COLUMNA

Entre la verdad y la ficción

Jorge Luis Falcón Arévalo

Desde desvío de fondos diseñados para becas, planes y proyectos a madres solteras, como planes etiquetados de hábitat, fueron desviados por el presidente municipal Carlos Armando bello Gómez, para otros usos que la Contraloría del Estado de Guerrero, al mando de Julio César Hernández Martínez, están en proceso de investigación; así como el actual secretario de finanzas de esa quebrada administración Hernán González Rebolledo, cuyas edificaciones de casas y compra de autos, no pueden ser certificadas por el salario que cobra en el “desempeño de sus actividades.

El Gobierno de Aguirre Rivero, ha hecho serias advertencias del mal proceder de Bello Gómez, al no administrar en bien público sino malversar los dineros de la sociedad atoyaquenses en asuntos personales.

El ineficiente alcalde, que de manera tramposa dejó en la orfandad a muchas madres solteras, tanto de la sierra como de las comunidades de Zacualpan y Cacalutla al “extraviar” recursos económicos en asuntos que están siendo indagados por la Secretaría de la Función Pública, pues son de origen federal.

Pese a que Carlos Armando Bello Gómez, se quiso entrevistar con el mandatario de los guerrerenses Ángel Aguirre, para que le quitara de encima el problema del campesinado -que es la punta del iceberg-, éste no le respondió debido a que el paro de los campesinos afecto por más de ocho horas el comportamiento del desarrollo de los surianos en la costa grande que costó millones de pesos en pérdidas; lo cual tiene molesto al gobernador.

Sedesol federal y otras instancias de gobierno de ese rango; han detenido la entrega de enseres y apoyos a Atoyac, debido a los malos manejos del alcalde, quien deja endeudado el municipio y a los atoyaquenses en un atraso social que jamás se había visto antes; ello debido a los manejos de los dineros para provecho personal y no su destino final: la sociedad// Grado Cero Press