COLUMNA

La Jaula de Dios

Jesús Pintor Alegre

«Ayuda a los damnificados por el sismo sin grilla», dijo ayer el presidente de la República en Cuajiltepec, ante el gobernador, Ángel Aguirre Rivero. La sonrisa complaciente del dueño del PRD en Guerrero, mostró al político benevolente y muy suficiente, dispuesto a sacrificar hasta que doliera.

Un hombre, el llamado Jefazo, dispuesto a sentir el dolor real y sin referencia, todo por el amor a su pueblo… claro que esa era la apariencia, en el inframundo de su universo neuronal, a saber qué era lo que en realidad pensaba. Ya ayer el gobernador o el propietario de los amarillos, hombre del poder quien cuenta con el título de propiedad inclusive, mandó a Misael Medrano Baza a limpiar las sospechas sobre la imposición de sus criterios para la designación de los candidatos perredistas, a diputados locales y presidentes municipales. Han habido acusaciones directas, aquí, por decir de alguien, el expresidente municipal de Pungarabato, Víctor Adolfo Mojica Wences, quien dijo que para elegir a los abanderados en efecto hubo encuestas y encuestadores, pero que el único encuestado fue el mandatario estatal, y los encuestadores, los cuatro líderes de las tribus más importantes del partido propiedad del de Ometepec. Medrano Baza dijo en las radiodifusoras a las que se comunicó, que tan no tuvo que ver el gobernador en la designación de candidatos, que hasta van a haber cambios porque no hay nivel competitivo en algunos municipios. Misael Medrano, en actitud patética, hay que decirlo, sumiso al del poder, anda haciendo una labor que debería competerle al dirigente perredista, Carlos Reyes Torres. Aunque claro, debe ser que el gobernador no le tiene confianza al hombre que es sirviente de David Jiménez Rumbo, y cree que mejor trabajo le podría hacer Misael Medrano Baza, a quien si hay que decirlo también, lo ha tratado muy mal, al ponerlo como un simple suplente a senador, de Socorro Sofío Ramírez, el consentido del jefe del Ejecutivo, hombre de sus simpatías y todas sus gracias. La única ilusión de Misael Medrano, es que de llegar Socorro Sofío a la Senaduría, un asunto complicado pues va en segundo lugar, es que le deje el cargo por unos tres años, mientras el exsecretario de Desarrollo Rural, se va a buscar la candidatura al gobierno del estado, bajo la idea de que la ganará, caso contrario, regresaría al Senado, y Misael Medrano, se quedaría sólo viendo como el chinito. Así que la ayuda sin grilla de la evanescencia, se pinta en todos lados, Misael Medrano fue el que le abrió la puerta del partido a Aguirre Rivero, luego de haber sido rechazado por su partido, le hizo una caravana y hasta debió haberse persignado. A los lados lo llevaban dos caballeros de compañía, vestidos como chambelanes, y quienes le enseñaron el camino al de Ometepec: del lado derecho iba Lázaro Mazón Alonso, y del izquierdo, y haciendo la roqueseñal a Armando Ríos Piter, el siempre bien portado David Jimenez Rumbo. En hombre del poder, debió de pisarse alguna vez cuando menos, la larga cola de su traje real, decorado en tres colores, para no olvidar sus orígenes, caminó con su rostro iluminado por el halo de luz que venía desde las alturas. Y bueno, esa ayuda sin grilla, se extiende, por supuesto, a todos los confines de este partido, el amarillo, que hay que mencionarlo, se ha embarrado de esos tres colores del partido vetusto, ese mismo que suponen muchos trae la varita mágica para acabar con todos los males del mundo, panacea ingrata, y que es encabezado por un analfabeta funcional. En el caso de los damnificados del sismo de 7.4 grados en la escala de Richter, ocurrido el pasado 20 de marzo, claro que se les va a ayudar sin grilla, sólo que a cada rato en los informes y la propaganda política van a utilizarlos, para engrosar su figura de benevolencia y casi unos seres de la divinidad. … Igualito como el cobro de factura que le está pasando Aguirre Rivero a los perredistas por «hacerles ganar» el estado, de la misma manera como sucedió con Zeferino Torreblanca Galindo.