Columnas
Apunte de lectura
El placer de servir de Gabriela Mistral Toda la naturaleza es un anhelo de servicio. Sirve la nube. Sirve el viento. Sirve el surco. Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú. Donde haya un esfuerzo que todos esquiven, acéptalo tú. Sé el que apartó la piedra en el camino, el odio entre los corazones y la dificultad del problema. Hay la alegría de ser sano y de ser justo. Pero sobre todo, la hermosa, la inmensa alegría de servir. ¡Qué triste sería el mundo si todo en él estuviera hecho, si no hubiera un rosal que plantar, una empresa que emprender! No te llamen solamente los trabajos fáciles. ¡Es tan bello hacer lo que otros esquivan! Pero no caigas en el error de que sólo se hace mérito con grandes trabajos. Hay pequeños servicios que son buenos servicios: adornar una mesa, ordenar una casa, peinar un niño. Aquél es el que critica. Este es el que destruye. Tú sé el que sirve.
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.