COLUMNA
Resquicio
Hipolito Marbán
ALCALDE DE TIXTLA: HUNDIDO EN EL FANGO DE SU INCOMPETENCIA Y DESLEALTADES RELIGIOSAS
Si en estos momentos tan críticos que viven nuestros hermanos tixtlecos, viviera el consumador de la independencia de México Vicente Guerrero Saldaña, y el político, maestro, abogado, periodista autor de “Navidad en las Montañas” Ignacio Manuel Altamirano, primeramente colgarían del árbol más alto al edil Gustavo Alfredo Alcaraz, por su total incompetencia y falto de cerebro para resolver los problemas de su municipio, y de paso fusilarían a exalcaldes por robarle a sus propios paisanos, nada que ver con estos dos personajes que dieron vida y proyección internacional a esta levítica ciudad de Tixtla,
las inundaciones que vive Tixtla no es nuevo, año con año la laguna negra “espejo de los dioses” se desborda, pero hasta ahora no ha existido autoridad alguna que quiera pasar a la historia de ese municipio, como el que resolvió el añejo problema de Tixtla la inundación, excepto han pasado a la historia como los pillos que ha tenido Tixtla, es tal la desesperación de los habitantes de Tixtla, que la misma iglesia ha callado, siendo testigo mudo de las deslealtades espirituales, porque?, Porque por un lado el primer edil Gustavo Alfredo Alcaraz al observar que la milagrosísima Virgen de Natividad, no pudo salvarse ni ella misma, al grado que hasta lloró, busco refugio espiritual en el poder del “amigo” (Diablo y/o Satanás) ofrendándole mezcal de varios preparados, pan, pozole, flores y veladoras, en ese mismo lugar hizo que unas rezanderas de las que rezan de forma empírica y/o automática, oraran al amigo, a cambio de que pudiera desazolvar el agua estancada de ese municipio, al no ver resultados hoy se refugia en la ostia sagrada sangrante de Tixtla… Alfredo Alcaraz ha llegado al límite de su capacidad intelectual, poniendo en práctica sus creencias seudo religiosas, llevándose entre los pies a los damnificados que solo piden que alguna autoridad les ayude desazolvar el agua estancada, y digo que la Iglesia ha callado siendo cómplice de la ignorancia del primer edil de Tixtla, porque es de sobra sabido que a quien dos amos sirve, con ninguno queda bien, pues seguramente si la iglesia hablara con la verdad, pasaran dos cosas, la primera que al saber la verdad los feligreses sobre lo que dice la biblia de las imágenes, se quedarían sin religiosos, y la segunda ya no habría entrada de dinero fácil vía limosnas, y por ende no comerían ni andarían en los cómodos vehículos en los que circulan los prelados, queda claro que la comuna que comanda el perredista Alfredo Alcaraz, se ha convertido en una más de aquellos alcaldes que se creen inteligentes y solo la alcaldía les ha demostrado lo tartamudos de su pobre y escasa mente, sin visión ni iniciativa de llevar a sus paisanos al desarrollo de ese hoy municipio hundido en el fango del lodo y la incompetencia histórica de sus gobernantes, que inclusive esta columna duda de que tanto Vicente Guerrero Saldaña y Manuel Altamirano, hayan nacido es ese municipio, porque estos dos nunca pensaron en robar o saquear al pueblo que los vio nacer, con una visión política cultural y de desarrollo que hasta hoy es vigente, seguramente son de otro planeta… veremos
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