COLUMNA

El Grillito Sin Censura

Alfonso Cerdenares Domínguez

**»¡¡¡No soy mosca, para que me maten a periodicazos!!!»… **El PNL-Estatal se convirtió en un bunker político…

«¡¡¡NO SOY MOSCA, PARA QUE ME MATEN A PERIODICAZOS!!!», palabras más, palabras menos, fueron las que emitió el envalentonado pseudodirigente del magisterio estatal, ahora metido a coordinador el Programa Nacional de Lectura, Héctor Acevedo Rivera que, a decir verdad, ha dejado mucho qué desear, tirando la casa por la ventana para quedar bien con «los jefes», esencialmente con la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, de quien se ha convertido en su fiel lacayo, personero y hasta «lamesuelas»; si su antecesor en el cargo hubiese sido su maestro, en tan poco tiempo lo ha superado,

pues a «Peluches» –es a ojos visto –le vale un cacahuate lo que piensen sus detractores, lo que se haga en el PNL-Estatal, al fin y al cabo las oficinas de esa coordinación las ha llenado de incondicionales que, como él, se arrastran para no irse a trabajar a escuela alguna; es más, ha «movido» a dos que tres de sus compinches y los ha ubicado en ese centro de trabajo; de ahí que ahora se note la hacinación y por los pasillos deambulen, cual zombis salidos del averno, sin hacer nada o simplemente chateando, aprovechando la red de internet inalámbrica de la que gozan los «estatales», pero de eso a tener conocimiento de cómo se trabaja o cómo se asesora a un «acompañante», está más que en chino, pues simplemente se miran unos a otros y hasta se ríen con tal cinismo que pareciese que se han bañado en manteca, pues al igual que «su jefe», todo se les resbala y les vale «máuser» lo que digan, hagan o no; Héctor «El Peluchín» Acevedo tiene su propia historia: luego de ser fallido candidato a la Secretaría General del SUSPEG, se le vio refugiado en EL PNL-ESTATAL, CUYAS OFICINAS LAS CONVIRTIÓ EN UN BUNKER POLÍTICO para impulsar a «su gallo» para presidir la Sección XVIII, Falco Neri Mosso Pérez; según sabemos, el «súpercoordinador» del PNL-Estatal creyó que la tenía ganada y hasta ya tenía planeada una enorme celebración en uno de los restaurantes más sofisticados de la capital, pero… ¡Oh!, decepción; su candidato, encabezando la planilla Verde fue ferozmente derrotado por Andrés Pacheco Parra, que estaba al frente de la planilla Amarilla y con ello, tal vez se esfume la posibilidad de que Héctor Acevedo retorne por sus fueros al SUSPEG; en fin, el también llamado «coordinador de palo», por aquello de que ni oye y ve, o como dice la vieja retahíla: «no oigo, no oigo, soy de palo, tengo orejas de pescado», sigue haciendo de las suyas en el Programa Nacional de Lectura, cargo que le ha quedado demasiado grande y, como decían los priístas hace más de seis años: «por el bien de todos», por la buena marcha del programa, lo mejor será que renuncie al puesto y la nulidad en esa dependencia es a todas luces palpable, desde «taconcitos», hasta «Petuka y Petaka», pasando, «de bolón, pin pon», por la bola de zombis que ya no encuentran cómo matar el tiempo, pero que son peor que burócratas, como peces en el agua, haciendo «nada, nada y nada»; sería bueno que el subsecretario de Educación Básica, Raúl Salgado Leyva, le llamara la atención a «Peluches», a fin de que demuestre una verdadera calidad en su trabajo y… ¿Quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenaresd@hotmail.com