rabia porque el asunto personal, esté ahora en los medios, refiere “después de su ignorancia de Delfino Meza Bibiano y sin tomarme en cuenta sobre el cambio de la escritura que supuestamente pasó a nombre de su hija Clara Isabel Meza Ortega, cosa que estoy segura de que Clara Isabel no firmó el escrito de fecha 9 de octubre de 2013, ya que dicha persona radica de manera permanente en la ciudad de Baja California Sur, y que la firma que lo calza se trata de una burda falsificación de Delfino Meza Bibiano”.

Sobre este asunto, y que nunca pensó en aquellos momentos que vivían el amor como Romeo y Julieta, manifiesta “ahora me pone una demanda, donde dice que no me quiero salir de esta casa, que compramos entre los dos y que yo desalojé a su hija, cosa que es totalmente falso, ya que ella nunca vivió y no ha vivido en esa casa, por eso digo que este señor es un mentiroso que le faltan pantalones para que arreglemos las cosas de frente y no ande de alborotado que a todo mundo anda dándole a saber sobre este asunto que es totalmente particular entre yo como mujer y el según hombre, ya que con esto se demuestra que es un vividor de las mujeres que obramos bien con él”. 

Demostrando que ella si tiene los calzones bien puestos, que no es una mujer argüendera, añadió Robledo Rebolledo, “lo que pasa es que nada más es para que yo no le peleara mi parte que me corresponde, por eso está haciendo esta tontería y ahora estoy demandada, y pido que las autoridades investiguen minuciosamente de cómo está el asunto sobre esta vivienda y sobre la escrituración que las autoridades actúen con forme a la ley y no por el dinero que les dan las personas que quieren perjudicar a terceros”.

Para rubricar y completar su triste historia de amor estridente que algún día se tuvieron  y ahora se convirtió en odio por una casa que no habla, ni revela aquellas noches, días y años húmedos en la que la soledad abrazaba la pareja y sin tener frutos que ahora pudieran estar sufriendo por el pleito y el odio, la regidora capitalina sostiene que  Clara Isabel Meza Ortega no es la que pelea esto, sino que es el mandilón de Delfino Meza Bibiano”.