Cultura/social

La Revolución Democrática

Apolinar Castrejón Marino

En el Estado de Guerrero el asunto de la revolución «está cañón». En las campañas políticas con miras a la gubernatura, hay que estar «ojo avizor», porque de repente nos podemos dar un resbalón ante seguidores encubiertos de tal o cual candidato. Para fortuna nuestra, algunos no quisieron jugarle al «enzarapado» y declararon a tiempo, con quien estaba su corazoncito. Aunque los tacharan de traidores e ingratos.

Ahí tiene usted que en los mítines de Ángel Aguirre se apersonan muchos que antes eran priistas de «hueso colorado» y veían «con asquito» a los militantes del partido amarillo a quienes no bajaban de «perderistas». Y ahora son como hermanitos.

PRIMOS EN CAMPAÑA.

También hay cuestiones más jocosas y divertidas, pues parecen estar en un concurso como el de «Chabelo», y se cataflixian a los actores políticos de aquellos tiempos…y de estos. Otros «políticos» han visto la ocasión para salir de sus sepulcros para ser «reciclados» por «El ángel de la Costa Chica» como Jorge León, Humberto Calvo y otra docena de parásitos.

Los periodistas también están «hechos bola» con los candidatos y sus equipos de campaña. Se quejan de que la gente de Aguirre «no los invitan» a sus viajes y sus actos. Bueno, sabemos cómo les gusta andar de pachanga en pachanga y de comilona en comilona de pura «gorrita café». Tampoco les gusta que la gente de Añorve les mande tantas fotos y discursos por que les llena sus correos electrónicos.

TRES VECES ME NEGARÁS.

Otros protagónicos desesperados son los dirigentes de la Ceteg que andan haciendo ruedas de prensa para precisar que no van a votar por Aguirre lo cual «tiene bien preocupada» a la ciudadanía. Lo mismo hizo Payan Cortinas y su banda, con similares resultados.

A la gente no le gusta que Aguirre ande muy resguardado por sus guaruras, mientras que Añorve deja que la gente se le acerque, y hasta aprovecha para abrazar a los niños y a los viejecitos. Y como si no, Aguirre está «jalando» multitudes, y al percatarse de esto, los que antes eran sus amigos y correligionarios, se dan de topes contra la pared. Y entre todos esos, puede haber algún desquiciado que piense que «muerto el perro, se acabó la rabia» ¿O no?

COOPELAS O VOTAS.

Mientras tanto, las huestes de Añorve, han echado a andar la maquinaria priista para asaltar «Casa Guerrero». A los líderes de las colonias les han impuesto una buena cantidad de «promovidos» es decir, familiares, vecinos y amigos que se comprometan a votar por el pri. A los pueblos y localidades más apartadas envía «representantes» y «delegados» a organizar marchas y mítines «matraqueros» para dar la ilusión de la «popularidad» del «Chuky». Por lo que se ve, siguen creyendo religiosamente en el voto rural

Y sabemos de buena fuente que en los centros de trabajo, como en los tiempos del priismo corporativo en que los burócratas debían votar por el pri para que pudieran cobrar, están comprometiendo a los empleados a incorporarse a la campaña de Añorve, so pena de represalias laborales. ¿No le parece ridículo que les hayan dado calcomanías para «medallones» hasta a rabajadores que no tiene automóvil? Muchas de estas calcomanías se miran pegados en las puertas, en carretillas y hasta en botes de basura.

REVOLUCIÓN EN GUERRERO.

No nos extrañamos que los políticos engañen a la gente, porque está en su naturaleza. Pero una cosa es que mientan y engañen, y otra distinta que ellos mismos se crean sus mentiras. Ahí tiene al primo «chaparrito» que manda a sus secuaces a hacer barullo a algún restaurante, jardín o plaza pública, y la gente se acerca con curiosidad a ver de qué se trata. Pero cuando se dan cuenta de que es «El Primo» se retiran y solo quedan unos cuantos gatitos.

Pero quizá sea una buena forma de celebrar el Centenario de la Revolución Mexicana, pues cuentan nuestros abuelos que la mentada revolución era una cosa atroz en estas regiones del sur del país. Sabían que había dos bandos, el del gobierno y el de «los pronunciados», más para efectos prácticos, ambos eran iguales: ladrones, arbitrarios y farsantes. Nada era como se ve en las películas de Pedro Infante.

LAS REVOLUCIÓNES.

Y es que los cambios revolucionarios, han de percibirse como súbitos y violentos, ser una ruptura del orden envejecido, una discontinuidad evidente que afecte de forma decisiva las estructuras que se desprecian. De no traer consecuencias trascendentales, debería hablarse mejor de una evolución, de una transición o de una crisis.

Las revoluciones son consecuencia de procesos históricos y de construcciones colectivas, que considera necesario que haya una nueva unión de intereses frente a una vieja alianza de pillos. Si no se da un cambio y transformación radical y profunda respecto al pasado inmediato debería hablarse mejor de una revuelta. Una Revolución puede ser política, social o económica:

VERDADEROS CAMBIOS.

La Revolución francesa fue un movimiento fundamentalmente político, porque se trataba de sustituir la monarquía absoluta. La Revolución industrial tuvo un carácter esencialmente económico, por la transformación respecto de la época precedente (la preindustrial) con el uso de nuevas técnicas, fuentes de energía, invención de maquinarias, medios de transporte innovadores, y aumento de la capacidad productiva con la sustitución de los talleres artesanales por las fábricas.

La revolución soviética desterró el zarismo e implantó el socialismo. La revolución maoísta implantó una modalidad del socialismo para combatir la pobreza e ignorancia de los chinos y volverlos productivos. La revolución cubana desterró la corrupción, la drogadicción y la prostitución causada por los Estados Unidos e implantó un modelo de socialismo férreo de control sobre los medios de producción.