NOTA
Demandarán por
daños a Felicitas
APANGO, GRO.--Miembros de la conocida familia Zacarías de esta cabecera municipal manifestaron su sorpresa ante la actitud de la alcaldesa Felícitas Muñiz Gómez, quien de buenas a primeras dio la voltereta o chaquetazo al abrir una calle de la cual se venía oponiendo, porque se cometería un vil despojo en agravio de los propietarios.
No cabe duda, «enloqueció la cabeza pazoleta», dijeron dos hermanos Zacarías, al saber el viernes ya oscureciendo, que con maquinaria de la empresa constructora, cómplice de los latrocinios la primera edil, sin aviso previo derrumbó una barda que los propietarios habían construido sobre la calle Guerrero de esta cabecera municipal.
Con esta actitud se pasó por el arco del triunfo al Tribunal de lo Contencioso Administrativo, instancia que aún no resuelve sobre el particular y donde el ayuntamiento de Mártir de Cuilapan, según expediente, se niega a despojar a los propietarios de dicho predio.
En opinión de los agraviados, la ignorante presidenta municipal, que se dice licenciada, su chaquetazo puede deberse a que el síndico, Omar Arteaga Camacho, no le ha firmado las cuentas cuatrimestrales y quien como representante legal del ayuntamiento ha firmado documentación oficial que obra en el expediente abierto en el Tribunal de lo Contencioso Administrativo y en el cual desde hace más de tres años, el ayuntamiento se ha negado a afectar a los propietarios del referido inmueble ubicado entre las calle Vicente Guerrero y Juan Alvarez.
Los afectados con la arbitrariedad, prepotencia y daños que ha causado la pazoleta autoridad municipal, manifestaron que la demandarán ante la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, así como al operador de la máquina con la cual derrumbaron la barda y a tres vecinos que han venido mintiendo ante las autoridades, al afirmar que en dicho espacio había una calle, cuando que las propias autoridades municipales lo han negado en documentación oficial, terminaron diciendo.
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