COLUMNA

Cosmos

Héctor Contreras Organista

«¡Los mendigos no tienen derecho a nada!»:

Bill W., co-fundador de AA

Teporocho

Alguna ocasión, el gran compositor guerrerense don José Castañón Reynoso (Pepe Castañón) nos platicó, a grandes rasgos, de dónde deriva, o cuál es la etimología del término Teporocho.

Vino a cuento el detalle debido a que le hicimos notar que en su Canción «La Bachicha», otro término que corresponde al Caló Mexicano, en el primer párrafo de esa obra musical, el autor guerrerense, citó lo siguiente:

«Vivo feliz porque sé que no me quieres,

y te agradezco que ya tengas nuevo amor;

nada me importa si yo vivo entre placeres,

y me rezumbo mis canelas con alcohol».

Don Pepe Castañón nos comentó, palabras más, palabras menos, lo siguiente:

«Tomar canela con alcohol o cualquier otro tipo de té con alcohol era propio de los Teporochos, es decir, de los borrachines, alcohólicos o ebrios consuetudinarios de las antiguas colonias de la ciudad de México.

De esos alcohólicos que amanecían vagando por las calles y sin dinero, arrastrando una cruda espantosa, buscando en las esquinas de las calles a personas que desde la madrugada, en anafres con carbón ponían a calentar agua y vendían té de canela, hojas de limón, naranjo, etcétera, casi hirviendo, con el agregado de un chorrito de alcohol, y que a los consumidores servía para curarse la cruda o resaca y para entonarse.

«Al parecer, las porciones de té costaban ocho centavos:

¡Un té, por ocho

centavos!

La voz y el ingenio popular fue reduciendo la expresión al apócope de ‘té por ocho’, para aplicárselo y señalar con ese término y con, digamos, ‘nombre propio’ a los consumidores cotidianos de la infusión.

Fue así como se generalizó el término Teporocho, conocido y aceptado en desde hace años por el común de la gente, como sinónimo de alcohólico, ya no sólo en la ciudad de México, sino en todo el país», según nos lo refirió el autor de las canciones «Tierra Colorada», «La Feria de Chilpancingo», «Trovador sin Estrella», «La Bachicha», «Sin Cero Siete Veinte» y muchas más.